Home
>
Analisis
>
Autores
>
Ruta Crítica
>
El muro militar emotivo
Ruta Crítica
Ruta Crítica
Coordinador del Programa de Seguridad Ciudadana de la Universidad Iberoamericana. Fundó y dirigió el Instituto... Continuar Leyendo
4 minutos de lectura

El muro militar emotivo

El muro militar emotivo neutraliza la deliberación pública y crítica respecto al rol de las Fuerzas Armadas, y desmonta estructuralmente los controles democráticos formales (a cargo del Estado mismo) e informales (a cargo de la sociedad). El efecto es uno: hagan lo que hagan las instituciones castrenses, en la práctica, están por encima de la obligación de justificar sus actos.
19 de septiembre, 2024
Por: Ernesto López Portillo

No es un muro de ladrillos, es un muro de emociones. La relación entre la parte civil y la parte militar de nuestra sociedad está mediada por emociones que han sido moldeadas a través de la historia. Todos los días el Estado invierte en esta dimensión subjetiva a través de mensajes que buscan precisamente eso: provocar cierto tipo de emociones. El texto recién publicado por Claudio Escandón, estudiante de Historia en la Ibero CDMX que hizo su Servicio Social en el Programa de Seguridad Ciudadana, nos enseña la enorme relevancia que tiene esto para las Fuerzas Armadas, en particular para la Sedena, produciendo sin parar contenidos de propaganda a favor de la Guardia Nacional.

El texto es imperdible y nos recuerda, de entrada, que “tanto la publicidad como la propaganda, debido a su poder persuasivo, están imbuidas de relaciones de poder, otorgándoles un carácter ideológico independientemente de su origen o medio de difusión… La combinación de imágenes, descripciones y eslóganes evidencian la intención de persuadir a la ciudadanía…  Tras el análisis es posible confirmar que su estrategia publicitaria tiene como meta la aprobación de la GN como institución de seguridad…”.

Este texto se publica mientras avanza la aprobación de la reforma constitucional que entregará la Guardia Nacional a la Sedena, al tiempo que desmontará las restricciones para que las Fuerzas Armadas intervengan en aquello que la presidencia ordene, sea cual sea la función pública de que se trate. Se consumará así la formalización no solo de la militarización de la seguridad pública, sino del soporte ideológico militarista que hace parte de los pilares que sostienen y dan sentido a esta nueva etapa del sistema político mexicano.

Esta vez me interesa enfocar la reflexión en lo que he llamado el muro militar emotivo, mismo que neutraliza la deliberación pública y crítica respecto al rol de las Fuerzas Armadas. Estamos estudiando desde diversas disciplinas cómo se ha construido este vacío crítico en nuestra democracia; cómo se moldeó y moldea una relación donde ellas están por encima de cualquier otra institución, si de exigirles rendición de cuentas se trata; cómo se consolidó un sistema político donde la llamada clase política civil prefiere, en su abrumadora mayoría, evadir cualquier posible confrontación con los mandos militares, tal como me confirmaron apenas cuatro personas que han pasado por el Congreso de la Unión, quienes, siendo cada una de un partido político diferente, coinciden en la imposibilidad de que la función legislativa sea contrapeso del quehacer militar a través de tareas de auténtica fiscalización.

Los relatos incluyen dos anclajes emotivos principalmente: respeto y miedo. Se falta al respeto a las Fuerzas Armadas cuando se les cuestiona, me explican; o bien, domina el miedo a enfrentar consecuencias ante el poder político armado que ellas representan, en particular habida cuenta de que la evidencia confirma un conflicto histórico con los derechos humanos que ha incluido atacar a la disidencia política, sin consecuencias formales propias de un Estado de derecho.

Mi memoria respecto a lo que aprendí en la primaria y la secundaria me confirma que somos expuestos a un relato que, desde muy temprana edad, busca convencernos de que las Fuerzas Armadas defienden los más altos valores de nuestra sociedad y son impolutas. El eje del relato oficial es visibilizar virtudes e invisibilizar defectos, llevando a las instituciones militares a una dimensión aparte del mundo civil, que es donde, en cambio, sí están los defectos.

