El pasado 5 de febrero, el gobierno federal presentó una iniciativa de reforma constitucional al Artículo 123, en la que se establece que los policías municipales no podrían tener ingresos menores a 16,777 pesos mensuales. Pese a que esta promesa de cierre de administración viene de la Federación, serán los municipios los encargados de hacerla realidad. Hay un problema: no cuentan con los medios financieros para asumir este compromiso.
Los policías municipales en México necesitan un salario que dignifique su labor. Su situación salarial es, cuando menos, alarmante. Dos de cada tres policías municipales ganan menos de 15 mil pesos brutos mensuales, y después de impuestos, su salario es aún menor según los últimos datos del Inegi. Al mismo tiempo, realizan una labor de alto riesgo y con un gran peso social: mantener el orden público y proteger a la población.
Ante esta situación, el Gobierno federal ha realizado diferentes esfuerzos para poner el salario de los policías en la agenda pública. En 2021, publicó la Propuesta de Salario Digno para Policías, que consideraba sus necesidades básicas y de sus familias. Recientemente, propuso una reforma al Artículo 123 constitucional para que los policías, y otros servidores públicos no ganen menos de 16,777 pesos mensuales, una mejora considerable frente a los salarios que reciben actualmente.
Hay aspectos que no están siendo considerados en tal reforma. Por un lado, va a aumentar el costo de las prestaciones laborales —como aguinaldo, prima vacacional, cuotas de la seguridad social o bonos que tienen como base el salario bruto de los policías—, lo que incrementará la carga financiera de las nóminas de los policías. Por otro lado, no se precisa de quién es la responsabilidad de financiar los aumentos en la nómina policial. Sin presupuesto, se corre el riesgo de que sólo quede en una promesa vacía por parte del Gobierno.
Aumentar el salario de los policías es necesario. Reconocerlo desde la Constitución, un acierto. La pregunta, como siempre, es cómo se pagará la propuesta impulsada por el gobierno federal. Lo que es evidente es que la Federación no será la encargada de financiar los compromisos constitucionales que plantean realizar con todos los policías municipales del país.
La falta de compromiso financiero del gobierno federal no es trivial. Para 2025, la Secretaría de Hacienda plantea una reducción del gasto público del orden de 3 % del PIB, un reajuste sin precedentes. Sin una reforma fiscal que cambie la inercia de los ingresos, la Federación no tiene la capacidad de comprometer mayores recursos para las policías municipales, por más que lo reconozca en la Constitución.
Aunque no se señala explícitamente, la propuesta está diseñada para que los gobiernos locales absorban la responsabilidad del pago. La Federación pudo proponer recursos adicionales para el Fondo para el Fortalecimiento de los Municipios (Fortamun) de manera que se utilizaran esos recursos al pago del aumento salarial y de las prestaciones laborales, mas no ocurrió así. Se delegó a los estados y municipios que, aún compartiendo el compromiso con la policía, tienen finanzas públicas débiles y dependen en mayor medida de las transferencias de la Federación. En este contexto es que los municipios tendrán que destinar mayores recursos para la policía, sin tenerlos considerados en sus presupuestos.
Desde la perspectiva de los municipios, su única alternativa para poder cumplir con esta promesa es aumentar sus ingresos. Las instituciones de seguridad municipal gastan la mitad de su presupuesto en el pago de la nómina de los policías, de acuerdo con los últimos datos disponibles del Inegi. Aumentar la proporción que destinan al pago de la nómina reduciría el gasto en equipamiento o capacitación, áreas estratégicas que, junto con la mejora de las condiciones laborales de las policías, no fueron consideradas en la reforma. Los municipios tendrán que hacer más grande la bolsa de recursos, en vez de alterar sus proporciones.
Aunque la promesa fue federal, es claro que serán los municipios los encargados de financiar el aumento salarial para los policías y sus costos asociados. Es importante reconocer esta realidad para dimensionar el trabajo que tendrán que hacer los ayuntamientos para cumplir con sus compromisos constitucionales, de aprobarse la reforma al Artículo 123.
Para los municipios, el financiamiento no será una tarea sencilla. Pueden apoyarse de los instrumentos tradicionales de recaudación local como el impuesto predial, mediante medidas que les permitan focalizar sus esfuerzos en el cobro, o apostar por la creación de nuevos instrumentos fiscales como el derecho a la protección policial, que esté etiquetado al financiamiento de la policía municipal. Sea cual sea el instrumento, los municipios deberán enfrentar tesorerías débiles, legislaciones hacendarias confusas y la resistencia social al pago de impuestos.
Al final, la dignificación laboral de los elementos de seguridad no sólo es una cuestión de reconocimiento a su trabajo y sacrificio, sino un compromiso social por las instituciones de seguridad civiles y locales. La promesa de un salario más alto para los policías municipales es un paso para acercarnos a este ideal. El presupuesto, impulsado por la recaudación local, es la clave para hacerlo realidad.
* Alberto Perez es investigador del Programa de Gasto y Rendición de Cuentas en México Evalúa.
En enero y febrero tendrá lugar el alineamiento más exacto de siete planetas en el cielo en un raro espectáculo para los amantes de la astronomía.
Durante enero ya son visibles en el cielo nocturno seis planetas: Venus, Marte, Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno.
