“Mi deber es con la gente y si Dios me lo permite y ustedes me ayudan, sí, voy a competir para ser la próxima jefa de Gobierno”, declaró Sandra Cuevas, uno de los personajes más polémicos de la política mexicana, al destapar sus aspiraciones por la Ciudad de México.
Sandra Cuevas es hija de comerciantes de Tepito, con pretensiones de policía, que posa en fotos con los líderes de la ultraderecha mundial; ha declarado que no le gustan los pobres y que le encanta portar marcas caras como Hugo Boss, Dolce and Gabbana, Versace, Coach, Carolina Herrera o Armani.
Desde que se convirtió en alcaldesa −arropada por el PRI, PAN y PRD−, hay días que ha dejado su ropa de exclusivas marcas para andar por las calles de la Cuauhtémoc vestida de policía para recorrer la alcaldía en cuatrimotos, motos y también patrullas.
Cuevas fue la apuesta del PRD, quien la eligió para competir por la alcaldía Cuauhtémoc y estuvo respaldada por los partidos de la alianza Va por la CDMX.
En las elecciones de junio de 2021, las más grandes de la historia de México, Sandra Cuevas le arrebató la alcaldía Cuauhtémoc a Morena, el partido del presidente Andrés Manuel López Obrador y de su más grande rival en la CDMX, la exjefa de gobierno Claudia Sheinbaum, con quien tuvo varios conflictos.
Este 11 de septiembre, al destapar sus aspiraciones políticas declaró: “A quien me pongan lo voy a hacer pedazos, y no es ego”.
Aseguró que ha sido la alcaldesa “más perseguida en la historia de la ciudad y ni así, la candidata a la presidencia (Sheinbaum) pudo conmigo. Entonces ¿quién va a poder conmigo?”.
Sandra Cuevas apuesta por convertir a la CDMX en una entidad al nivel de Nueva York, Hong Kong y Ámsterdam.
Sandra Cuevas nació el 25 de mayo de 1986 y es originaria del barrio de Coltongo en Azcapotzalco, Ciudad de México.
Estudió comercio internacional en la Universidad del Valle de México y tiene una maestría y doctorado en el Centro de Estudios Jurídicos.
Cuenta además con diplomados en mercados asiáticos en la UVM y otro más en comercio exterior, por los cuales realizó viajes de prácticas a Hong Kong, Shanghai, Beijing, Panamá, Canadá y Estados Unidos.
Antes de llegar a ocupar un cargo público, Sandra Cuevas fue fundadora y presidenta del proyecto social “Por Un México Bonito”, dedicado a la protección de derechos de niñas, niños y adolescentes.
Además, es dueña de la galería de arte 11:11, así como de la productora de eventos masivos Danika Producciones.
Como funcionaria pública, ejerció cargos en el Servicio de Administración Tributaria (SAT) y fue jefa de departamento en la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
Desde 2018 se mostró en redes sociales como seguidora del presidente López Obrador, acudía a los llamados AMLOFest y asistió a varias reuniones de Morena cuando el actual mandatario buscaba convertirse en presidente.
Incluso publicó imágenes donde se le ve acompañada de militantes morenistas como Cuitláhuac García, gobernador de Veracruz; Mario Delgado, presidente nacional de Morena; y Citlalli Hernández, secretaria general de ese partido.
Además, Cuevas mantiene una relación de amistad con el morenista Ricardo Monreal, quien también gobernó la alcaldía Cuauhtémoc; sin embargo, esa amistad trajo señalamientos contra el senador a quien se le acusó de presuntamente operar a favor de la candidata de oposición e influir en su triunfo frente a su rival Dolores Padierna.
Ricardo Monreal también ha defendido a Cuevas y ha refrendado su amistad y solidaridad con la funcionaria, uno de esos momentos ocurrió cuando estaba en juego su suspensión temporal de la alcaldía.
Cuevas incursionó en la política cuando se afilió al partido Fuerza por México, fundado por exmiembros de Morena y Nueva Alianza, partido cercano a la maestra Elba Esther Gordillo. Su primera aspiración fue competir en la elección de 2021 por la alcaldía Azcaptozalco.