El muro militar emotivo busca abarcar a la sociedad entera a través de una descomunal inversión en la construcción de imágenes que proyectan un orden perfectamente disciplinado que, como tal, según el relato, no admite fallas. Las recientes imágenes del presidente y la presidenta electa en el H. Colegio Militar, más el desfile del lunes pasado, son prueba suficiente de la prioridad que tiene el Estado para recordárnoslo.

Si alguien piensa que esta discusión es lejana a la realidad, piénselo mejor, porque es todo lo contrario. El muro emotivo desmonta estructuralmente los controles democráticos sobre las Fuerzas Armadas, tanto los formales a cargo del Estado mismo, como los informales a cargo de la sociedad. Entonces el efecto es uno: hagan lo que hagan las instituciones castrenses, en la práctica, están por encima de la obligación de justificar sus actos.

Puede haber rituales que hacen parecer lo contrario, pero de facto no es así, por ejemplo, cuando desde Sinaloa un mando de la Sedena informa que la reducción de la violencia entre grupos armados es responsabilidad de ellos mismos, no de la institución a la que representa y, más allá de un escándalo momentáneo, no pasa absolutamente nada que se parezca a la rendición de cuentas.

Vaya problema que tenemos.

Lo que hacemos en Animal Político requiere de periodistas profesionales, trabajo en equipo, mantener diálogo con los lectores y algo muy importante: independencia
Tú puedes ayudarnos a seguir.
Sé parte del equipo
Suscríbete a Animal Político, recibe beneficios y apoya el periodismo libre.
Iniciar sesión

Registrate
Suscribete para comentar...
Imagen BBC
¿Qué son los Cinturones de Van Allen, considerados ‘uno de los mayores riesgos’ para los astronautas en el espacio?
5 minutos de lectura

Este jueves la misión Polaris Dawn atravesó los Cinturones de Van Allen para que su tripulación realizara una caminata en el espacio exterior.

12 de septiembre, 2024
Por: BBC News Mundo
0
Dos de los miembros de la tripulación de la nave Resilience hicieron historia este jueves al caminar en el espacio como parte de la misión Polaris Dawn, la primera financiada enteramente con fondos privados.

En ella viajan el multimillonario Jared Isaacman, fundador de la empresa de procesamiento de pagos Shift4, junto con Scott “Kidd” Poteet, un piloto retirado de la Fuerza Aérea, y dos ingenieras de SpaceX, Anna Menon y Sarah Gillis.

La Polaris Dawn forma parte de un plan de SpaceX para llevar misiones tripuladas “hacia la Luna, Marte y más allá”, según la propia empresa.

Para llegar a la estratósfera, donde este jueves Isaacman y Gillis realizaron una caminata espacial, la nave tuvo que atravesar los Cinturones de Van Allen.

Según la Agencia Estadounidense del Aire y el Espacio (NASA, en inglés), son “uno de los mayores peligros” que enfrentan los astronautas.

El empresario Jared Isaacman durante su caminata.
EPA
El multimillonario Jared Isaacman y la ingeniera Sarah Gillis realizaron este jueves la primera caminata espacial comercial de la historia.

La misión Polaris Dawn logró transitar con éxito esos cinturones, gracias a la protección de la nave Resilience y de los trajes espaciales que utilizaron, que fueron recientemente rediseñados por SpaceX para ser mucho menos voluminosos que los que utiliza la NASA.

Pero ¿qué son los Cinturones de Van Allen y por qué son una preocupación para los viajes espaciales?

Un escudo protector para el planeta

La Tierra está protegida por la magnetosfera, una capa magnética que se origina del núcleo de hierro del planeta y que atrapa partículas de radiación de alta energía.

Tiene la función de prevenir los efectos dañinos que las tormentas y el viento solar pueden provocar en la tecnología y los seres humanos.

Las partículas de radiación atraídas por la magnetosfera forman dos cinturones, conocidos como los Cinturones de Van Allen, que rodean nuestro planeta en forma de donas.

