Para entender mejor
En México, desde las fiscalías hasta gobiernos estatales e incluso instituciones como Petróleos Mexicanos y la Guardia Nacional o la Secretaría de la Defensa Nacional han adquirido y utilizado herramientas de intervención de comunicaciones, extracción de información de dispositivos, geolocalización, y hasta antenas falsas para espiar a ciudadanos, pese a que no tienen facultades legales o no contaron con orden judicial para ello.
Así lo revela el informe “El Estado de la Vigilancia” de la Red en Defensa de los Derechos Digitales (R3D), que incluye el diagnóstico de la vigilancia en las comunicaciones en el país realizada desde 2012 y hasta 2023, de acuerdo con registros oficiales de las adquisiciones y hallazgos de equipos intervenidos, sobre todo de periodistas, defensores de derechos humanos y políticos.
De acuerdo con datos publicados por el Poder Judicial de la Federación, existe una clara tendencia al alza en la resolución de solicitudes de intervención de comunicaciones privadas por parte de jueces federales en los últimos años.
Mientras en 2017, el último año de gobierno de Enrique Peña Nieto, los jueces recibieron mil 756 solicitudes para intervenir comunicaciones, en 2018, el año de la transición, hubo 5 mil 881 y para 2023 registraron 10 mil 626, lo que representa un crecimiento de 80% en el sexenio de Andrés Manuel López Obrador.
Sin embargo, existe evidencia de que las autoridades utilizan las herramientas de vigilancia aún sin orden judicial y sin tener facultades legales.
Por ejemplo, si bien la Guardia Nacional reportó haber solicitado la autorización para la intervención de comunicaciones privadas 92 veces en el año 2020, en una respuesta a una solicitud de acceso a la información realizada por R3D, la Guardia Nacional reportó haber intervenido las comunicaciones privadas de 289 líneas telefónicas (3.14 líneas por solicitud).
Además, aunque instituciones como las Fiscalías tienen la obligación de reportar las solicitudes de intervención de las comunicaciones, en 2020, la Fiscalía General de Chihuahua reportó en la Plataforma Nacional de Transparencia haber realizado 524 solicitudes de intervención de comunicaciones privadas. Pero en respuesta a solicitudes de información, dijo haber realizado 601.
Sobre el acceso a datos conservados y geolocalización a empresas de telecomunicaciones, R3D advierte que “existen otros indicios de un mayor subregistro derivado del abuso del mecanismo excepcional contemplado en el artículo 303 del CNPP, para solicitar directamente el acceso a datos conservados a las empresas de telecomunicaciones sin control judicial previo y sujeto a la ratificación posterior por parte de la autoridad judicial federal”.
A partir de los datos obtenidos mediante solicitudes de acceso a la información, entre 2016 y 2019, las autoridades admiten que al menos el 57.3% de las solicitudes reportadas fueron realizadas sin control judicial previo, de las cuales el 76.7% fueron realizadas invocando las causales de excepción a las que se refiere el artículo 303 del CNPP y de ellas, el 39.5% no fueron ratificadas total o parcialmente.
Entre los abusos que se han documentado, se encuentra evidencia revelada por The New York Times en noviembre de 2023 sobre cómo la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México accedió a registros telefónicos, mensajes de texto y datos de localización de diversas figuras políticas, tanto del partido gobernante como de la oposición.
Te puede interesar: Ejército monitorea redes sociales para identificar críticos de militares y del Gobierno; crea bots para influenciar web
La Fiscalía solicitó esta información a la empresa de telecomunicaciones Telcel, argumentando que estos datos serían utilizados en investigaciones sobre secuestros y desapariciones e invocando las causales de excepción de la autorización judicial previa a las que se refiere el artículo 303 del CNPP.
Sin embargo, R3D sostiene que se trata de un “modus operandi”, toda vez que también le ocurrió a la periodista Marcela Turati, la cofundadora del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), Mercedes Doretti, y la defensora de derechos humanos Ana Lorena Delgadillo, quienes señalaron que la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) accedió a sus registros telefónicos al incluirlas en en la misma carpeta donde se investigaba a integrantes de una organización delictiva.
“A partir de estos casos se ha apreciado un modus operandi en el que las fiscalías abren una investigación o usan una existente y, con base en ‘información anónima’, solicitan a las empresas de telecomunicaciones que les den información de números que no guardan relación con algún delito. De esta forma se utilizan carpetas sobre secuestro u otros delitos graves con la intención de eludir la obligación de obtener autorización judicial federal de manera previa”, señala el informe.
La organización R3D documentó en “El estado de la Vigilancia” que en México se han usado herramientas como FinFisher de Gamma International, Galileo de Hacking Team, Pegasus de NSO Group y Reign de Quadream para infectar equipos y acceder a toda la información del usuario.
