En su primer día de gobierno, la presidenta Claudia Sheinbaum se comprometió a comenzar con la creación de un Sistema Nacional de Cuidados (SNC), sin embargo, el presupuesto de cuidados del próximo año que la Secretaría de Hacienda envió a la Cámara de Diputados es de 25 mil 810 millones 400 mil pesos, lo que equivale a una disminución real de 1.9% respecto a 2024.
De acuerdo con especialistas, aunque el tema de los cuidados está presente en la agenda pública, el compromiso de la creación de un SNC sigue pendiente, ya que los programas que cuentan con este componente muestran reducciones en el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PPEF) de 2025, a excepción de las estancias y guarderías para beneficio de personas con seguridad social.
Alexandra Haas, directora de Oxfam México, explicó que para el próximo año se prevé un recorte al déficit público con más austeridad, lo que conlleva “un costo desde el punto de vista social y económico, y nos preocupa la disminución específica sobre el tema de cuidados“.
La especialista subrayó que en el PPEF “no se dispusieron recursos adicionales para la puesta en marcha de la Secretaría de las Mujeres (que coordinará el SNC cuando este sea formalmente creado), ni para el sistema, y aunque se incluye la Pensión Mujeres Bienestar, esta no redistribuye las labores de cuidado y no libera el tiempo de las personas cuidadoras”.
“Otras preocupaciones son que la presidenta mencionó como prioridad a las personas jornaleras y trabajadoras de la maquila para los temas de cuidados, pero en el proyecto no vemos que existan nuevos programas o partidas presupuestarias destinadas a la creación de centros de bienestar, lo que nos hace preguntarnos cómo será ese apoyo”, señaló.
Actualmente el gasto para cuidados representa apenas el 0.1% del PIB, aunque según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el trabajo no remunerado de cuidados equivale al 24.3% del PIB.
Alejandra Macías, del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), apuntó que para 2025 la mayor parte del presupuesto para programas con componente de cuidados será para guarderías y estancias infantiles del IMSS y el ISSSTE, es decir, “para quienes están en el mercado laboral formal y no para todas las personas”.
Debido a que no existe todavía un Sistema Nacional de Cuidados, para este análisis presupuestario, el CIEP consideró 12 programas que se encuentran bajo responsabilidad de las Secretarías de Gobernación, de Educación Pública, Salud, Bienestar, así como del IMSS e ISSSTE.
Estos programas están enfocados en grupos específicos: primera infancia (de 0 a 6 años), con 52.8% del presupuesto; niñez (0 a 12 años), con 28.2%; adolescencia (hasta 18 años), con 17.2%; personas con discapacidad (0.1%), mujeres e hijos (1.1%) y adultos mayores (0.7%).
Aunque el CIEP reconoció que entre 2013 y 2024 el gobierno federal hizo esfuerzos por fortalecer los servicios de cuidado, ha identificado que los ajustes y recortes en algunos programas “plantean desafíos para garantizar una cobertura y calidad adecuada”, principalmente para las personas sin seguridad social.
“Gran parte del presupuesto ya estaba establecido desde el año pasado, incluso los recortes eran de esperarse, porque tenemos que bajar el déficit fiscal, y hay temas que no han estado en la agenda ante la discusión de otras reformas”, explicó Macías.
Por ello, expresó que para el presupuesto del próximo año las autoridades “deben ser cuidadosas con las políticas que se apliquen, ante la tentación de siempre dar transferencias directas, porque eso no necesariamente implica cerrar brechas, e incluso, pueden profundizar la carga de cuidados por no estar diseñadas con perspectiva de género”.
Te puede interesar | Brugada anuncia sistema público de cuidados de CDMX; estos son los apoyos y programas sociales que contempla
“Con la Pensión para Mujeres Bienestar, por un lado está bien compensar la falta de participación en el mercado laboral, pero habrá que ver cuáles son las implicaciones de que la respuesta sea que reciban una transferencia”, apuntó.
Andrea Larios, investigadora de Fundar, comentó que el paquete económico que se prevé para 2025 “mantiene la misma tendencia del sexenio anterior, lo que quiere decir que hay una distribución inequitativa de recursos para el anexo 13, cuyos ejes son el combate a la violencia de género, erradicación de discriminación y medidas para promover la igualdad entre mujeres y hombres”.
“Vemos que hay una reducción del 4.3% en el programa de apoyo a refugios de víctimas, y que se eliminan acciones clave como la construcción y equipamiento de Centros de Justicia para Mujeres, mientras que se crea la pensión para mujeres y la beca Rita Cetina, sin que haya criterios claros ni objetivos para justificar por qué se decidió etiquetar tal o cual programa”, refirió.
Además, Larios destacó que la Secretaría de las Mujeres, dependencia que tendrá a su cargo el SNC, en caso de comenzar a operar en 2025, contará con menos recursos que el Instituto Nacional de las Mujeres y la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres, que de acuerdo con lo anunciado por la presidenta se fusionarán para dar paso a esta nueva institución.
Lee también | Sistema integral de cuidados: programas sociales que propone Sheinbaum no bastan para consolidarlo, advierten especialistas
Para la investigadora de Fundar, las consideraciones del PPEF 2025 para el tema de cuidados son una “incongruencia”, ya que “se puede decir mucho en el discurso, pero si en el presupuesto no hay recursos asignados ni una estrategia clara de política pública, eso se queda en meras intenciones”.
“Habrá que tener paciencia, porque este paquete económico en particular se está dando en un contexto donde se busca la consolidación fiscal, es decir, la reducción del déficit público y en esta ocasión se está haciendo a través de recortes al gasto”.
“Desde una perspectiva de derechos humanos, la reducción de los recursos incrementa el riesgo de que las personas no puedan acceder a diversos servicios, y hay un componente de género que afecta en mayor medida a las mujeres, que son quienes dependen en mayor medida de estos”, agregó Larios.
La directora de Oxfam México, Alexandra Haas, señaló que las autoridades tendrían que considerar “una bolsa de la cual pudieran salir recursos para la instrumentación de políticas de cuidados, pero el problema es que actualmente lo vemos para cosas muy específica, pero no para la totalidad de un sistema que tendría que estar”.
Sin embargo, apuntó que actualmente no se ha aprobado alguna ley que cree formalmente el SNC, lo que se usa como justificación para que no se destinen recursos específicos a los cuidados, lo que ha enfrascado a este proyecto en “una discusión que es como la del huevo y la gallina, porque no se ha aprobado su conformación por falta de presupuesto, y este no se etiqueta ante la inexistencia del sistema”.
Ante esto, indicó que “la posición desde Oxfam es que la disponibilidad de recursos solamente puede provenir de una reforma fiscal, porque en este momento no hay espacio fiscal, sigue habiendo déficit a pesar de los recortes y de seguir así vamos a continuar con la lógica de disminución presupuestaria”.