La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) pidió al Congreso de la Unión y al gobierno federal ampliar la discusión sobre la reforma judicial, debido a la “polarización sin precedentes” que los cambios a la Constitución han generado en el país.
A través de un comunicado, la Iglesia católica aseguró que “México es un gran país que no se inventa, una y otra vez, con la llegada de nuevas administraciones”, sino que su misma “grandeza” se demuestra en el “ordenamiento jurídico e instituciones que aseguren un mínimo de civilidad” en la sociedad.
“Consideramos que la reforma constitucional al Poder Judicial que está en curso debe ser más ampliamente discutida y analizada por parte del Poder Legislativo, siguiendo el principio de subsidiariedad, pilar fundamental de la doctrina social de la Iglesia, que reconoce y promueve la participación de todos los actores sociales en las decisiones que afectan a la comunidad”, destacó el Episcopado.
La Iglesia solicita al Congreso una serie de acciones específicas, para poder agotar el diálogo en torno a la reforma judicial:
La Iglesia destacó que el respeto al Estado de Derecho “no es solo una necesidad política, sino una exigencia ética” en cualquier gobierno.
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También advirtió que podría haber “consecuencias graves” para la convivencia social si prevalece la falta de diálogo entre fuerzas políticas y sociedad civil, así como la falta de acuerdos entre los tres poderes del Estado.
El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) avaló la acción declarativa que le da luz verde al Instituto Nacional Electoral (INE) para continuar con el proceso electoral extraordinario del Poder Judicial 2024-2025, para elegir por primera vez a personas juzgadoras en junio del próximo año.
Con los votos a favor de Felipe de la Mata, Alfredo Fuentes y Mónica Soto; y de Reyes Rodríguez y Janine Otálora, en contra; el pleno de la Sala Superior del Tribunal Electoral otorgó al INE la certeza jurídica para continuar con los preparativos de la elección.