Nuevo megaproyecto amenaza la existencia de un manantial ancestral en Coyoacán
Ciudadanos del pueblo de Los Reyes, Hueytlilac de la alcaldía Coyoacán denuncian que un nuevo megaproyecto amenaza el acceso al agua de la comunidad; así como, a la vegetación y fauna nativa.
Un nuevo proceso de Consulta Vecinal en la Ciudad de México se encuentra en marcha, para señalar cuál será el impacto ambiental que el megaproyecto tendrá. En esta ocasión se trata de la construcción de una plaza comercial con tiendas outlet en el pueblo de Los Reyes Hueytlilac y La Candelaria en la alcaldía Coyoacán.
Ya hay denuncias sobre el inicio de este megaproyecto
Habitantes de pueblos y barrios originarios denuncian que si la Secretaría de Medio Ambiente de la Ciudad de México (Sedema) autoriza la construcción, se amenaza la existencia de manantiales ancestrales por donde aún corre agua potable. Además pone en riesgo la existencia de estos veneros naturales, se atenta también con la vida de flora y fauna silvestre nativa en el sitio.
AnimalMX consultó a los Guardias de la Asamblea General Comunitaria que pertenece al Pueblo de Los Reyes Hueytlilac Coyoacán para conocer cuáles son sus preocupaciones acerca del proceso de Consulta Vecinal de acuerdo con el comunicado que presentaron.
Entre sus inquietudes sobre el proyecto se encuentra el acceso al agua y las afectaciones a la fauna como cacomixtles, aves, víboras, tlacuaches y teporingos que es común encontrar en los predios que la constructora busca intervenir.
Además del agua y los animales nativos, los habitantes temen que esta construcción derribe los árboles y vegetación nativa que se encuentra dentro del predio, los cuales, en temporada de lluvia, brindan servicios ecosistémicos como amortiguar las inundaciones y ser el hogar de aves.
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¿A quién pertenece el megaproyecto?
De acuerdo con el comunicado, los habitantes del pueblo de los Reyes señalan que este megaproyecto pertenece a Moisés Farca Amiga, dueño de las Plazas Oasis, Alameda y Torre del Ángel entre otros.
En una manta colocada afuera de uno de los predios se anuncia el nombre del propietario y la dirección de los cuatro predios. Tres de ellos están en avenida Aztecas con los números exteriores 196, 210 y 224 en el pueblo de Los Reyes. El último terreno se encuentra en Monserrat No. 164 en el pueblo de La Candelaria.
Los cuatro predios los fusionaron en el año 2023. En el comunicado a medios, los habitantes señalan que esta nueva plaza comercial será construida a través de Banca Mifel S.A. La superficie aproximada para esta nueva plaza comercial es de 43,456 m2 y estará ubicada a un costado de Soriana Cantil, sitio donde anteriormente estaba Cantil Sport Club.
Para que la Sedema autorice el proyecto, la constructora comenzó el Proceso Consulta Vecinal y la encargada de ejecutarlo es la consultora GMI Consulting.
La Consulta Vecinal debe dirigirse para Pueblos Originarios
Como hemos documentado en otros casos, el Proceso de Consulta Vecinal para grandes construcciones es un requisito que la Sedema solicita a través de la Dirección General de Evaluación de Impacto y Regulación Ambiental (DGEIRA). Según la Sedema este proceso sistemático busca obtener la opinión de las personas habitantes y usuarias del área donde se realizará la construcción sobre los impactos que generará y cómo los atenderá.
Para esto, se implementan encuestas, reuniones, talleres, entrevistas, o grupos focales. Sin embargo, las personas que integran las Guardias de la Asamblea General Comunitaria del Pueblo de Los Reyes Hueytlilac―forma en que se encuentran adscritos― señalan que la consulta debe dirigirse a Pueblos Originarios.
En su comunicado explican que, así como la nueva Ley Ambiental de la Ciudad de México señala que se debe hacer una Consulta Vecinal para obtener una evaluación o dictamen de Impacto Ambiental, la obra que busca ser autorizada afecta los derechos de un pueblo originario.
“Debe hacerse una Consulta a Pueblos y Barrios Originarios y Comunidades Indígenas y Afromexicanas residentes en la Ciudad de México en Materia de Participación Ciudadana, conforme a toda la normatividad internacional, nacional y local ante el órgano de máxima representación del pueblo que es la Asamblea General Comunitaria, a fin de obtener su consentimiento libre, previo e informado”, alertaron.
La Asamblea General Comunitaria denuncia que la consultora GMI Consulting, encargada de ejecutar la Consulta Vecinal Ambiental, pretendió hacer talleres con los líderes del pueblo, situación que fue rechazada.
Las personas de la Asamblea General Comunitaria del Pueblo de los Reyes Hueytlilac argumentaron a la consultora que ellos no tienen líderes y que se debía informar a toda la población, entregando el proyecto real y toda la información necesaria pero la consultora se negó.
