Tras el sorteo del Poder Judicial el sábado, en que se decidió qué juzgados y magistraturas se someterán a votación en junio de 2025 y cuáles en 2027, en redes sociales circularon comentarios que afirmaban que los jueces se elegirían por sorteo. 

La reforma judicial sí contempla el método de insaculación, aunque estos sorteos servirán para depurar las listas de candidaturas, que finalmente se someterán a voto popular.

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¿Qué se definió con la tómbola del sábado en el Senado?

El sorteo por tómbola que se realizó el sábado 12 de octubre en el Senado arrojó como resultado la lista de los que se elegirán en el primer proceso electoral. El resultado fue una lista de 850 plazas: 464 magistraturas y 386 juzgados federales que se votarán en 2025.

Tras el sorteo del sábado, las personas juzgadoras al frente de los cargos sorteados no perderán su trabajo en automático. Sino que pueden elegir participar en la elección del mismo o de otro cargo, o bien, no participar y terminar sus funciones el 31 de agosto de 2025.

“En el caso de los elegidos en la tómbola fueron completamente al azar. Se garantizó la imparcialidad, así como el respeto en todo momento a los derechos humanos de las y los juzgadores”, aseguró.

Aunque por otro lado, jueces y magistrados lamentaron que su situación futuro laboral se definiera a través de un sorteo. Aquí te presentamos historias de distintos jueces y magistrados quienes habían obtenido su puesto de trabajo a través de exámenes y preparación, y que ahora saben que su cargo estará en juego en una elección en la que muchas y muchos aún no deciden si participarán o no, y para la cual aún no hay reglas bien establecidas.

La tómbola realizada el sábado pasado no es la única que se aplicará para el proceso de renovación de integrantes del Poder Judicial de la Federación. La reforma también contempla otra insaculación para definir las candidaturas de las personas juzgadoras.

En el Artículo 96 se planteó que para la renovación de cargos se crearán Comités de Evaluación en cada Poder de la Unión, que como te contamos en esta nota, revisarán los perfiles de las personas que deseen postularse y establecerán los criterios para su designación como candidatas.

En el texto constitucional se detalla que el comité de cada Poder de la Unión propondrá listas de 10 posibles candidaturas para los cargos de ministras y ministros de la Corte, magistraturas del TEPJF y Tribunal de Disciplina Judicial. Así como 6 posibles nominaciones para las magistraturas de circuito y juzgados de distrito.

Dichas listas se depurarán mediante insaculaciones o sorteo para ajustarlo al número de postulaciones para cada cargo, observando criterios de paridad de género.

Mientras que en la iniciativa de Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales (LGIPE), aún en discusión en la Cámara de Diputados, se propone que para ajustar las listas al número de cargos en juego, se realice una nueva insaculación, similar a la ocurrida en el Senado.

Tras esta segunda fase de sorteos por tómbola, las listas de los 10 aspirantes a la Corte, el TEPJF y el Tribunal de Disciplina se reducirán a tres personas que ocuparán cada candidatura; mientras que las listas de seis aspirantes a una magistratura o juzgado quedarán con dos candidaturas por cargo.