De acuerdo con la NASA, un primer cinturón exterior “está formado por miles de millones de partículas de alta energía que se originan en el Sol y un segundo cinturón interior resulta de las interacciones de los rayos cósmicos con la atmósfera de la Tierra”.

Para llegar al espacio exterior, los astronautas deben atravesar los cinturones, pero lo hacen con rapidez para limitar su exposición a la radiación.

cápsula resilience despega en cabo cañaveral
Getty Images
La tripulación de Polaris Dawn viajó en la cápsula Resilience, que despegó desde Cabo Cañaveral, en Florida.

El riesgo

Pier Jiggens, un investigador de la Agencia Espacial Europea (ESA, en inglés) que es especialista en radiación espacial y diseño de naves, comentó en un blog publicado por esa misma organización que existen dos riesgos para los astronautas al cruzar los Cinturones de Van Allen.

Según el científico, los astronautas podrían sufrir lo que llamó “efectos deterministas”, que se dan por una exposición de bajo nivel a la radiación por un largo periodo de tiempo o por una radiación de alto nivel en un corto plazo.

“Provocan trastornos en el sistema nervioso central, supresión de la hematopoyesis en la médula ósea, cataratas y otros problemas de visión, y enfermedad aguda por radiación, que sería un riesgo significativo en las actividades extravehiculares (EVAs, o paseos espaciales)”, comentó.

En segundo lugar, habló sobre los llamados “efectos estocásticos” o enfermedades que podrían o no padecer los astronautas en un futuro, como el cáncer.

Jiggens dice que como los científicos conocen los Cinturones de de Van Allen, pueden proporcionar material de protección para las tripulaciones, y si alguien se ve afectado “es porque es una misión muy mal planificada”.

Según el científico, los expertos emplean distintos materiales para proteger a los astronautas, que van desde el propio aluminio del que están hechas las naves, hasta plásticos, polietileno, agua y, más recientemente, litio.

ilustración de los cinturones de van allen
NASA
Una de las primeras ilustraciones de los Cinturones de Van Allen, descubiertos en 1958.

El hito de Van Allen

Los anillos llevan el apellido de James Van Allen, el científico que los descubrió.

Van Allen, quien era profesor de física de la Universidad de Iowa, elaboró junto a varios estudiantes una serie de instrumentos para detectar micrometeoritos y rayos cósmicos que fueron lanzados al espacio en los satélites Explorer 1 y Explorer 3 en enero de 1958.

El Explorer 1 fue el primer satélite artificial lanzado al espacio, algo que fue posible gracias a un programa de investigación internacional impulsado por el científico.

Con los datos de estos instrumentos descubrieron el cinturón interno. Luego, en julio de ese año lanzaron el Explorer IV y en diciembre La Pioneer 3, que dieron paso al descubrimiento del anillo externo.

james van allen
Getty Images
James Van Allen fue un profesor de física en la Universidad de Iowa.

Según una publicación de la NASA, los cálculos de Van Allen establecieron que era posible viajar a través de las regiones de menor radiación de los cinturones para alcanzar el espacio exterior.

En 1968, la misión Apolo 8 de la NASA fue la primera nave espacial tripulada en volar más allá de los cinturones.

En 2012, la agencia estadounidense descubrió un tercer cinturón, pero que aparece de forma transitoria en función de la actividad solar.

línea gris que separa el texto
BBC

Haz clic aquí para leer más historias de BBC News Mundo.

También puedes seguirnos en YouTube, Instagram, TikTok, X, Facebook y en nuestro nuevo canal de WhatsApp, donde encontrarás noticias de última hora y nuestro mejor contenido.

Y recuerda que puedes recibir notificaciones en nuestra app. Descarga la última versión y actívalas.

Lo que hacemos en Animal Político requiere de periodistas profesionales, trabajo en equipo, mantener diálogo con los lectores y algo muy importante: independencia
Tú puedes ayudarnos a seguir.
Sé parte del equipo
Suscríbete a Animal Político, recibe beneficios y apoya el periodismo libre.
Iniciar sesión

Registrate
Suscribete para comentar...