La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) determinó que elementos militares incurrieron en violaciones graves de los derechos humanos al disparar y matar a seis migrantes, entre ellas una menor de edad, en Chiapas el pasado 1 de octubre.
A través de la recomendación 175VG/2025, la CNDH determinó que los elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa) hicieron uso excesivo de la fuerza mediante el empleo ilegítimo de armas de fuego al disparar contra el vehículo donde se encontraban las víctimas.
La Comisión no pudo identificar que los integrantes de la Defensa intentaran realizar maniobras menos letales contra los ocupantes del vehículo, así como tampoco advirtió que el uso de armas de fuego haya sido inevitable.
También se estableció que el uso de fuerza aplicado no fue gradual, proporcional, ni adecuado y que las personas fallecidas fueron víctimas de uso excesivo e innecesario de la fuerza en la que se usaron armas de fuego de forma ilegítima.
Por lo anterior, la CNDH reconoció que el ejército violó los derechos humanos de la vida y la integridad personal.
“Si bien es cierto que no se pudo determinar que existió intencionalidad directa por parte de los elementos castrenses para ocasionar los daños referidos -como causar la muerte de seis personas- sí se generaron indicios que convierten a dos de ellos en directamente responsables frente a la obligación máxima que tenían, como servidores públicos, de proteger la vida y la integridad de las personas”, dice la recomendación.
Ante la gravedad de los hechos, la CNDH solicitó a la Defensa colaborar con la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) para realizar el trámite de la reparación integral del daño causado a las víctimas directas e indirectas de este acontecimiento.
También, solicitó gestionar la atención médica y psicológica para las personas con las que la Comisión ha tenido contacto, así como colaborar en el trámite de las denunciar ante el Órgano Interno de Control.
De igual forma, recomendó darle seguimiento a la carpeta de investigación y a la causa penal iniciada por el caso.
Finalmente, el ejército deberá presentar un Protocolo de Atención al Migrante, así como la realización de cursos especializados en la Ley Nacional sobre el Uso de la Fuerza, con énfasis en el uso legítimo de las armas de fuego y derechos humanos de los migrantes y otras personas en el contexto de la movilidad humana.
La noche del 1 de octubre, poco antes de las 9 de la noche, elementos del Ejército dispararon en contra de migrantes que se encontraban circulando en la carretera Villa Comaltitlán-Huixtla, Chiapas, provocando la muerte de seis personas.
Según la versión de la Secretaría de la Defensa, los elementos del ejército identificaron una camioneta tipo pick up que iba a alta velocidad acompañada en caravana de otras dos camionetas con redillas “como las que usan grupos delincuenciales en esa región”.
Dos elementos del Ejército dijeron haber escuchado detonaciones y abrieron fuego, deteniendo la marcha de una de las camionetas.
En los autos viajaban 33 migrantes de nacionalidad egipcia, nepalí, cubana, hindú, pakistaní y árabe.
También lee: Sheinbaum defiende a las Fuerzas Armadas pese a abusos del Ejército y la Guardia Nacional
Luego de las detonaciones hechas por dos elementos del Ejército, 4 migrantes fallecieron en el lugar, 12 resultaron lesionados y fueron trasladados al Hospital General de Huixtla, donde murieron dos más mientras recibían atención médica.
Tras los hechos, los dos elementos que dispararon fueron separados de sus funciones para que se realizaran las investigaciones pertinentes.
Attenborough afirma que el estado de los océanos casi le ha hecho perder la esperanza en el futuro de la vida en el planeta. Pero lo que lo ha alejado de la desesperación es que el océano puede “recuperarse más rápido de lo que jamás habíamos imaginado”.
El célebre naturalista y divulgador científico británico David Attenborough presenta este martes una de las películas más importantes de su carrera, en vísperas de cumplir 99 años.
Su nuevo largometraje, Océano, puede ser decisivo para salvar la biodiversidad y proteger al planeta del cambio climático, dice, asegurando que aún estamos a tiempo de hacerlo.
“Después de casi 100 años en el planeta, ahora entiendo que el lugar más importante del planeta no está en la tierra, sino en el mar“, señaló.
El océano es el sistema de apoyo del planeta y el mayor aliado de la humanidad contra la catástrofe climática, argumenta la película, que muestra cómo los océanos del mundo se encuentran en una encrucijada.
El estreno del filme tendrá lugar en el Royal Festival Hall, en Londres, y contará con una alfombra azul (y no roja).
Mira: Conoce a las mujeres que lideran la pesca sostenible en Baja California para proteger los océanos
Toby Nowlan, productor de Océano, afirma que esta nueva producción no es la típica película de Attenborough: “No se trata de ver nuevos comportamientos en la historia natural. Es el mensaje más importante que ha comunicado”.
