En septiembre de 2023, una de las mayores redadas contra peleas de perros en la historia de Carolina del Sur resultó en el rescate de más de 300 perros y la detención de al menos 20 personas. Esta operación, considerada una de las más grandes en Estados Unidos desde la redada de Missouri en 2009, también llevó al descubrimiento de narcóticos y armas en múltiples ubicaciones. De manera similar, en julio de 2023, un técnico veterinario involucrado en una red regional de peleas de perros fue sentenciado a prisión en el Distrito Este de Virginia. Esta redada, que comenzó en 2019, reveló la organización de peleas de perros, la cría y entrenamiento de animales para estos fines, el uso de recursos veterinarios para mantener el negocio y el abuso y asesinato de perros. La operación concluyó con la confiscación de los perros y varias condenas por crueldad animal y con la investigación de otros delitos vinculados.
Estos incidentes no sólo exponen el problema del maltrato animal, sino que también subrayan la conexión intrínseca con otros crímenes graves. La decisión del FBI en 2016 de incluir la crueldad animal como una categoría de delito independiente refleja la comprensión de la relación que existe entre esto y otras manifestaciones de violencia, así como el impacto e implicaciones que tiene para la seguridad.
El Sistema de Reportes Basados en Incidentes del FBI (NIBRS) ha revolucionado la forma en que se recopilan los datos sobre crímenes en Estados Unidos. A diferencia del sistema anterior, el Uniform Crime Reporting (UCR), que proporcionaba datos resumidos, el NIBRS ofrece detalles granulares sobre cada incidente, incluyendo la crueldad animal. Este cambio no solo mejora la precisión de los datos, sino que también permite una mejor identificación de patrones y tendencias en la criminalidad. Lo más importante, considera una variable que no había sido considerada como tal para el análisis de delitos y crímenes y que no sólo establece un precedente en el país, sino que puede -y debería- tener implicaciones internacionales.
Desde 2016, el NIBRS ha incluido la crueldad animal como un delito independiente, proporcionando una base de datos más rica y detallada para las y los investigadores y las agencias de la ley. Este sistema permite entender no solo la frecuencia de estos crímenes, sino también sus circunstancias y los perfiles de los perpetradores, facilitando así intervenciones más asertivas.
¿Por qué incluir la crueldad animal como una variable en el análsis de delitos y crímenes? Investigaciones han demostrado una fuerte correlación entre la crueldad animal y otros delitos graves, como la violencia doméstica, los homicidios en serie, la pornografía infantil, entre otros. Estudios psicológicos y criminológicos han encontrado que muchos asesinos en serie comenzaron con actos de crueldad animal. Los ejemplos más conocidos son Ted Bundy y Jeffrey Dahmer, quienes además tenían un historial de maltrato animal en su juventud. Se ha encontrado también que los francotiradores de masas tienen este antecedente común, un caso conocido es el de Payton Gendron, el supremacista blanco acusado de matar a tiros a 10 personas afroamericanas en un supermercado de Buffalo hace un par de años.
La correlación entre violencia hacia los animales e impacto social es tan profunda, que organizaciones como la National Sheriffs’ Association y la Animal Welfare Institute han abogado desde hace mucho tiempo por la inclusión de la crueldad animal como un delito en sí mismo. Su trabajo fue clave para que el FBI diera el paso que dio.
Durante la Pandemia de COVID-19 se hicieron evidentes también los lazos entre la violencia hacia los animales y la violencia hacia personas del entorno familiar. En Canadá, por ejemplo, se estableció una alianza entre asociaciones protectoras de animales y las instancias que atienden la violencia doméstica. Las personas que defienden a los animales tienen la capacidad de observar indicios de otras manifestaciones violentas hacia integrantes de las familias cuando supervisan y atienden casos contra los animales. También se registró, hay que decirlo, un incremento en la violencia hacia ellos.