También han utilizado herramientas de extracción forense e incluso antenas falsas y geolocalización basada en la explotación de vulnerabilidades en la infraestructura de telecomunicaciones.
En 2013 y 2015, una investigación de Citizen Lab –laboratorio multidisciplinario de la Universidad de Toronto– reveló evidencia sobre la presencia de servidores de comando y control de FinFisher en 32 países, incluyendo en México.
Sobre Galileo de Hacking Team, gracias a una gran cantidad de correos electrónicos y documentos internos de la firma italiana Hacking Team fueron filtrados al público el 5 de julio de 2015, se demostró que la empresa de software de espionaje había vendido sus productos a gobiernos de países bajo graves crisis de derechos humanos, tales como Baréin, Sudán o Uzbekistán. De un total de 35 naciones.
En México, los gobiernos locales mencionados con relaciones comerciales con Hacking Team se encuentran: Baja California, Campeche, Chihuahua, Durango, Estado de México, Guerrero, Jalisco, Nayarit, Puebla, Querétaro, Tamaulipas y Yucatán; así como dependencias como la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN), la Policía Federal, la Procuraduría General de la República (PGR) y Petróleos Mexicanos (Pemex).
Otro ejemplo es Pegasus de NSO Group, una compañía israelí que asegura dedicarse a “proveer a gobiernos autorizados con tecnología que los ayude a combatir el terror y el crimen; la compañía vende solo a agencias gubernamentales autorizadas, y cumple cabalmente con estrictas leyes y regulaciones de control de exportaciones”
Puedes leer: Fiscalía de Gertz gasta 142.9 mdp para rastrear celulares y sólo justifica uso en 0.24% de 135 mil casos
El primer antecedente de Pegasus en México se registró en 2012, cuando investigaciones periodísticas publicaron que la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) se convirtió en el primer cliente internacional de NSO Group, al adquirir el sistema Pegasus como parte de una serie de contratos celebrados con la empresa Security Tracking Devices S.A. de C.V., los cuales ascendieron a 5.6 mil millones de pesos.
El espionaje continuó en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, en 2019 y 2022, toda vez que existe evidencia de que la Sedena adquirió un software a la empresa autorizada para la venta del software en México, con el que accedió a la comunicación celular del defensor de derechos humanos, Raymundo Ramos, el periodista Ricardo Raphael y un periodista de Animal Político.
También se realiza vigilancia masiva con antenas falsas, aunque México no tenga un marco legal de regulación. Mediante una serie de solicitudes de acceso a la información pública realizadas por R3D, se ha documentado la compra de antenas falsas por parte de diversas autoridades como las Procuradurías de Baja California, de la Ciudad de México, Morelos, Nayarit, Quintana Roo, Puebla.
Además, documentos internos de la SEDENA revelan la adquisición y uso de antenas falsas de marca Verint, Modelo Engage Pi2, también denominado por el Ejército como “Sistema GSM Pasivo”.
Pese a la ilegalidad del espionaje, en México no hay un solo sentenciado por ello, y las autoridades ni siquiera han realizado el trabajo de investigación de manera expedita. en 2017, 2022 y 2023, las personas vigiladas por el spyware Pegasus, principalmente personas defensoras de derechos humanos y periodistas, presentaron denuncias penales ante la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Cometidos contra la Libertad de Expresión (FEADLE), pero hasta el momento no han hallado a ningún responsable.
“La Fiscalía, entre otras deficiencias, se ha negado a realizar actos esenciales de investigación, ha obstruido y fragmentado las investigaciones, ha hecho recaer la carga de la prueba en las víctimas y les ha negado copia de los expedientes”, afirma el informe.
Te puede interesar: Fiscalía de CDMX en gestión de Godoy vigiló geolocalización de ciudadanos en 48 mil ocasiones; no reporta delitos resueltos
Respecto a la más reciente investigación sobre el abuso de Pegasus por parte del Ejército entre 2019 y 2022, la Fiscalía no ha logrado ningún avance en más de dos años. Ni siquiera ha podido obtener los contratos en los que el Ejército obtuvo licencias para operar Pegasus.
Esto porque la Sedena se ha negado a hacer públicos los contratos con NSO Group para la adquisición de Pegasus u otros sistemas de vigilancia, como prometió públicamente el presidente López Obrador, a pesar de las numerosas pruebas y documentos que muestran el número y las fechas de los contratos, así como los pagos realizados por la institución.
Leer también: Ejército espía: realidad innegable
Las largas y frías noches suecas pueden disuadirte de ir en invierno, a menos que busques ese lujo esquivo del siglo XXI: dormir bien.