Pero el 28 de febrero, durante una sola noche, se les unirá Mercurio, en una rara alineación de siete planetas que no volverá a ocurrir hasta 2040.
En realidad, no es raro que varios planetas puedan verse juntos en el cielo nocturno.
Tampoco es raro ver a los planetas formados en una “línea” a través del cielo.
Esta es una línea imaginaria de la trayectoria aparente del Sol a lo largo de un año, conocida como “eclíptica”.
La eclíptica se debe al hecho de que la Tierra y todos los demás planetas del Sistema Solar se formaron a partir del mismo disco plano de gas y polvo que alguna vez rodeó a nuestro Sol en su infancia.
Esto significa que todos los planetas del Sistema Solar ocupan aproximadamente el mismo plano orbital (incluida la Tierra) y, por lo tanto, todos siguen más o menos la línea de la eclíptica en el cielo.
Las diferentes velocidades a las que orbitan los planetas hacen que, en ocasiones, varios de ellos puedan estar alineados aproximadamente en el mismo lado del Sol.
Desde la Tierra, si las órbitas se alinean correctamente, podemos ver varios planetas en nuestro cielo nocturno al mismo tiempo.
Es por eso que las llamadas “alineaciones planetarias” o “desfiles planetarios” son realmente algo inevitable.
Mercurio, Venus, Marte, Júpiter y Saturno son lo suficientemente brillantes como para ser visibles a simple vista durante las noches despejadas de enero.
Urano y Neptuno también están allí, pero para verlos se requieren binoculares o un telescopio.
En realidad, los planetas no están exactamente alineados. Más bien aparecen en un arco a través del cielo debido a su plano orbital en el Sistema Solar.
Pero la verdadera sorpresa, si el clima lo permite, ocurrirá el 28 de febrero, cuando Mercurio se una a este desfile planetario en un gran espectáculo que podrá ser observado desde la Tierra.
“Hay algo especial al ver los planetas con tus propios ojos”, le dijo a BBC Future Jenifer Millard, divulgadora científica y astrónoma de Fifth Star Labs en el Reino Unido.
“Es posible ir a Google y obtener una vista más espectacular de todos estos planetas. Pero cuando miras estos objetos, son fotones que han viajado millones o miles de millones de kilómetros a través del espacio para llegar a tus retinas”.
El espectáculo puede ser fascinante, pero ¿tienen algún impacto estas alineaciones aquí en la Tierra?
Algunos científicos han sugerido que las alineaciones planetarias podrían causar impactos en nuestro planeta, pero la base científica para la mayoría de estas afirmaciones es débil o inexistente.
Como explica Jenifer Millard, realmente “es solo una casualidad que estén en esta posición de sus órbitas”.
Como señala el periodista de asuntos espaciales y científicos Jonathan O’Callaghan, las alineaciones planterias sí pueden tener un impacto en la vida en la Tierra, en particular en términos de la exploración del Sistema Solar.
“Llegar a los planetas exteriores con una nave espacial es difícil porque estos mundos están muy lejos, a miles de millones de kilómetros, y se necesitarían décadas para llegar”, escribe O’Callaghan en BBC Future.
“Sin embargo, usar la atracción gravitatoria de un planeta bien ubicado, como Júpiter, para lanzar una nave espacial hacia el exterior puede reducir drásticamente el tiempo de viaje, algo que ninguna nave espacial ha hecho mejor que las naves Voyager de la NASA”, agrega.
Las alineaciones de planetas han sido utilizadas para investigar muchos aspectos diferentes del Universo, como el descubrimiento y estudio de exoplanetas, los mundos que orbitan alrededor de estrellas distintas al Sol.
Y también hay algunos usos más novedosos, como investigar la existencia de vida extraterrestre en sistemas solares donde los exoplanetas pasan uno frente al otro desde nuestro punto de vista.
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Este evento, que se extenderá por varios días durante enero y febrero, será visible desde distintos puntos del planeta, siempre que las condiciones meteorológicas y la contaminación lumínica lo permitan.
Como informa la NASA, durante enero en las primeras horas después del anochecer se puede ver a Venus y Saturno en el suroeste, a Júpiter en lo alto y a Marte en el este.
Urano y Neptuno también están allí, pero se necesita un telescopio para verlos.
El momento ideal para observar la alineación es justo después de la puesta del sol, pero se debe tener en cuenta que la hora exacta de salida y puesta de cada planeta variará dependiendo de tu ubicación en la Tierra.
La sorpresa especial del espectáculo tendrá lugar el 28 de febrero cuando Mercurio se una a estos seis planetas.
Para disfrutar el evento, los expertos recomiendan ubicarte en un lugar con cielos oscuros, en zonas alejadas de la contaminación lumínica, como áreas rurales o montañosas.
También se aconseja revisar las condiciones del clima para asegurarte de que el cielo está despejado el día del evento.
Los expertos de la Queen’s University, en Canadá, recomiendan descargar una aplicación como Stellarium o Star Chart.
Cuando apuntes tu teléfono al cielo, la app te dirá qué objeto del cielo nocturno estás observando.
Los telescopios y binoculares pueden ayudarle a ver más detalles, como los anillos de Saturno y las lunas de Júpiter.
*Esta nota fue corregida debido a que una versión previa señalaba erradamente que este tipo de alineación planetaria no se repetiría sino hasta el año 2492. La fecha correcta es el año 2040.
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