Diputados discuten reforma para trasladar la Guardia Nacional a Sedena; oposición señala riesgo de militarización
Diputados iniciaron este jueves la discusión de la reforma que traslada la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), en lo que se espera que sea una sesión maratónica.
La discusión en lo general se da luego de que el pasado 22 de agosto la anterior legislatura votara a favor de la iniciativa en comisiones.
La Comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados, dominada por integrantes de Morena y sus aliados, aprobó en lo general con 22 votos a favor, 18 en contra y ninguna abstención, por lo que fue enviada al pleno, en donde Morena y aliados actualmente tienen mayoría calificada, por lo que se prevé su aprobación.
Tanto la oposición como organizaciones de la sociedad civil advirtieron riesgos de militarización de la seguridad pública.
El coordinador de la bancada de Morena, Ricardo Monreal, previó una prolongada discusión con posicionamientos iniciales por los grupos parlamentarios, cuatro rondas de oradores a favor y en contra, así como el desahogo de un número de reservas que serán determinadas una ves que se vote en lo general.
¿Qué dice la reforma a la Guardia Nacional que se discute en la Cámara de Diputados?
La operación y formación, así como el mando de la Guardia Nacional están bajo encargo del Ejército desde su creación, en 2019, pero en un artículo transitorio se especificó que sería hasta 2024.
En septiembre de 2022, se avaló una reforma para modificar ese artículo transitorio y asegurar que la Guardia Nacional tuviera mando militar hasta 2028. Esa reforma incluye que personal militar participe en tareas de seguridad pública durante ese tiempo.
La reforma modifica 12 artículos de la Constitución entre los cambos se prevé la desaparición total de la ya de por sí extinta Policía Federal y prohíbe a sus integrantes formar parte del cuerpo de seguridad pública, aunque pueden ser parte de la administración.
Además, y aunque ya ocurre, permite de manera total que personal militar se integre de manera automática a la Guardia Nacional.
Y la persona titular de la GN, debe tener al menos el grado de general de División y será designado por el Presidente en turno a propuesta del titular del Ejército mexicano.
La reforma del presidente Andrés Manuel López Obrador busca que la GN tenga la facultad de investigación de delitos en el ámbito de su competencia. También los Ministerios Públicos e instituciones policiales de los tres órdenes de gobierno, incluida la Guardia Nacional, deberán coordinarse en un Sistema Nacional de Seguridad Pública.
El manejo del presupuesto, la capacitación y la disciplina, así como las órdenes de operación estarán a cargo de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Aunque se permite el ingreso de personal civil a la Guardia Nacional, los integrantes que sean militares solo pueden ser juzgados por los Tribunales de Justicia Militar, en caso de que cometan algún delito en el ejercicio de sus funciones de seguridad pública.
La reforma también preserva la capacidad del Congreso de la Unión para crear una Ley de Seguridad Interior que regule las funciones del Ejército en tiempos de paz.
