Los diputados de Morena y sus aliados aprobaron este jueves en comisiones la iniciativa de reforma de la Guardia Nacional, con el objetivo de que esta institución sea reconocida como parte de las Fuerzas Armadas, y que también sea administrada y operada por el Ejército mexicano.
La Comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados, dominada por integrantes de Morena y sus aliados, aprobó esta iniciativa de reforma en lo general con 22 votos a favor, 18 en contra y ninguna abstención.
Fueron más de tres horas las que se postergó la discusión de la reforma, en la que Morena defendió que el Ejército se haga cargo de la operación de la Guardia Nacional, mientras Movimiento Ciudadano, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Partido Acción Nacional (PAN) advirtieron sobre el riesgo de que la seguridad pública se militarice.
“Esta reforma es civilista, con disciplina militar, sí, pero civilista”, defendió Leonel Godoy, vicecoordinador de los diputados de Morena y exgobernador de Michoacán.
El líder morenista señaló el carácter civil de la reforma, a pesar de que esta iniciativa propone que la capacitación, administración y operación de la Guardia Nacional sea responsabilidad del Ejército.
Además, la reforma propone que la Guardia Nacional sea considerada oficialmente como parte de las Fuerzas Armadas, se forme con personal de origen militar y su tituflar tenga el grado de General de División del Ejército.
Gerardo Fernández Noroña, diputado federal del Partido del Trabajo, defendió la reforma al señalar la importancia que han adquirido los militares en materia de seguridad pública. “Hoy no habría un solo gobernador de oposición, o una sola gobernadora, que pidiera el retiro de las Fuerzas Armadas o de la Guardia Nacional”, señaló el legislador.
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La iniciativa de Guardia Nacional forma parte del llamado “Plan C”, el último paquete de reformas constitucionales del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien concluirá su sexenio el próximo mes de septiembre.
Con esta reforma, López Obrador busca transferir la Guardia Nacional al Ejército de manera definitiva, con el argumento de que esta institución no se corrompa como, señala, ocurrió con la Policía Federal, desaparecida en 2019.
Durante la reunión de la Comisión de Puntos Constitucionales, el PAN, PRI y Movimiento Ciudadano se unieron en su rechazo a la reforma de la Guardia Nacional.
Braulio López Ochoa, coordinador de los diputados federales de Movimiento Ciudadano, advirtió que la reforma de la Guardia Nacional es una “traición” a la iniciativa con la que esta institución se creó en 2019, donde quedaba establecido que tendría un carácter civil.
“Se opusieron a la militarización de Felipe Calderón, prometieron regresar a los militares a los cuarteles, prometieron pacificar a este país y nada de esto lo están cumpliendo”, cuestionó López Ochoa.
A estas críticas se sumó Rubén Moreira, coordinador de los diputados federales del PRI, quien lamentó que la Secretaría de Seguridad, próximamente a cargo de Omar García Harfuch, se quedará sin gente para trabajar debido a que la operación de la Guardia Nacional será transferida al Ejército.
“Ustedes me dicen que el señor Harfuch va a lograr la paz. No señores, no va a tener mando de policías y esa historia ya la sabemos, en otras administraciones se han generado instancias que no tienen operación y han fracasado”, expresó Moreira.
Luego de la aprobación de la reforma de la Guardia Nacional en la Comisión de Puntos Constitucionales, esta iniciativa será enviada al Pleno de la Cámara de Diputados para que, a partir de septiembre, pueda ser discutida y votada por los 500 legisladores.