De acuerdo con información del Gobierno de la Ciudad de México, Los Reyes Hueytilac es uno de los siete pueblos originarios de Coyoacán. Durante mucho tiempo ha sido conocido simplemente como Los Reyes. Actualmente su antiguo nombre náhuatl está regresando.
El nombre, Hueytilac, que en ocasiones también se reconoce como Quiahuac se traduce como “en las grandes aguas negras”. En entrevista con la La Asamblea General Comunitaria exigen que la consultora tome en cuenta a todas las personas que habitan en el pueblo sobre el impacto real que tendrá la obra.
Aunque no se tiene registro de que las nuevas generaciones hablen alguna lengua originaria, es otro de los puntos que la consultora no consideró al tratarse de un pueblo originario.
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¿Con qué fallas inició esta consulta?
El anuncio del inicio del Proceso de Consulta Vecinal para Grandes Construcciones en la Ciudad de México se publicó el día 12 de agosto del presente año. La consultora GMI Consulting publicó el aviso en el diario La Jornada.
El nombre para identificar este proyecto es ‘Outlet Punta Sur’ y se pretende que se encuentre en avenida Aztecas #210. La superficie total de la construcción será de 50,000 m2. El proceso de consulta vecinal estará activo del 13 de agosto al 7 de septiembre de 2024.
Los Guardias de la Asamblea General Comunitaria del Pueblo de Los Reyes Hueytlilac de Coyoacán, tras iniciar los talleres con la consultora, han señalado algunos puntos importantes a considerar:
- Reconocen que es una encuesta y no una consulta.
- Que la encuesta comenzó a realizarse de manera virtual desde el día 12 de agosto.
- Que las quejas y sugerencias serán recibidas a través de correo electrónico.
- La instalación de módulos, informativos y receptores de opinión será del día 13 al 19 de agosto.
- Del 20 de agosto al 7 de septiembre harán entrevistas y reuniones con ‘Actores clave y Grupos Representativos’ de las comunidades.
Finalmente el del 31 de agosto al 7 de septiembre, y se harán las encuestas presenciales en lo que denominan ‘área de influencia’ a tres pueblos: Los Reyes, Candelaria y San Pablo Tepetlapa, 1 barrio, del Niño Jesús y 10 Colonias, Adolfo Ruíz Cortines, Ajusco, Atlántida, Ciudad Jardín, El Rosario, El Rosedal, Huayamilpas, Nueva Díaz Ordaz, Pedregal de Santo Domingo y Xotepingo.
El Megaproyecto no es un simple outlet, es la continuación de Punta Norte. El proyecto que se pretende iniciar es ahora “Punta Sur”, lo que significará un gran Centro Comercial, aunque no tenga cines.
La Asamblea General Comunitaria alerta que ‘la mal llamada consulta’ como se puede observar ya que solo es una encuesta y en la que la metodología incumple lo establecido en la normatividad ambiental al no publicar, difundir y explicar debidamente el proyecto de la obra.
“No se advierte la voluntad real de hacer la difusión y presentación debida a la población”, denunciaron.
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En un mundo cada vez más estresante, muchos viajeros encuentran consuelo en la repetición: volver cada año a los mismos pueblos de esquí, suburbios costeros o sus cafés favoritos.
Durante los últimos 15 años, el fotógrafo Jason Greene y su familia han viajado desde la ciudad de Nueva York hasta Mont Tremblant, en Quebec, para pasar una semana del invierno boreal en la nieve.
“Tenemos una tradición: el primer día comemos paletas de jarabe de arce, patinamos sobre hielo y luego pasamos por la tienda de dulces local”.
La ciudad turística francocanadiense, dice, “ocupa un lugar especial en nuestros corazones porque allí todos aprendimos a esquiar y hacer snowboard”.
Para muchos viajeros, la novedad es el objetivo: tachar nuevos destinos y buscar nuevas sensaciones.
Pero un número creciente de personas, como Greene y sus cuatro hijos, hace lo contrario: regresa al mismo lugar cada año. Reservan la misma habitación, comen los mismos platos y recorren las mismas calles para encontrar comodidad en lo familiar, en lugar de la emoción del descubrimiento.
“Para muchas personas, hay una sensación de seguridad al volver a lo conocido”, afirma Charlotte Russell, psicóloga clínica y fundadora de The Travel Psychologist.
“Sabemos qué esperar, qué nos conviene… y [es] menos probable que enfrentemos desafíos inesperados”.
Este comportamiento, añade, suele atraer a personas abrumadas por su vida diaria, por lo que repetir las mismas vacaciones una y otra vez puede resultar muy reconfortante.
Movidos por la nostalgia
Esa sensación incomparable de tranquilidad fue lo que me llevó de nuevo a Lima, Perú, este mayo, exactamente un año después de mi primera visita, mientras escribía mi libro de viajes Street Cats & Where to Find Them.
Me alojé en el mismo hotel, comí el mismo sándwich en el mismo café, caminé por las mismas calles y dejé que muchos de los mismos gatos durmieran en mi regazo, disfrutando de la satisfacción que me había sorprendido la primera vez.
