Rastrillos, guantes y costales. Estas fueron las sencillas y principales herramientas que un grupo de ciudadanos en Guanajuato capital utilizaron para limpiar y rescatar el río Pastita en plena pandemia de Covid-19. Tres años después, cada sábado se organizan para mantener limpio un espacio público que solía estar abandonado y contaminado y que se reapropiaron.
Micah Stet, originario de Cleveland, Estados Unidos, vive desde hace años en el antiguo barrio de Pastita. Durante la pandemia tuvo la iniciativa de limpiar el río y, conforme más personas se fueron involucrando, él y sus vecinos le dieron forma y nombre a su propuesta: Proyecto Pastita.
“Lo chido es que yo pensaba que era el único a quien le importaba ese río, pero resulta que un montón de personas se sentían igual, solo que faltaba como una organización, faltaba un grupo que fuera seguido”, dice Stetz en entrevista con Animal Político, quien también ha vivido en Alemania.
Más de ‘Periodismo de soluciones’: Jardines polinizadores, una forma de rescatar la flora y fauna dentro de la mancha urbana
Cuando inició el proyecto, recuerda Micah, no conocía nadie, por eso tuvo que invitar a personas a través de Facebook y vecinos que no conocía. Ahora, el proyecto es tan reconocido que acuden no solo vecinos, sino además turistas, estudiantes y hasta empresas colaboran con ellos.
Desde antes que iniciara la pandemia, Micah acudía “de vez en cuando” a limpiar el río Pastita que, a pesar de ser el único río activo que cruza toda la ciudad y desemboca en la Presa de Mata, estaba contaminado, según explica Paulina Mendoza, otra de las colaboradoras del proyecto.
Te puede interesar: ‘Caricioterapia’ y atención: el trabajo de rescatistas para rehabilitar perros que vivieron maltrato extremo
De acuerdo con la Comisión Estatal de Agua de Guanajuato, en el estado hay 15 mil 297 pozos de agua, de los cuales se extraen 3 mil 824 millones de metros cúbicos mientras que recarga de los mantos freáticos es de solo 2 mil 787 metros cúbicos. En otras palabras, el estado enfrenta un déficit de mil 041 millones de metros cúbicos anuales.
Incluso, el representante de la Secretaría de Agricultura federal, Rafel Castillo Bermúdez, reconoció recién el pasado mes de marzo que Guanajuato es el segundo lugar a nivel nacional por estrés hídrico, situación que afecta a las ciudades con más población como León, Celaya, Irapuato y Salamanca, y que la zona está cada vez más cerca del Día Cero, como ocurrió con Nuevo León el año pasado.
“Y no sé por qué, pero después de que inició la pandemia, empecé a limpiar la zona más. Yo creo que tal vez por aburrimiento -reconoce Micah entre risas-, pero es como algo que siempre quise hacer”.
Así, recuerda, empezó a hacerlo en solitario, cada vez más y más, hasta que un día un amigo suyo que lo vio trabajando en el río le preguntó por qué no invitaba a más gente.
Más sobre ‘Periodismo de soluciones’: Jóvenes Orquestas, un proyecto de música para niños y adolescentes de colonias precarizadas
“Y yo no pensaba que les iba a interesar, pero igual lo intenté y abrí una página de Facebook y sí, vino gente y siguen viniendo hasta ahora”, recuerda Micah quien conocía a poca gente en la ciudad porque apenas había llegado en 2017. “Me sorprendió un montón que les interesaba, porque yo cuando lo anuncié no conocía mucho del barrio”.
Una de las primeras personas en unirse fue la escritora y poeta Paulina Mendoza, su vecina, que con el tiempo también se volvió su amiga e incluso le tocó tomar la batuta del proyecto meses después. Ella se dedica a escribir poesía narrativa, cine y ensayo, y sobre organización de grupos aprendió sobre la marcha, junto con sus compañeros.
Paulina recuerda que con tan solo ocho personas el proyecto comenzó a gestarse para que las personas voluntarias comenzarán a ir todos los sábados de 10 a 1 de la tarde.
Primero se reunían para quitar los residuos sólidos, después se unieron para reportar drenajes, rehabilitar y sembrar plantas polinizadoras como Achicoriaeuropea, Aceitilla y Altea, entre otras especies que escogieron con asesoría de algunos biólogos.