Sin embargo, sus planes cambiaron y en 2021 el PRD le ofreció integrarse a la alianza opositora e ir por Cuauhtémoc. Ahí comenzó todo.
En febrero de este año aseguró que abandonaría de manera definitiva la política ya que “le daba asco”; luego externó su deseo de ser Secretaria de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México. Pero otra vez sus planes cambiaron.
Una de sus acciones más criticadas fue cuando eliminó los rótulos y artes gráficos de puestos comerciales como torterías y taquerías para ser pintados de blanco con el logotipo de la demarcación, borrando la gráfica popular y el arte urbano que da identidad a los puestos de la Ciudad de México.
Su apuesta desde que asumió el cargo fue ordenar el ambulantaje y generar una “mejor imagen urbana” bajo el llamado Operativo Diamante.
La alcaldesa realiza operativos que buscan propiciar “el orden y la paz” en el espacio público; sin embargo, colectivos y grupos vulnerables acusan que son “actos de limpieza social” contra personas en situación de calle, artistas, comerciantes y migrantes.
Organizaciones relacionadas con la defensa de los derechos humanos han acusado que trabajadores de la alcaldía han retirado a comerciantes, trabajadoras sexuales, y personas en situación de calle de parques, plazas y banquetas con agresiones físicas y verbales, violando sus derechos humanos.
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Sandra Cuevas incluso prohibió los bailes en la alameda del Kiosco Morisco, punto de encuentro donde acuden a bailar danzón, salsa y cumbia, principalmente, adultos mayores. Incluso, uno de sus operativos para desalojar una protesta a favor de los sonideros terminó de forma violenta.
También intentó cerrar la Plaza Giordano Bruno en la colonia Juárez para que personas migrantes, la mayoría provenientes de Haití, no se instalaran.
Ha sido parte de diversas polémicas como declarar “a mí no me gustan los pobres”, arrojar pelotas con billetes de 500 pesos a un grupo de personas desde uno de los balcones del edificio central de la demarcación, hasta difundir un video donde se le ve disparando un arma durante una practica de tiro y asegurar: “Los abrazos no valen”.
Uno de los escándalos más fuertes que ha enfrentado fue su destitución como alcaldesa por el cierre del deportivo Guelatao. Sin embargo, apeló la sentencia ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación y logró que se diera marcha atrás a la destitución.
En enero de 2023 amenazó con “romperle la madre” a Claudia Sheinbaum después de que encontraran propaganda ilegal contra la exjefa de gobierno en las oficinas de la Cuauhtémoc.
En marzo de 2022, policías de la Ciudad de México la acusaron de abuso de autoridad, robo calificado, discriminación y ordenar privar de su libertad a dos mandos de la policía capitalina
Después de varias semanas y una audiencia, el juez Enrique García Garrido, de la Sala 011, de la Unidad de Gestión Judicial 8, en el Reclusorio Preventivo Norte, dictó fallo absolutorio a favor de Sandra Cuevas.
Sin embargo, la alcaldesa tuvo que pagar el costo de un radio transmisor y un celular, así como una reparación económica de 30 mil pesos a cada una de las víctimas.
Cuevas ofreció esa disculpa, aunque rechazó haber cometido una agresión o una falta de mayor consideración.
La alcaldesa de Cuauhtémoc dijo que aunque hay otros alcaldes que quieren ser candidatos del Frente Amplio por México a la Jefatura de Gobierno, lo que se necesita es alguien “quien conquiste el corazón de la clase media baja”.
“La Ciudad de México no se gana sino entras a Iztapalapa, a la GAM y a la Venustiano Carranza. Las clases populares nos necesitan. ¿Cuál ha sido el de Morena, de López Obrador? Que conquistaron el corazón de la clase popular, nosotros, el Frente debemos hacer lo mismo”, aseguró.
Además, dijo que entre los perfiles de Morena que buscan ser el candidato o candidata a la Jefatura de Gobierno de la CDMX “no hay competencia”, pero reconoció a Ricardo Monreal.
“No hay competencia con ninguno de los perfiles, el único con quien podría haber tiro es el doctor Ricardo Monreal pero en Morena lo subestiman”, señaló.