La profesora de sociología Rebecca Tiger ha regresado a Atenas ocho veces, con una novena visita programada este mes, por razones similares. “Siempre me quedo en Pangrati porque me encantan los cafés del barrio [y] sus gatos”, señala.
“Ahora tengo residentes locales con quienes mantengo contacto mientras estoy fuera y socializo cuando regreso”.
Tiger aprecia la familiaridad que ha cultivado con el tiempo y no se aburre gracias a la diversidad de experiencias que ofrece el lugar.
Los datos reflejan este cambio impulsado por la nostalgia.
Según el informe para 2026 Where to Next? de la plataforma de viajes Priceline, el 73% de los viajeros encuestados afirmó sentirse atraído por los lugares y experiencias que los marcaron, desde playas familiares hasta parques de diversiones.
El último informe global de viajes de Hilton confirma la tendencia: el 58% de los viajeros con hijos planea volver a destinos de su propia infancia, mientras que el 52% de los viajeros brasileños regresa a los mismos lugares año tras año.
La nostalgia y la comodidad son lo que ayuda a Greene y su familia a “dejar atrás el estrés de la vida y relajarse en nuestros lugares favoritos”.
No solo repiten su costumbre del jarabe de arce en la montaña.
Su rutina diaria en Mont Tremblant también se replica cada año: “Esquí y snowboard durante tres días seguidos, luego un día libre para pasear en trineo con perros, dar un paseo en carruaje u otra actividad invernal”.
Cuando la vida se vuelve difícil, es la anticipación de su viaje invernal -y la alegría que sienten juntos allí- lo que les ayuda a sobrellevarlo.
Un toque de novedad
Russell señala que, desde una perspectiva neurocientífica, “los circuitos de recompensa en nuestro cerebro pueden volverse menos receptivos a medida que nos acostumbramos a visitar el mismo lugar”.
Sin embargo, volver puede seguir aportando beneficios para el bienestar, añade, destacando que suele ser más relajante ir a un sitio asociado con el disfrute porque seguimos “distanciados de las señales que asociamos con el estrés”.
Greene afirma que su familia no ha experimentado ninguna disminución en la emoción de hacer exactamente las mismas cosas en el mismo orden cada año.
Aun así, Tiger y yo intentamos añadir un toque de novedad a nuestras vacaciones repetidas y rutinas familiares.
Cuando visito Inglaterra, lo cual intento hacer varias veces al año, no es para repetir experiencias idénticas, sino para conocer estadios de fútbol, producciones teatrales y rutas de senderismo.
Si solo me quedara en Wandsworth y viera partidos en el estadio de Craven Cottage, mis vacaciones se volverían aburridas rápidamente.
En cambio, recorro el país, como en distintos restaurantes y dejo que mi curiosidad me guíe hacia nuevas aventuras. Según Russell, esta combinación ayuda a mantener viva la chispa de la exploración, al tiempo que ofrece comodidad.
Esto es importante, explica, porque “hay un punto en el que volver al mismo lugar empieza a ser problemático.
Si regresamos demasiadas veces y superamos nuestro “apetito” por él, se llama adaptación hedónica: acostumbrarse a las cosas placenteras y volver a nuestro nivel emocional original”.
Tiger plantea un argumento similar sobre su predilección por Grecia.
“El país sigue siendo nuevo para mí: nuevas playas, islas y pueblos rurales; hay tantos lugares por explorar que podría pasar toda una vida allí y no conocer ni una fracción de ellos”.
Si solo nos fijamos en los códigos de los aeropuertos de destino, nuestros viajes podrían parecer idénticos. Pero las experiencias que vivimos -Tiger en Grecia y yo en Inglaterra- son tan distintas que nuestros recorridos nunca resultan monótonos.
Crecí en los suburbios de Filadelfia y veía a los vecinos viajar en masa y entre el tráfico hacia la costa de Jersey cada verano. Iban al mismo pueblo, la misma playa, con las mismas atracciones en el mismo muelle y se alojaban en las mismas casas de alquiler.
Alguna vez me pregunté: ¿qué pasa cuando viajar deja de ser una ruptura con la rutina y se convierte en otra rutina más?
Ahora, en un mundo cada vez más estresante, entiendo el atractivo de buscar alegría en lo familiar, mientras doy un pequeño paso fuera de mi zona de confort para encontrar nuevas emociones en lugares conocidos.
A Tiger le encantan sus rutinas vacacionales en Grecia, pero admite que otras partes del mundo también le atraen.
“Siento mucha curiosidad por Japón, pero me gusta controlar el ritmo de mis días”, dice.
Su trabajo como profesora es agotador, al igual que su trayecto diario, por lo que se entiende cuando afirma: “Mi tiempo en Grecia es un respiro que agradezco, tanto porque es familiar como porque resulta extraño al mismo tiempo”.
Y añade: “Atenas casi se siente como un segundo hogar”.
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