Los videojuegos han evolucionado tanto que ahora muchos niños no conocen lo que es ir a un arcade y echar las retas de King of Fighters en una maquinita, porque todos sus juegos los tienen en casa.
Sin embargo, hay algunos lugarcitos en CDMX que se rehusan a cambiar y siguen teniendo un chorro de juegos clásicos para jugar con tus amix y gastar tu dinero cada vez que pierdes una vida.
Así que si extrañas pasar Metal Slug con un público detrás de ti viendo cómo los jefes te matan 100 veces, dar una cátedra de baile en Dance Dance o si vas por el score más alto en Pac-Man, acá te dejamos una lista de arcades en CDMX para que pases un buen rato.
Este arcade/museo cuenta con más de 5 mil artículos relacionados al gaming que van desde maquinitas, videojuegos de consola, mesas de pinball y más que podrás disfrutar.
Y si quieres subir de nivel, acá también podrás disfrutar de experiencias en realidad virtual y cuenta con servicio de comida, por lo que podrás echarte unas chelitas mientras te diviertes.
Dónde: Primavera 106, Ángel Zimbrón, Miguel Hidalgo.
Ver esta publicación en Instagram
Da un viaje a los 80 en este arcade donde encontrarás todo lo que buscas: juegos, música y comida.
Aquí no solo encontrarás maquinitas como la de Marvel vs Capcom, sino que cuenta con las famosas Pump It, donde se arman las retas de baile a todo lo que da. Lo mejor de todo es que puedes apartar el lugar para organizar tus eventos privados e invitar a todas tus amistades.
Dónde: Av. Cuauhtémoc 19, Roma Nte., Cuauhtémoc.
¿Te imaginas combinar pizza, chela, música y videojuegos? Pues eso es justo lo que ofrece este bar de maquinitas que a cualquier gamer le gustaría visitar.
Disfruta tanto de maquinitas con juegos clásicos como Street Fighter, hasta consolas nuevas (y no taaan nuevas) para que pases el rato disfrutando tu título favorito.
Dónde: Av. Insurgentes Sur 1862, Florida, Álvaro Obregón.
Ver esta publicación en Instagram
Aunque este no es un lugar tradicional de arcade, sí encontrarás una gran variedad de juegos, ya que cuenta con casi todas las consolas y emuladores para que pases horas con tus videojuegos favoritos.
Lo mejor de todo es que para jugar, lo único que necesitas es consumir algo del menú, entonces no te cobran la hora por juego.
Dónde: sucursales en Condesa, Del Valle, Narvarte y Roma (chécalas acá).
Ver esta publicación en Instagram
Esta sala de juegos ofrece diferentes experiencias como maquinitas con tickets para canjearlos por premios, pinballs, hockey de aire, plataformas de baile y más.
Es ideal para ir con niños, aunque los adultos también se podrás divertir un buen rato.
Dónde: tiene varias sucursales.
Ver esta publicación en Instagram
Cuando ocurrieron las inundaciones, muchas de las niñas del campamento dormían en cabañas en terreno de poca elevación a menos de 150 metros del río.
Camp Mystic, un campamento cristiano para niñas ubicado a orillas del río Guadalupe en Texas, era hace apenas unos días un lugar de risas, oraciones y aventuras.
Pero justo antes del amanecer del viernes, día festivo en Estados Unidos por el 4 de julio, el río creció 8 metros en unos 45 minutos, en medio de un aguacero torrencial.
Muchas de las cientos de niñas del campamento dormían en cabañas en terreno de poca elevación a menos de 150 metros de la orilla.
Las literas están ahora derribadas y cubiertas de barro, en los restos de un campamento de verano interrumpido trágicamente.
Las pertenencias personales quedaron destruidas y esparcidas por los sitios donde antes las niñas se reunían para estudiar la Biblia y cantar alrededor de una fogata.
Hasta el momento se han confirmado 81 muertes por las inundaciones en el centro de Texas.
Los organizadores de Camp Mystic confirmaron que al menos 27 niñas y miembros del personal murieron. Entre los fallecidos se encuentra el veterano director de Camp Mystic, Richard “Dick” Eastland.
Diez niñas y un monitor del campamento siguen desaparecidos.
Stella Thompson, de 13 años, se encontraba en una cabaña en un terreno elevado cuando las tormentas la despertaron temprano el viernes.
Cuando los helicópteros comenzaron a sobrevolarla, se dio cuenta de que algo andaba terriblemente mal. Las chicas de su cabaña oyeron que la parte del campamento que daba al río Guadalupe estaba inundada.
” Al recibir la noticia, todas nos pusimos histéricas y rezamos muchísimo”, declaró Stella a una cadena afiliada de la NBC en Dallas.