¿Qué impacto tiene esto en materia de aplicación de la ley y políticas públicas? Lo que no se cuenta no se puede transformar, y visibilizar los datos relacionados con la crueldad hacia los animales permite tener información más clara para tomar decisiones, asignar recursos y desarrollar políticas y sobre todo, para comprender las distintas violencias con un lente nuevo. Esto implica también una adecuación de las leyes.
Existe también una relación poco analizada entre la crueldad animal, el terrorismo y el crimen organizado. Diversos estudios están demostrando también que en las zonas en las que el crimen organizado se ha instalado y en áreas en las que hay células terroristas que pueden operar sin o con muy pocas restricciones, la violencia contra estos seres también es una constante. El tráfico de especies es un delito en sí, perpetrado por redes criminales, pero también hay otras formas de abuso desarrollado por éstas. Se está encontrando que junto a la pornografía infantil, la zoofilia y el abuso, sadismo y maltrato sexual contra los animales también es un negocio lucrativo que opera al margen de la ley. Se ha encontrado también que el abuso animal puede ser un indicador de posibles actos de terrorismo. En México se han hecho denuncias por periodistas respecto a la compra de animales exóticos por parte de capos de la droga, que no sólo los tienen en condiciones imposibles de corroborar, sino que los usan para desaparecer a sus enemigos.
Esto plantea preguntas obligadas en países en los que el abuso hacia los animales se ha establecido como parte de la “cultura” y se defiende como tal. Están las peleas de perros, de gallos, corridas de toros, peleas de caballos, por mencionar algunas “tradiciones”. La sociedad ha normalizado de tal manera la violencia y la indiferencia hacia las especies no humanas que resulta ya difícil reconocerla en muchos casos.
Probablemente uno de los aspectos más preocupantes sea el hecho de que las niñas y los niños crecen en contextos de violencia en los que el maltrato hacia otras especies es normal y en donde desde pequeños se les enseña a ejercer esta violencia. Asia es un buen ejemplo en el caso de los elefantes, en donde 3 de cada 4 viven esta realidad y en donde a los chiquillos se les enseña desde temprana edad a “domesticarlos” y “quebrarlos” y se ven escenas lamentables en las que los niños empiezan a practicar con perros para poderlo hacer “cuando sean grandes”. Es evidente que urge a nivel mundial un cambio de paradigma educativo en el que el respeto hacia las especies no humanas sea una constante.
Por último, valdría la pena considerar los posibles efectos internacionales que el precedente sentado por el FBI pudiera establecer. Esto puede tener diversas ramificaciones y menciono algunas. De entrada, valdría la pena que los países adoptasen medidas similares en el caso de análisis, estudio y resolución de crímenes y delitos para detectar la constante del abuso hacia los animales. Tener datos globales con indicadores similares permitiría tener un mapa más amplio del crimen organizado, patrones de comportamiento y flujo de sus negocios. Esto también posibilitaría la colaboración entre países y agencias para atender la crueldad animal y el crimen global y propiciaría establecer posibles respuestas conjuntas ante estos delitos.
Es fundamental que la sociedad reconozca la crueldad animal no solo como un problema de maltrato hacia ellos, lo cual en sí ya es un delito, sino como una señal de alerta temprana para crímenes más graves y de mayor escala e impacto.
Esto implica un cambio cultural en el que todas las personas están, o estamos, involucradas y en el que hace falta una profunda y estrecha colaboración entre la sociedad y las autoridades. Construir una cultura de respeto y dignificación de la vida animal es central y hacer de su cuidado y denuncia del abuso una nueva realidad. Es uno de los pequeños grandes pasos hacia la construcción de una cultura de la paz. No es cosa menor.
Fiscales de Nueva York presentaron una acusación formal contra el sospechoso del asesinato del ejecutivo Brian Thompson, director de la aseguradora de salud UnitedHealthcare.
El sospechoso del asesinato del director de la empresa de seguros de salud estadounidense UnitedHealthcare fue acusado formalmente este martes de asesinato en primer grado, según informó el el fiscal del distrito de Nueva York.