Finalmente se reunían también para hacer algunos eventos comunitarios y culturales que ayudaron a que otra vez se creará un contacto social entre la comunidad, perdido años atrás.
“Y tiene un vínculo emocional importante en mí y creo que también en muchas otras personas involucradas, porque lo hemos platicado, y lo tiene porque comenzó con la pandemia, que además fue un momento de mucha urgencia, de mucha emergencia, pero también de darnos cuenta que la naturaleza era necesaria, para estar bien para nuestra salud y que además teníamos que tener un vínculo horizontal con la naturaleza”, señala Paulina, quien actualmente estudia un doctorado en Historia del Arte.
Con esta idea de preservar el entorno natural coincide Micah quien no lo considera como una iniciativa individual.
Más de ‘Periodismo de soluciones’: Atención psicológica en la estación Juárez: otra forma de atender el suicidio en el Metro
Micah relata que en su ciudad de origen hay un río que la atraviesa y recuerda el relato de sus papás de cuando era un espacio sucio y lleno de basura y aceites que en los 70 se incendió y estuvo cerca de tres días quemando todo alrededor. Hoy, tras trabajos de limpieza, es un lugar limpio en el que incluso se puede nadar.
“Al principio el Proyecto Pastita se sentía como una tarea, pero ahora sé que voy al río y voy a ver gente y ellos igual. Hay personas que vienen cada semana y otras que vienen solo de vez en cuando y otras más solo una vez, son turistas, pero igual es muy bonito compartir un espacio que antes fue muy dejado al lado y ahora es un punto de reunión para el barrio“, agrega.
“Usualmente llevamos rastrillo, guantes y costales y nuestra pancarta del proyecto, necesitamos recoger las cosas que están en una casa que nos presta una de las voluntarias del proyecto, que se llama Eva Moral y que nos presta su espacio, que está como 100 metros del río, ahí mismo en Pastita”.
Quien habla es Aurora Vilco, artista de circo y actual encargada de Proyecto Pastita, que entró al proyecto a mediados de junio de 2021.
Aurora relata cómo se desarrollan las actividades para rescatar el río Pastita, un espacio que considera importante no solo por su naturaleza, sino también porque sirve como un espacio para crear comunidad.
En un sábado normal, ella es la que espera desde las 10:00 hasta las 10:30 de la mañana en la entrada del río para ver si llegan más voluntarias o voluntarios. La intención de esperarlos en la entrada es para, como vayan llegando, invitarles y decirles “aquí están los guantes, aquí están las bolsas, caminen por aquí o caminen por allá”.
En caso de que se cumpla esa hora y no lleguen más personas, Aurora comienza a alejarse de la entrada principal y se pone a recoger basura o rastrillar el espacio para quitar hierbas y marcar el camino.
“Es muy libre, es decir, si tú quieres ir a recoger basura y terminaste viendo el espacio y estuviste ahí cuatro horas meditando y de repente regresas con un saco de bolsa con la mitad, no pasa nada, la intención también es esa, que la gente descubra el proyecto, descubra el espacio”, dice.
Por eso asegura que el proyecto ha generado comunidad, pues la gente no solo va a “trabajar como robots a recoger basura y hacer que el lugar sea más bonito”, si no que a veces pueden estar hasta 40 minutos platicando, conviviendo y terminar en otro lugar platicando o bebiendo algo juntos.
“Por eso es un espacio para conocer no solamente el río ni para reconocer nuestras relaciones con la naturaleza, sino también para reconocernos como seres humanos y como seres sociales, como un espacio de crear comunidad también en espacios diversos”, dice Aurora.
De acuerdo con Aurora, actualmente el proyecto ya está vinculado con algunas escuelas de la zona para que lleven a estudiantes de vez en cuando y caminen por el río para que puedan ver lombrices acuáticas, arañas, aves, halcones y un sinfín de especies más que habitan en las inmediaciones del río Pastita.
-¿Y qué invitación le harías a la gente para tomar acción si tiene, por ejemplo, un río contaminado cerca de su casa?
“Yo creo que las personas que tenemos algún espacio, algún ecosistema, que empieza a contaminarse, es importante tomar acción, generar sociedad, generar comunidad para empezar a identificar qué está sucediendo con ese lugar, porque el día de mañana eso los va a afectar. Si el medio ambiente no está sano, nosotros no podemos estar sanos”, concluye.