La película documenta cómo el estado de los océanos del mundo y nuestra comprensión de su funcionamiento ha cambiado a lo largo de la vida del naturalista, que cumple los 99 años este 8 de mayo.
David Attenborough recuerda su primera inmersión en la Gran Barrera de Coral en 1957: “Me quedé tan sorprendido por el espectáculo que tenía ante mí que momentáneamente olvidé respirar”.
Desde entonces, se ha producido un declive catastrófico en la vida en los océanos del mundo. “Casi no nos queda tiempo”, advierte.
Océano contiene algunas de las imágenes más gráficas jamás vistas del daño que la pesca de arrastre de fondo —una práctica pesquera habitual en todo el mundo— puede causar en el lecho marino.
Según el naturalista, es un claro ejemplo de cómo la pesca industrial puede acabar con la vida de los océanos del mundo.
Las nuevas imágenes muestran cómo la cadena que estos barcos arrastran tras de sí socava el lecho marino, obligando a las criaturas que perturba a introducirse en la red que queda detrás.
Con frecuencia buscan una sola especie, de manera que más de tres cuartas partes de lo que capturan puede ser desechado.
“Es difícil imaginar una forma más derrochadora de capturar peces”, comenta Attenborough.
El proceso también libera grandes cantidades de dióxido de carbono que contribuyen al calentamiento de nuestro planeta.
No obstante, la pesca de arrastre de fondo no solo es legal, sino que muchos gobiernos la fomentan activamente.
Lee: ¿Cómo combatir la pesca ilegal y la pérdida de biodiversidad? Una reforma podría resarcir el daño
Attenborough afirma que el estado de los océanos casi le ha hecho perder la esperanza en el futuro de la vida en el planeta. Pero, lo que lo ha alejado de la desesperación es lo que él llama “el descubrimiento más extraordinario de todos”: que el océano puede “recuperarse más rápido de lo que jamás habíamos imaginado”.
El naturalista dice también que la historia de las ballenas del mundo ha sido para él una fuente de enorme optimismo.
Se calcula que la industria ballenera mató 2,9 millones de ballenas solo en el siglo XX. Los científicos afirman que se trata de la mayor matanza de animales de la historia en términos de biomasa total. Esto llevó a casi todas las especies de ballenas al borde de la extinción.
Solo quedó un 1% de ballenas azules, dice David Attenborough: “Recuerdo que pensé que eso era todo. No había vuelta atrás. Habíamos perdido las grandes ballenas”.
Pero en 1986 los legisladores cedieron a la presión pública y prohibieron la caza comercial de ballenas en todo el mundo. Desde entonces, la población de ballenas se ha recuperado rápidamente.
Uno de los directores de la película, Keith Scholey, trabajó con el naturalista durante 44 años. “Cuando conocí a David, yo iba en pantalón corto”, bromea. Fue en 1981, dos años después de que dimitiera como director de programas de la BBC, uno de los puestos más altos de la corporación. “Había hecho una carrera y se iba a la siguiente”.
A pesar de estar a punto de cumplir 99 años, Attenborough sigue mostrándose extraordinariamente enérgico, comenta Scholey. “Cada vez que trabajas con David, aprendes algo nuevo”, dice. “Es muy divertido. Pero además, David te mantiene alerta, porque él está muy alerta y, ya sabes, siempre es un proceso muy creativo”.
Te interesa: Refugios chinamperos, la oportunidad para restaurar el humedal y el hogar del ajolote mexicano
El mensaje de David Attenborough en la película es que no todo está perdido.
Los países prometieron proteger un tercio de los océanos del mundo y él espera que su nueva película anime a los líderes a actuar con firmeza para cumplir esta promesa en una conferencia de la ONU el mes próximo.
Él cree que eso podría ser transformador.
“El océano puede volver a la vida”, dice. “Si se lo deja en paz puede no solo recuperarse, sino prosperar más allá de lo que nadie vivo haya visto jamás”.
Un ecosistema oceánico más sano también podría atrapar más dióxido de carbono, y ayudar así a proteger al mundo del cambio climático, según los científicos.
“Tenemos ante nosotros la oportunidad de proteger nuestro clima, nuestros alimentos, nuestro hogar”, concluye Attenborough, quien, a sus casi 99 años, continúa luchando por proteger el mundo natural del que a lo largo de su vida nos ha mostrado en todo su esplendor.
Haz clic aquí para leer más historias de BBC News Mundo.
Suscríbete aquí a nuestro nuevo newsletter para recibir cada viernes una selección de nuestro mejor contenido de la semana.
También puedes seguirnos en YouTube, Instagram, TikTok, X, Facebook y en nuestro nuevo canal de WhatsApp, donde encontrarás noticias de última hora y nuestro mejor contenido.
Y recuerda que puedes recibir notificaciones en nuestra app. Descarga la última versión y actívalas.