Luigui Mangione se enfrenta a varios cargos, incluido el de asesinato en primer grado, y dos cargos de asesinato en segundo grado, uno de los cuales describe el mortal ataque contra el ejecutivo Brian Thompson como un acto de “terrorismo”, detalló el fiscal Alvin Bragg.
“La intención era sembrar terror”, señaló el fiscal, que calificó el tiroteo como un “asesinato aterrador, bien planificado y dirigido”.
Está previsto que Mangione comparezca ante el tribunal este jueves para decidir si se le traslada de Pensilvania a Nueva York por los cargos que se le imputan, aunque Bragg sugirió que el sospechoso podría no oponerse a ello.
“Tenemos indicios de que el acusado podría renunciar a esa audiencia”, dijo Bragg.
El procedimiento de traslado está previsto para el mismo día que la audiencia preliminar de Mangione por cargos relacionados con armas de fuego en Pensilvania.
Brian Thompson, de 50 años, fue asesinado a tiros el pasado 4 de diciembre fuera del hotel Hilton de Manhattan, donde UnitedHealthcare, el gigante de seguros médicos que él dirigía, estaba celebrando una reunión de inversionistas.
Mangione fue detenido en un restaurante McDonald’s de Altoona (Pensilvania) cinco días después. Portaba un documento de identidad falso y una “pistola fantasma”, como se conoce a las armas ensambladas a partir de piezas imposibles de rastrear.
En una rueda de prensa celebrada el martes por la tarde, tanto Bragg como Jessica Tisch, comisaria del Departamento de Policía de Nueva York, hablaron sobre los cargos presentados.
Además de la muerte de Thompson, el sospechoso también se enfrenta a acusaciones por posesión de armas y falsificación. Si es declarado culpable de los cargos más graves, Mangione podría enfrentarse a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
Al ser preguntado por los cargos concretos de terrorismo, Bragg respondió que “en sus términos más básicos, se trató de un asesinato que pretendía evocar el terror“.
También arremetieron contra quienes han elogiado a Mangione por su tiroteo del 4 de diciembre: “En las casi dos semanas transcurridas desde el asesinato del señor Thompson, hemos sido testigos de una espantosa y atroz celebración de un asesinato a sangre fría”, declaró Tisch.
“No celebramos los asesinatos y no enaltecemos el asesinato de nadie”, señaló.
Los fiscales neoyorquinos comenzaron la semana pasada a mostrar a un jurado las pruebas de su caso contra Mangione.
En caso de darse la extradición entre estados, es probable que el joven de 26 años sea recluido en Riker’s Island o en otra prisión de Nueva York.
Las pruebas contra Mangione incluyen los rastros de sus huellas dactilares en la escena del crimen, dijo Tisch.
El abogado de Mangione, Thomas Dickey, aseguró que no ha visto pruebas que vinculen el arma de su cliente con el crimen.
Según el fiscal Bragg, el sospechoso llegó a Nueva York el 24 de noviembre y se alojó en un hostal de Manhattan utilizando un documento de identidad falso antes de llevar a cabo el ataque contra Thompson 10 días después.
Además de la “pistola fantasma” y el documento de identidad falso, cuando fue detenido se le encontraron un pasaporte y un documento manuscrito en el que se indicaba la “motivación y premeditación”, según la policía.
Mangione fue acusado formalmente en Pensilvania de falsificación, porte de armas de fuego sin licencia, alteración de registros o documentos de identidad, posesión de instrumentos delictivos y entrega de una identificación falsa a la policía.
Mientras espera su destino, permanece en régimen de máxima seguridad en la Correccional Estatal de Huntingdon, en Pensilvania.
Se le ha denegado la libertad bajo fianza.
Haz clic aquí para leer más historias de BBC News Mundo.
Suscríbete aquí a nuestro nuevo newsletter para recibir cada viernes una selección de nuestro mejor contenido de la semana.
También puedes seguirnos en YouTube, Instagram, TikTok, X, Facebook y en nuestro nuevo canal de WhatsApp.
Y recuerda que puedes recibir notificaciones en nuestra app. Descarga la última versión y actívalas.