Después de que el mes pasado el resort norcoreano de Wonsan Kalma abriera sus puertas, recibió al primer grupo de turistas extranjeros.
Un nuevo resort de playa en Corea del Norte -ampliamente criticado por grupos de derechos humanos debido al duro trato a los trabajadores durante su construcción- recibió su primer grupo de turistas rusos.
Conocido como Wonsan Kalma, el complejo fue inaugurado en una gran ceremonia el mes pasado por el líder norcoreano, Kim Jong-un, quien lo elogió como un “destino turístico y cultural de clase mundial”.
Los detalles de la construcción de este resort se han mantenido en secreto en un país prácticamente cerrado al mundo exterior.
BBC Verify ha estudiado imágenes satelitales, obtenido documentos internos de planificación y ha hablado con expertos y antiguos funcionarios norcoreanos sobre sus preocupaciones por los abusos de derechos humanos durante la construcción del sitio.
Kim Jong Un pasó gran parte de su juventud en Wonsan, y antes de la construcción del nuevo complejo turístico, la ciudad fue un popular destino vacacional para la élite del país.
“Cuando se planeó la zona turística de Wonsan al principio… la idea era atraer a alrededor de un millón de turistas mientras que se mantenía como una zona cerrada al mismo tiempo”, dice Ri Jong Ho, un alto funcionario de economía en Corea del Norte, quien participó en las primeras etapas de planificación del complejo pero que desertó en 2014.
“La intención era abrir un poco Corea del Norte”.
En 2017, un año antes de que comenzara la construcción, Kim envió una delegación a España en una misión de investigación en la cual el equipo recorrió el complejo turístico de Benidorm.
La delegación norcoreana “incluía políticos de alto rango y numerosos arquitectos que tomaron muchas notas”, recuerda Matías Pérez Such, miembro del equipo español que acogió al grupo en un recorrido que incluyó visitas a un parque temático, hoteles de gran altura y un puerto deportivo.
Un folleto norcoreano con un mapa del complejo turístico muestra 43 hoteles identificados a lo largo de la playa, así como casas de huéspedes en un lago artificial y zonas para acampar.
Hemos comparado estas ubicaciones con imágenes satelitales de alta resolución, aunque no podemos verificar si realmente se han completado y están listas para recibir visitantes.
Un parque acuático, con imponentes toboganes amarillos, se encuentra apartado de la playa.
Más al norte, se encuentra un barrio de ocio que incluye edificios identificados en el plano como un teatro, centros recreativos y de fitness, y un cine.
Imágenes satelitales que comenzaron a tomarse a principios de 2018 y que se registraron durante 18 meses revelan la aparición de decenas de edificios a lo largo de los 4 km de costa.
Para entonces, ya se había completado alrededor del 80 % del complejo turístico, según una investigación realizada por la empresa de imágenes satelitales SI Analytics, con sede en Corea del Sur.
Sin embargo, tras esta frenética construcción, las obras parecen haberse detenido.
La construcción se reanudó tras una reunión en junio de 2024 con Kim y Vladimir Putin, donde el presidente ruso afirmó que animaría a sus ciudadanos a visitar los centros turísticos de Corea del Norte.
Este rápido ritmo de construcción ha suscitado preocupación por el trato que reciben quienes trabajan en el lugar.
La ONU ha denunciado que en Corea del Norte se use un sistema de trabajo forzoso, en particular las “brigadas de choque”, en las que los trabajadores a menudo se enfrentan a duras condiciones, largas jornadas y una remuneración insuficiente.
James Heenan, de la Oficina de Derechos Humanos de la ONU en Seúl, afirma: “Hay informes de que el complejo se construyó utilizando lo que llaman brigadas de choque”, declaró Heenan.
“También hemos visto informes de que la gente trabajó 24 horas al final para terminarlo, lo que me suena a una brigada de choque”.
La BBC habló con un norcoreano que sirvió en brigadas de choque y eventualmente llegó a dirigirlas.
Aunque Cho Chung Hui —quien posteriormente desertó— no participó en la construcción del complejo turístico de Wonsan, recordó las brutales condiciones de las brigadas que supervisó.