El transbordador atraviesa las heladas aguas del Báltico mientras recorre el archipiélago sueco oriental. Nombres de lugares como Skarpö, Hjälmö y Gällnö están pintados en las cabañas de color rojizo que bordean los embarcaderos. El sufijo “Ö” significa isla en sueco, una representación pictórica de una masa de tierra rodeada de mar con dos personas diminutas a punto de atracar.
Soy la única persona que desembarca en Svartsö, una de las pocas islas del archipiélago donde el alojamiento permanece abierto en invierno. Avanzo por un camino nevado hasta Skärgårdshotell, donde me asignan una cabaña al borde de un bosque con vistas a la oscura extensión del lago Svartsöfladen. Es lo más lejos que se puede estar de todo.
Mi habitación es la simplicidad sueca en estado puro: una cama, una silla y una mesilla de noche. No hay televisión ni mucho más que me distraiga de la prístina tranquilidad de mi entorno. Y menos mal, porque estoy aquí sobre todo para dormir.
En la era de la conectividad incesante, dormir se ha convertido en el lujo supremo y ha dado lugar a una nueva tendencia en los viajes: el turismo del sueño, en el que los viajeros privados de sueño eligen su hotel en función de las almohadas o reservan retiros para dormir alejados de todo, con actividades específicas para inducir el sueño.
Sin embargo, Suecia tiene un enfoque diferente y más natural del turismo del sueño, que se inspira en el paisaje y en un modo de vida más tradicional. A menudo asociada a ciudades bulliciosas como Estocolmo y Gotemburgo, Suecia abraza su lado más somnoliento cuando llega el invierno e invita a los visitantes a hacer lo mismo.
“La abundancia de naturaleza accesible combinada con noches oscuras, temperaturas frescas y un énfasis cultural en la relajación, hacen de Suecia un lugar ideal para el turismo del sueño”, explica Christian Benedict, investigador del sueño de la Universidad sueca de Uppsala.
“Los estudios han demostrado que la tecnología y la forma en que incide en nuestra vida tienen un efecto significativo en nuestro sueño, y pasar más tiempo en la naturaleza está relacionado con una mejor salud mental y menos noches sin dormir“.
Cuando decidí probarlo por mí misma, elegí el archipiélago de Estocolmo, un paraíso para los amantes de la naturaleza con más de 30.000 islas, muchas de ellas deshabitadas. Svartsö es una de las islas más grandes, pero sólo tiene unos 65 habitantes todo el año. A dos horas en ferry de Estocolmo, en verano es una escapada popular que atrae a veraneantes y turistas para pasear, nadar, montar en bicicleta o en kayak.
En los meses de invierno, el Skärgårdshotell es el único alojamiento abierto y sus acogedoras cabañas en el bosque, alejadas del edificio principal, ofrecen el tipo de paz y tranquilidad que busco, sin dejarme completamente aislada en la naturaleza.
Soy una urbanita de mente inquieta. Suelo despertarme varias veces por la noche y me levanto temprano sintiendo la necesidad de abordar la larga lista de cosas que me han mantenido despierta. Aquí, en la isla, en invierno, me queda poco por hacer, salvo caminar, leer y observar los ritmos del día de una forma que no puedo hacer cuando estoy en la ciudad.
Svartsö significa literalmente “la isla negra”, en referencia al oscuro lecho de granito, aunque en invierno el nombre podría referirse simplemente a los cielos oscuros, completamente libres del resplandor de las ciudades.
Más al norte, en el Círculo Polar Ártico, donde la noche polar cubre la tierra de oscuridad durante meses, lejos de quedarse en casa, los habitantes se atan linternas frontales y exploran senderos nevados.
Así que hago lo mismo y salgo al atardecer entre campos de ovejas, cerdos y cabras. Me dirijo al borde del bosque y desciendo hasta el mar, observando cómo el sol cae en el agua y escuchando cómo el ruidoso taladro de un pájaro carpintero se detiene, casi como si se hubiera accionado un interruptor. El bosque circundante se queda en silencio mientras la Tierra se dispone a dormir bajo un pesado manto de nieve.
Encuentro la sauna del hotel discretamente escondida entre los árboles y termino el día al clásico estilo escandinavo, sudando todas las preocupaciones que podrían mantenerme despierta, seguido de una zambullida en el vigorizante mar.
Tras una cena sencilla, me siento junto al fuego y hablo con un grupo de kayakistas que remó hasta aquí desde Estocolmo. “Tradicionalmente, en los meses más oscuros, el fuego era importante para calentarse y alumbrarse, pero también como parte del ritual nocturno”, me cuenta Marie. “Después de cenar, la gente se acurrucaba alrededor del fuego y dejaba que el parpadeo de las llamas calmara todas las tensiones del día de trabajo”.
A mí me funciona. De hecho, me resulta tan soporífero que a las 20:00 ya estoy lista para retirarme a mi cabaña, donde me acurruco bajo un edredón y duermo unas 10 horas inauditas.
