Home
>
Analisis
>
Organizaciones
>
Atarraya
>
Una luz de esperanza contra el plástico contaminante
plumaje-icon
Atarraya
ATARRAYA publica temas sobre océanos, diversidad marina, protección y restauración de los mares de México,... Continuar Leyendo
4 minutos de lectura
Una luz de esperanza contra el plástico contaminante
Se dice que el reciclaje nos salvará de los plásticos contaminantes. Pero en el mundo solo se ha reciclado el 9% de todo el plástico producido desde los años 50 y en México solo se cuenta con capacidad industrial para reciclar apenas el 6%. 
10 de marzo, 2021
Por: Esteban García-Peña Valenzuela
0

En días recientes hemos atestiguado un férreo debate alrededor de las consecuencias sociales y ambientales que podría acarrear la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica. Pero más allá de las implicaciones directas de esta reforma, lo que es indiscutible es que, apostar por los combustibles fósiles, es apostar por la contaminación atmosférica, ahondar en la crisis climática y los problemas de salud asociados con la mala calidad del aire. 

Diversas voces de la sociedad civil, de los partidos de oposición, de la academia y las provenientes de otros países, han elevado su discurso para advertir sobre los graves riesgos que conlleva el uso desmedido del petróleo y sus derivados, principalmente por sus efectos sobre el medio ambiente y la salud, y porque son causantes del calentamiento global acelerado que cada vez se hace sentir con más fuerza.

Pero no solo el uso de los hidrocarburos para producción de electricidad es nocivo para los ecosistemas y las personas. También lo es la producción de otros derivados del petróleo, como son los plásticos. Presentes en nuestras vidas desde hace décadas, prácticamente todos los tipos de plásticos son elaborados a partir del Etileno, un derivado del petróleo. 

Además de los contaminantes que se generan durante la extracción de los hidrocarburos (recordemos que el petróleo viene acompañado de otros gases, como el metano) el proceso industrial para la producción del etileno y de los plásticos que se fabrican a partir de éste, también implica grandes emisiones de gases contaminantes de vida corta, nocivos para la salud, y de gases de efecto invernadero, que incrementan el fenómeno del cambio climático. 

Pero no todo queda allí: la mayoría de los plásticos que se producen en el planeta, están concebidos para usarse una sola vez y desecharse. Si, mas del 40% del plástico se encuentra en empaques, embalajes, platos y cubiertos desechables, envases de PET no retornables, bolsas plásticas y contenedores de alimentos, entre muchos otros. Un modelo cultural que se basa en crear desechos con la tímida esperanza que serán reciclados.

De esta manera, la mayor parte del plástico que se fabrica y consume, acabará finalmente por contaminar cielo, mar y tierra. Vaya, los plásticos desechables contaminan una, dos, tres y muchas veces más que su padre el petróleo. No miento, únicamente el océano recibe más de 8 millones de toneladas de contaminación plástica anualmente. 

Se dice que el reciclaje nos salvará de los plásticos contaminantes. Pero en el mundo solo se ha reciclado el 9% de todo el plástico producido desde los años 50 y en México solo se cuenta con capacidad industrial para reciclar apenas el 6%. 

Desde Oceana nos hemos sumado a miles de voces para llamar la atención de gobierno y Congreso de la Unión sobre la grave crisis de la contaminación plástica, haciendo énfasis en los efectos sobre la vida marina y la vida humana. Miles de aves y mamíferos marinos, tortugas, peces y tiburones mueren a causa de la ingesta o por quedar atrapados en piezas plásticas diversas. Los humanos, sin darnos cuenta, estamos consumiendo, y hasta respirando los plásticos que se han fragmentado en pequeñas piezas. La evidencia es incontrovertible.

En el congreso la presente legislatura del Senado organizó talleres de parlamento abierto con la participación de la industria, organizaciones de la sociedad civil, especialistas y universidades, así como el propio gobierno federal, donde se determinó la urgencia de una reforma que redujera la contaminación plástica. 

Después de tanto tiempo, dinero y esfuerzo, de tanta gente trabajando y decenas de iniciativas elaboradas por el Congreso [con el dinero de las y los contribuyentes], hasta este momento no se ha avanzado en ninguna reforma que reduzca efectivamente este problema. En particular la Comisión de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Cambio Climático en el Senado (COMARNACC), tiene aún esa tarea pendiente.

Con la reciente controversia alrededor de la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica se elevaron voces de preocupación contra la regresión por la explotación y uso de los hidrocarburos, como la del Senador Raúl Bolaños-Cacho Cué. Presidente de la COMARNACC, el Senador Bolaños-Cacho se manifestó abiertamente en contra del uso de hidrocarburos, lamentó la inminente promulgación de esta reforma y lanzó un llamado: “Este es un momento histórico para México, en el Senado de la República debemos legislar a favor de un ambiente sustentable. La historia nos juzgará”

De esta manera, la inconformidad del Senador Bolaños-Cacho y su llamado a legislar por el medio ambiente, son indudablemente una buena señal de que al fin, la Comisión que preside saldará su cuenta son la sociedad y será promulgada una reforma que elimine de una vez por todas la contaminación de los plásticos desechables, desde su origen petrolífero. Parafraseando al mismísimo senador, “¡la historia nos juzgará!”

Lo que hacemos en Animal Político requiere de periodistas profesionales, trabajo en equipo, mantener diálogo con los lectores y algo muy importante: independencia
Tú puedes ayudarnos a seguir.
Se parte del equipo
Suscríbete a Animal Político, recibe beneficios y apoya el periodismo libre.
image