“El principio de estas brigadas era que, pasara lo que pasara, había que completar la tarea, incluso si te costaba la vida”, dijo.
“Vi a muchas mujeres sometidas a un gran esfuerzo físico y con una alimentación tan deficiente que sus periodos se detuvieron por completo”.
Kang Gyuri, quien trabajó en Wonsan antes de huir a Corea del Sur en 2023, afirma que su primo se ofreció como voluntario para laborar en la obra porque lo veía como una vía de acceso a la residencia en Pyongyang, la capital del país, reservada para ciudadanos de confianza del régimen.
“Apenas podía dormir. No le daban suficiente para comer”, dijo.
“Las instalaciones no están bien organizadas; algunas personas simplemente mueren mientras trabajan y las autoridades no se hacen responsables si caen muertos”.
Kang también afirmó que los residentes de Wonsan fueron expulsados de sus hogares a medida que el proyecto del complejo turístico se expandía, muchas veces sin compensación.
Aunque no es un caso relacionado con lo que contó Kang, BBC Verify identificó mediante análisis satelital la demolición de edificios cerca de una carretera principal que conduce al complejo.
En su lugar, ahora se ven bloques de pisos más grandes.
“Simplemente demuelen todo y construyen algo nuevo, sobre todo si está bien ubicado”, dijo Kang.
“El problema es que, por muy injusto que parezca, la gente no puede hablar abiertamente ni protestar”.
La BBC le pidió expresiones a funcionarios norcoreanos, pero no tuvo respuesta.
Corea del Norte ha estado prácticamente cerrada a los visitantes extranjeros, y en los últimos años solo se han permitido ciertos viajes estrictamente controlados.
Wonsan Kalma no solo se considera un factor importante en la recuperación de la economía del sancionado país, sino que también fortalece sus lazos con Rusia, que se han estrechado recientemente gracias a su apoyo militar a la guerra de Moscú en Ucrania.
Según los primeros documentos de planificación consultados por BBC Verify, el objetivo inicial era atraer a más de un millón de visitantes, y se esperaba que los turistas extranjeros procedan principalmente de China y Rusia.
Hemos revisado las páginas web de agencias turísticas tanto en China como en Rusia en busca de anuncios que promocionen viajes al nuevo complejo turístico.
Ninguna de las agencias chinas que consultamos anunciaba viajes a Wonsan. Sin embargo, en Rusia, identificamos tres agencias que ofrecían tours que incluían Wonsan Kalma.
A principios de julio, llamamos a una de las agencias rusas haciéndonos pasar por un cliente interesado, una semana antes de su primera salida programada para el 7 de julio, y nos informaron que había atraído a 12 personas de Rusia.
El viaje de una semana a Corea del Norte, que incluía tres días en el complejo turístico de Wonsan, costaba US $1.800 dólares, un 60 % más que el salario mensual promedio en Rusia.
Según este operador turístico, se han programado dos viajes más para agosto.
Contactamos con las otras dos agencias que ofrecían paquetes turísticos similares, pero se negaron a revelar cuántas personas se habían inscrito.
Andrei Lankov, experto en relaciones ruso-norcoreanas de la Universidad Kookmin de Seúl, afirmó que era muy improbable que Wonson Kalma se hiciera muy popular entre los visitantes rusos.
“Los turistas rusos pueden ir fácilmente a lugares como Turquía, Egipto, Tailandia y Vietnam, que son muy superiores a todo lo que Corea del Norte pueda desarrollar”, afirmó.
“Los estándares de servicio son más altos y no se está bajo supervisión constante”.
Información adicional de Yaroslava Kiryukhina, Yi Ma y Cristina Cuevas. Gráficos de Sally Nicholls y Erwan Rivault.
Haz clic aquí para leer más historias de BBC News Mundo.
Suscríbete aquí a nuestro nuevo newsletter para recibir cada viernes una selección de nuestro mejor contenido de la semana.
También puedes seguirnos en YouTube, Instagram, TikTok, X, Facebook y en nuestro nuevo canal de WhatsApp.
Y recuerda que puedes recibir notificaciones en nuestra app. Descarga la última versión y actívalas.
Utilizamos cookies propias y de terceros para personalizar y mejorar el uso y la experiencia de nuestros usuarios en nuestro sitio web.