Es fácil pensar que la falta de sueño es un problema muy del siglo XXI, pero la leyenda sueca de la Mara demuestra que es tan antigua como el bosque. Mara, un extraño ser mítico del que se decía que torturaba a la gente mientras dormía, provocándole miedo y opresión en el pecho, dio origen a la palabra “pesadilla”.
Pero en los tiempos modernos, las distracciones tecnológicas han sustituido a las criaturas míticas, ya que cada vez son más las personas que luchan por conciliar el sueño.
“Suecia es una de las sociedades más digitalizadas de Europa y fue una de las primeras en adoptar la digitalización”, explica Thérèse Cedercreutz, directora comercial del grupo sueco Scandic Hotels. “Nuestro interés por el sueño, y sobre todo por la falta de él, se debe a esto y a una mayor conciencia de su impacto en nuestra salud, que nos hemos propuesto contrarrestar con una serie de medidas”.
En todo el mundo, otros hoteles, tanto urbanos como remotos, están yendo varios pasos más allá.
El Hotel Cadogan de Londres cuenta con un servicio especializado desarrollado en colaboración con el hipnoterapeuta y experto en sueño Malminder Gill, que ofrece un programa de meditación guiada para dormir. El Mandarín Oriental de Ginebra ofrece un paquete de tres días, en colaboración con una clínica privada del sueño, que incluye el estudio de los patrones de sueño de los huéspedes y la creación de programas de sueño individuales.
En Tailandia, en medio de la vegetación tropical de la Costa Real, el naturópata residente del complejo Civa-Som Hua Hin te guiará en todos los aspectos, desde la dieta hasta las hormonas que puedan estar afectando los ritmos circadianos. Por su parte, el Carillon Miami Wellness Resort utiliza tecnologías electromagnéticas y de infrarrojos para conciliar el sueño.
“Nuestros clientes nos decían que se sentían agotados en general y esto parecía deberse con frecuencia a la falta de sueño”, explica Stella Photi, fundadora de la empresa de vacaciones Wellbeing Escapes.
“Intentamos incorporar elementos de las culturas locales a nuestros programas de sueño. En países budistas como Tailandia o Sri Lanka ofrecemos meditación y atención plena. En India, los tratamientos ayurvédicos utilizan hierbas locales; y en Italia, los paseos guiados por los viñedos forman parte de un programa de actividades que favorecen el sueño”.
En Suecia, sin embargo, es la experiencia de estar en la naturaleza lo que constituye la base del turismo del sueño. “El lema de la naturaleza es ‘hazlo sencillo'”, dice Jennie Walker, fundadora de Walkers Naturturer, una empresa de guías naturales del archipiélago de la costa oeste.
“En invierno, en los áridos afloramientos que caracterizan el archipiélago de Gotemburgo, hay poca vegetación, y los abedules y pinos se apartan de los fuertes vientos del oeste. Un paseo por los campos de rocas en un día de invierno, quizás cruzándote con una foca tomando el sol, es la preparación perfecta para un buen descanso nocturno”.
Y mientras que los retiros de sueño tradicionales se centran en relajarse antes de acostarse, en Suecia el sueño empieza al amanecer con la posibilidad de realizar actividades inductoras del sueño como senderismo, kayak y baños de bosque.
Así que, después de mi descomunal noche de sueño, me repongo con un desayuno a base de muesli, yogur, mermelada de arándanos rojos y panecillos de canela para recorrer el tramo de Svartsö del Sendero del Archipiélago de Estocolmo.
Todo el día es como un baño prolongado en el bosque y cuando vuelvo a mi cabaña ya no tengo que preocuparme de nada más que de cenar, sentarme junto al fuego y dormir bien.
Y así fue. Parece que, para mí, el ejercicio suave en un entorno tranquilo, con pocas distracciones y atenta a la señal de la naturaleza para irme a la cama, es el reajuste circadiano perfecto.
“Los retiros de sueño no se limitan a ayudar a la gente a dormir cuando está de vacaciones”, dice Photi. “El objetivo es permitir un enfoque relajante, holístico y personal que te brinde nuevos hábitos de sueño y vigilia, con el fin de lograr un cambio duradero”.
*Este artículo fue publicado en BBC Future. Haz clic aquí para leer la versión original (en inglés).
Haz clic aquí para leer más historias de BBC News Mundo.
Suscríbete aquí a nuestro nuevo newsletter para recibir cada viernes una selección de nuestro mejor contenido de la semana.
También puedes seguirnos en YouTube, Instagram, TikTok, X, Facebook y en nuestro nuevo canal de WhatsApp, donde encontrarás noticias de última hora y nuestro mejor contenido.
Y recuerda que puedes recibir notificaciones en nuestra app. Descarga la última versión y actívalas.