Cabo Pulmo: Hacia una prevención efectiva de los daños ambientales
Cabo Pulmo es uno de los arrecifes coralinos más importantes de la región del Pacifico Este Tropical y puerta de entrada al Golfo de California. Sin embargo, los beneficios ecológicos y económicos que ese entorno brinda a generaciones presentes y futuras a nivel regional, así como su riqueza de vida silvestre, están en riesgo debido a prácticas no sostenibles y al proceso inadecuado con el que se toman las decisiones que pueden afectar el ambiente en México.
En 2012, organismos internacionales —la Convención del Patrimonio Mundial de la UNESCO, la Convención Ramsar sobre Humedales de Importancia Internacional y la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza— realizaron una Misión Conjunta de Asesoramiento e hicieron recomendaciones para que el Estado mexicano cumpla sus compromisos de conservación del Parque Nacional Cabo Pulmo y sus zonas de influencia.
Las recomendaciones más significativas fueron: asegurar la integralidad ecológica del Parque mediante estudios de Evaluación Ambiental Estratégica; analizar impactos directos, indirectos, acumulativos y sinérgicos en el Sistema Ambiental Regional; articular los instrumentos de la planeación territorial y marina (Planes de Desarrollo Urbano, Ordenamiento Ecológico Territorial, Ordenamiento Ecológico Marino y Planes de Manejo de Áreas Naturales Protegidas); restringir a futuro el desarrollo turístico a gran escala en los alrededores del Parque y en las “Islas y Áreas Protegidas del Golfo de California” (parte del sitio catalogado como Patrimonio Mundial); elaborar y aplicar la planificación de forma que favorezca la conservación y uso racional de los humedales y/o ecosistemas marino costeros con análisis actualizados a nivel regional.
En enero de este año, la Coalición Cabo Pulmo Vivo entregó un informe a los organismos de la Misión. En él analiza el cumplimiento de las recomendaciones e identifica en el lugar una serie de prácticas no sostenibles por sus impactos sociales y ambientales:
- Crecimiento demográfico y migración inducida a causa de la autorización de infraestructura hotelera con más de 1,100 cuartos de hotel y una proyección total de 5,800 nuevos cuartos, lo que implicaría en pocos años un incremento poblacional a más de 20 mil a 99 mil habitantes en la región de Cabo del Este del municipio de los Cabos.
- Alteraciones y/o degradación de la vegetación y del hábitat de especies en peligro de extinción como tortugas marinas, riesgos en ecosistemas ribereños y fauna asociada por construcciones inadecuadamente ubicadas y por el incumplimiento de normas de ordenamiento territorial.
- Modificación de la dinámica natural de arroyos por construcciones turísticas inadecuadamente ubicadas.
- Estudios específicos con falencias técnicas en zonas de riesgo y vulnerables a eventos climáticos severos.
- Fomento del crecimiento poblacional en una zona con estrés hídrico (déficit de agua) cercana a ecosistemas frágiles.
- Incumplimiento de realizar una consulta pública y violación de los derechos de información y participación efectiva de comunidades aledañas a proyectos.
- Amenazas y posibles riesgos para la población de comunidades costeras por contaminación, inundaciones y otros impactos ambientales.
Desafíos para la conservación ambiental
En una región tan árida como el desierto de Baja California Sur y en entornos altamente vulnerables como los que alberga el Parque Nacional Cabo Pulmo, el aumento poblacional y el desarrollo urbano costero representan grandes desafíos para la conservación del ambiente y para los beneficios que éste brinda a las personas.
Si bien el turismo y el mejoramiento urbano generan empleo, productividad, crecimiento económico y desarrollo social, existen proyectos que podrían causar daños sociales y ambientales irreversibles, los cuales no siempre son tomados en cuenta en los procesos donde se decide autorizarlos. Así lo demuestra el caso de Cabo Pulmo.
Por ello los organismos internacionales recomendaron realizar la Evaluación Ambiental Estratégica y considerar los impactos acumulativos y sinérgicos en la zona de influencia del sitio de importancia internacional de Cabo Pulmo.
Esto implica tener en cuenta los efectos del rápido crecimiento urbano y turístico, de las grandes obras públicas y privadas en la región, de la modificación de ecosistemas costeros, de la vulnerabilidad ante eventos climáticos, así como del uso de energía y la generación de gases de efecto invernadero en el Sistema Ambiental Regional.
También se debe regular adecuadamente los procesos de potabilización de fuentes de agua no convencionales, como la desalinización, por los impactos que pueden tener en entornos acuáticos a través del tiempo. Actualmente existe déficit de agua en Cabo Pulmo y algunas fuentes de agua subterráneas registran presencia de sal, situación que se agrava con el incremento de la población y de la demanda de energía.
En el contexto actual de crisis climática, mejorar la metodología para evaluar estos impactos es más importante y urgente.
Los arrecifes coralinos son los ecosistemas más vulnerables a nivel mundial. Según el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático de Naciones Unidas, si no evitamos que la temperatura del planeta supere los 1.5°C, perderíamos del 70 al 90% de los arrecifes. Estos ecosistemas están amenazados por la acidificación del océano, los huracanes, la contaminación y las enfermedades de especies asociadas.
La necesidad de Evaluaciones Ambientales Estratégicas es respaldada por otros organismos internacionales como la Convención de Diversidad Biológica, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe, la Convención Americana de Derechos Humanos y la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.
Obligaciones internacionales
México tiene obligaciones internacionales para proteger y preservar los ecosistemas sensibles, preservar a las especies en peligro y manejar de forma sostenible a los seres vivos dentro de sus mares y costas.
Y la Corte Interamericana de Derechos Humanos reconoció el derecho a un ambiente sano como fundamental para la existencia humana.
Por ello los Estados están obligados a proteger y respetar los derechos a la vida e integridad personal en el contexto de la protección ambiental. Deben prevenir los daños ambientales significativos, realizar estudios de impacto ambiental, actuar con precaución frente a daños irreversibles, garantizar el acceso a la información sobre posibles afectaciones y asegurar la participación pública de las personas en la toma de decisiones y políticas que pueden afectar el ambiente.
Con base en lo anterior, el Estado mexicano está obligado a cumplir a cabalidad las recomendaciones de la misión internacional orientadas a la preservación de Cabo Pulmo.
* La Coalición Cabo Pulmo Vivo, conformada en 2009, es un grupo de organizaciones de la sociedad civil, ciudadanos, académicos, investigadores y miembros de las comunidades de Cabo Pulmo y zonas aledañas, que promueve la protección del patrimonio natural y cultural de la zona de Cabo Pulmo y Cabo del Este, en Baja California Sur, y particularmente de la reserva marina Parque Nacional Cabo Pulmo.
