Para entender mejor
Alrededor de 600 personas de la academia e investigadores solicitaron a la Cámara de Diputados que al revisar y discutir la iniciativa sobre Ley General en materia de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación (HCTI) presentada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, también se analicen las cinco iniciativas existentes.
El Colectivo por la Ciencia aseguró que la discusión no se puede reducir al dictamen de la iniciativa presidencial presentada en diciembre de 2022.
“Es necesario dictaminar las cinco iniciativas existentes y obtener lo mejor de cada una de ellas para la elaboración de la nueva ley”, señalan los investigadores en un pronunciamiento.
En su documento dan algunas recomendaciones a los legisladores, luego de que la Cámara de Diputados y el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) anunciaron un parlamento abierto, con al menos siete foros, con el fin de garantizar la participación de los sectores involucrados.
El colectivo recomendó que el formato del parlamento abierto debe concretarse en foros con temas que cubran los aspectos centrales del mandato constitucional e incorporen las diversas perspectivas presentadas en los últimos años; además, proponen que sean nueve y no siete foros.
También solicitaron precisar el número de mesas técnicas, los temas a tratar y quiénes serán los invitados y que la convocatoria se dé a conocer con tiempo suficiente.
Además, el colectivo señaló que se “deberá asegurar que los foros sean debidamente atendidos por los miembros de las Comisiones respectivas, que sus conclusiones sean vinculantes y que se le dará una debida difusión para el conocimiento de todos los interesados en el proceso”.
“Reiteramos el compromiso y disposición de las y los académicos y miembros diversas instituciones del sector de CTI para colaborar con la redacción de una Ley que impulse las potencialidades de la ciencia, las humanidades, la tecnología y la innovación para el aseguramiento de un mayor bienestar para nuestro país. La participación de todos permitirá generar los nuevos consensos que requiere la Ley”, destacaron.
El Ejecutivo federal envió la iniciativa a la Cámara de Diputados para sustituir el ordenamiento vigente por la Ley General en materia de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación y transformar el actual Conacyt en Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación.
Según argumenta el gobierno, el Conacyt toleró la simulación al acreditar programas profesionalizantes, en particular de universidades e instituciones de educación superior del sector privado, poco o nada vinculados a la investigación humanística o científica, cuyo reconocimiento sirvió como señuelo del mercado para atraer clientes que, con el subsidio público que recibían, pagaban costosas cuotas por inscripción y colegiaturas.
Agrega también que el otorgamiento de becas de posgrado obedeció a arreglos poco transparentes que respondieron a intereses políticos y económicos.
Por ello, dice, ahora se busca que los recursos públicos que destine el gobierno se entreguen sin intermediarios a las personas becarias, humanistas, científicas, tecnólogas e innovadoras, y se garantice la asignación universal de becas a estudiantes de universidades públicas inscritas en programas de maestría y doctorado orientados a la investigación en ciencias y humanidades.