Pues sí, se confirmó: el día de ayer, tropas de la Marina capturaron a Miguel Ángel Treviño Morales, alias “El Z-40”, principal cabecilla de los Zetas. Es un acontecimiento de gran relevancia que merece muchos comentarios. Van aquí algunos iniciales:
En resumen, un aplauso para el gobierno por la captura: sacar de las calles a un individuo de este tipo amerita amplio reconocimiento. Pero hay que recordar que esto bien puede acabar con los Zetas como organización, pero no como ethos, como modo de operación, como maldita forma de obtener dinero a costa del sufrimiento indescriptible de terceros. Eso todavía nos va a acompañar por un buen rato.