“Y todas en la cabaña estábamos muy, muy aterrorizadas, pero no por nosotras, sino por quienes estaban al otro lado”.
Stella describió las escenas “horribles” mientras ella y otros supervivientes eran evacuados en camiones militares.
“Se veían kayaks en los árboles… y luego a los servicios de emergencia en el agua sacando a las chicas”.
“Y había árboles enormes arrancados de raíz. Ya no parecía el campamento Mystic”.
Ni siquiera quienes se alojaban en terrenos más elevados estaban a salvo.
Katharine Somerville, consejera de la parte ubicada en terreno más elevado junto al Lago Cypress en Camp Mystic, le dijo a Fox News el domingo: “Nuestras cabañas en la cima de las colinas quedaron completamente inundadas”.
“O sea, todos ya vieron la total devastación; nunca imaginamos que esto pudiera suceder”.
Añadió que las campistas a su cargo fueron evacuadas y están a salvo.
El vicegobernador de Texas, Dan Patrick, contó el caso de un heroico consejero del campamento que rompió una ventana para que niñas en pijama pudieran nadar con el agua hasta el cuello.
“Estas niñas nadaron durante unos 10 o 15 minutos”, le dijo al programa de televisión Fox & Friends.
“¿Se imaginan, en la oscuridad, con las aguas turbulentas, árboles pasando a su lado y rocas encima? Hasta que llegaron un tramo de tierra”.
El domingo llovía muy fuerte cuando la BBC llegó al campamento.
La entrada estaba acordonada por la policía y los escombros de lo que podría haber sido una especie de caseta de vigilancia estaban esparcidos por el suelo.
Se pronosticó más lluvia, lo que iba a dificultar aún más las labores de rescate.
Tres días después del diluvio, la esperanza se desvanece y esto se está convirtiendo rápidamente en un ejercicio de recuperación más que en una misión de rescate.
Camp Mystic ha sido operado por la misma familia durante generaciones, ofreciendo a las niñas la oportunidad de crecer espiritualmente en un ambiente cristiano sano, según su sitio web.
Familias de todo Texas, incluyendo la élite política del estado y de todo Estados Unidos, envían a sus hijas cada verano a nadar, navegar en canoa, montar a caballo y forjar amistades para toda la vida.
Pero la belleza del río Guadalupe, que atrae a tantas personas a la zona, también resultó mortal.
Las inundaciones llegaron sin previo aviso arrasando la pintoresca zona de la ribera, que alberga casi 20 campamentos juveniles.
Aunque Camp Mystic sufrió las mayores pérdidas, las autoridades afirman que la magnitud del desastre es de gran alcance.
Cerca de allí, el campamento femenino Heart O’ the Hills también se inundó.
Su copropietaria y directora, Jane Ragsdale, se encontraba entre las víctimas mortales. Afortunadamente, el campamento estaba cerrado en ese momento.
Un número desconocido de otros campistas se encontraban en la zona durante el fin de semana festivo.
Cada vez hay más preguntas sobre por qué tantos campamentos estaban situados tan cerca del río y por qué no se hizo más para evacuar a los niños a tiempo.
El congresista Chip Roy, representante de la zona, reconoció la devastación pero instó a la cautela para no culpar prematuramente a nadie.
“Muchos dirán: ‘Tenemos que trasladar todos estos campamentos. ¿Por qué hay campamentos aquí junto al agua?'”, dijo Roy.
“Bueno, hay campamentos junto al agua porque están junto al agua. Hay campamentos cerca del río porque es un lugar hermoso y maravilloso”.
Mientras tanto, las familias de los desaparecidos se enfrentan a una angustiosa espera de noticias. Los equipos de búsqueda y rescate, algunos navegando en bote, otros revisando los escombros, trabajan sin descanso.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, prometió el domingo que la misión no se detendrá hasta encontrar a todos los desaparecidos.
En cuanto a Stella, encuentra consuelo en su dolor con un poema que le enseñaron los líderes de Camp Mystic.
“Una campana no es una campana hasta que la tocas.
Una canción no es una canción hasta que la cantas.
El amor en tu corazón no fue puesto ahí para quedarse.
El amor no es amor hasta que lo entregas”.
Haz clic aquí para leer más historias de BBC News Mundo.
Suscríbete aquí a nuestro nuevo newsletter para recibir cada viernes una selección de nuestro mejor contenido de la semana.
Y recuerda que puedes recibir notificaciones en nuestra app. Descarga la última versión y actívalas.
Utilizamos cookies propias y de terceros para personalizar y mejorar el uso y la experiencia de nuestros usuarios en nuestro sitio web.