Clara Brugada logró reunir a toda la nueva élite de Morena en su toma de protesta y en el primer evento como jefa de Gobierno de la Ciudad de México, incluyendo a la presidenta Claudia Sheinbaum y la nueva dirigencia del partido guinda, encabezada por Luisa María Alcalde y el secretario de Organización, Andrés López Beltrán.
Ya sin el ex presidente, Andrés Manuel López Obrador, la nueva generación de morenistas que se han hecho de la cúpula del partido, y figuras que hoy son parte del gabinete federal como Marcelo Ebrard y Mario Delgado, estuvieron presentes para la toma de protesta de Brugada como nueva mandataria capitalina.
Previo incluso a su llegada al Congreso, los morenistas ya la esperaban en la sede del Congreso de la CDMX, en el antiguo recinto de Donceles, para que, en cuanto llegaran, pudieran gritar: “¡Es un honor estar con Clara hoy!”, y demás consignas de apoyo.
Brugada preservó las formalidades y saludó por igual a los asistentes morenistas, líderes de los partidos de oposición y diputados de bancadas de otros colores, pero no dudó en asegurar que su Gobierno sería parte del “segundo piso de la Cuarta Transformación”.
Un segundo piso protagonizado por figuras como Alcalde, López Beltrán, Sheinbaum, Brugada, Citlalli Hernández, Jesús Ramírez Cuevas, César Craviotto, todos invitados a la toma de protesta y funcionarios de las nuevas administraciones federal y capitalina.
Complementario a ello, ya en su festejo realizado en el Teatro Metropolitan, la jefa de Gobierno aprovechó el recinto lleno de simpatizantes del guinda para referenciar el trabajo de Morena en la capital del país.
Fue ahí, que dio un discurso detallando las metas de su administración, pero que cerró con el lema del partido que fue heredado por López Obrador, un grito acompañado por decenas de morenistas. “Vamos a retomar los principios de la Cuarta Transformación: no mentir, no robar y no traicionar al pueblo”.
Tras llegar al recinto de Donceles acompañada de Ernestina Godoy, quien hoy se desempeña como Consejera Jurídica de Presidencia, Brugada fue arropada por Alejandro Encinas, pieza clave de su campaña y hoy secretario de Planeación y Ordenamiento Territorial.
Llegaron Eduardo Ramírez, Gobernador electo de Chiapas; su homóloga en Veracruz, Rocío Nahle, junto con su antecesor Cuitláhuac García; así como el Gobernador electo de Puebla, Alejandro Armenta.
Alcalde, la nueva dirigente de Morena, expresó que Brugada tendría su respaldo y acompañamiento desde el partido, antes de tomar su lugar sentada junto al secretario de Organización del partido, López Beltrán, con quien platicó a lo largo de la sesión.
Gerardo Fernández Noroña, presidente del Senado y el encargado de que fuera aprobada la Reforma Judicial en la cámara alta antes de la salida de López Obrador, expresó que la nueva jefa de Gobierno era una “gran aportación”, y luego procedió a tomar su lugar en la primera fila frente a la tribuna.
🔺#Ahora | El presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña llega al Congreso para la toma de protesta de @ClaraBrugadaM como jefa de Gobierno de cdmx.
“Va a ser una gran aportación”, sobre Brugada.
📹 @tmaresriv pic.twitter.com/jeIj5BakwC
— Animal Político (@Pajaropolitico) October 5, 2024
Los miembros del gabinete entrante se colocaron en la primera fila del salón, entre ellos César Craviotto, nuevo secretario de Gobierno de la Ciudad, y otros funcionarios que forman ya parte del equipo de Brugada, como Alejandra Frausto, Inti Muñoz, Pablo Yanes, Julia Álvarez Icaza y Raúl Basulto.
Paco Ignacio Taibo y el Senador Francisco Chiguil –suplente de Omar García Harfuch– fueron otros de los invitados de la jefa de Gobierno.
Una vez que atravesó el umbral del Congreso, Brugada fue recibida por los morenistas con gritos de “¡jefa de Gobierno!”, en dos filas a lo largo del pasillo que llevaban a la tribuna.
Sin ocultar su afinidad política, ahí estaban ya las ministras de la Suprema Corte, Yassmin Esquivel Mosso y Lenia Batres, quienes se sentaron durante la sesión junto con los nuevos mandatarios morenistas y la diputada Olga Sánchez Cordero, ex ministra de la SCJN.
Del lado derecho del sitio estuvieron como invitados la generación entrante de alcaldes y alcaldesas de la Cuarta Transformación, entre quienes se encontraban Gabriela Osorio de Tlalpan, Nancy Núñez de Azcapotzalco, y la sucesora de Brugada en Iztapalapa, Aleida Alavez.
En la primera sección de asientos, antes del Pleno, quienes fueron figuras clave de Morena y el Gobierno federal en la administración anterior: Jesús Ramírez Cuevas, quien cambió la Vocería de Presidencia por la coordinación de asesores; Citlalli Hernández, ex senadora y anteriormente secretaria general del partido guinda; y la secretaria de Comunicación de Morena, Camila Martínez.
Alrededor de la mitad de la sesión en la que tomó protesta Brugada, los asistentes guardaron silencio. La Presidenta había llegado a las inmediaciones del Congreso para acompañar a Brugada.
Sheinbaum ingresó al sitio con gritos de “¡Presidenta!”, y se sentó a la derecha de Martha Ávila Ventura, presidenta de la Mesa Directiva del Legislativo capitalino, a sólo un lugar de donde estaba Brugada.
En su discurso, la nueva jefa de Gobierno recalcó que era “tiempo de mujeres”, siendo que en ese preciso momento estaba compartiendo el espacio con la primera mujer en ocupar la Presidencia de la República, y quien había sido su antecesora.
“El segundo piso de la transformación de esta ciudad consiste en hacer la revolución de las mujeres, se trata de hacer una revolución pacífica de las mujeres. Se trata de hacer un cambio radical que viene de raíz, reconociendo todo lo que se ha avanzado con gobiernos progresistas que nos antecedieron”, expresó sobre la nueva generación de morenistas y servidoras públicas.
Entre las políticas que Clara Brugada se comprometió a implementar, fue la cercanía con la población de la Ciudad de México.
Como primer acto, en vez de hacerse acompañar en el escenario del Teatro Metropolitan por su gabinete, se sentaron a sus lados representantes de barrios y pueblos originarios de Xochimilco, Milpa Alta y otras demarcaciones; y personas de cada gremio posible: bomberos, organilleros, cocineros, constructoras, maestras.
Aunque todavía estaban presentes varias figuras de Morena, Sheinbaum y otros mandatarios ya se habían retirado del sitio.
Afuera, ciudadanos de a pie esperaban que saliera la jefa de Gobierno para acompañarla en su recorrido al Zócalo capitalino, donde daría su último mensaje antes de ingresar al Antiguo Palacio de Ayuntamiento.
Te puede interesar: Clara Brugada vuelve a Iztapalapa y anuncia que consultará a la población sobre 100 Utopías en CDMX
Entre máscaras de López Obrador, una botarga de la ex alcaldesa de Iztapalapa, aplausos y música, Brugada llegó a la plancha para dar inicio a la segunda administración morenista en la Ciudad de México.