Serán las instancias de Morena las responsables de resolver el conflicto interno derivado de la afiliación del expanista Miguel Ánguel Yunes Márquez al partido, dijo este miércoles la presidenta Claudia Sheinbaum ante la petición de la gobernadora de Veracruz, Rocío Nahle, de impedir su incorporación. 

Cuestionada al respecto en su conferencia matutina, la mandataria descartó que estas diferencias provoquen una división del partido y confío en que su dirigente, Luisa María Alcalde, pueda mantener la unidad al interior del mismo. 

Sheinbaum evitó pronunciarse sobre la afiliación del expanista: “se lo dejo a la presidenta de Morena”, respondió. Y adelantó que ella no se afiliará al partido pues sus objetivos ya son otros. 

“A mí me toca desde la Presidencia fortalecer a nuestro movimiento y que no se entienda nuestro movimiento como un partido político porque eso evidentemente no, sino lo que representa nuestro gobierno que finalmente es el anhelo del pueblo de México por la justicia”, agregó.

Choque en Morena por afiliación de Yunes Márquez 

Desde el módulo de afiliación instalado en el Senado de la República, el veracruzano se dijo agradecido con Morena por abrirle las puertas y confirmó que abandonó el proceso que había abierto contra el PAN por haberlo expulsado tras respaldar desde los primeros días de la Legislatura a la coalición morenista.

Sin embargo, ese mismo día, la gobernadora de Veracruz, la morenista Rocío Nahle —adversaria de la familia Yunes en la entidad—, solicitó a la Comisión de Honestidad y Justicia de Morena no acreditar su incorporación al partido, al acusarle de no representar a su movimiento.