El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador busca investigar al ex fiscal especial del caso Ayotzinapa, Omar Gómez Trejo, por su actuación mientras encabezó la Unidad Especial de Investigación y Litigación para el Caso Ayotzinapa (Ueilca) en la Fiscalía General de la República (FGR).
En su conferencia matutina de este 19 de octubre, el presidente López Obrador fue cuestionado sobre si se busca fincar responsabilidades a Gómez Trejo: “Sí, yo creo que sí porque apenas nos estamos dando cuenta de esta situación. No se avanzaba en la investigación, había todo el propósito de no avanzar y de distorsionar las cosas”, dijo.
La diligencia contra el ex fiscal especial Omar Gómez Trejo apenas son intenciones del gobierno pues el ex fiscal aún no está sujeto a ninguna investigación, según confirmó el presidente.
El presidente @lopezobrador_ no descarta investigar al exfiscal Omar Gómez Trejo por el caso #Ayotzinapa, afirma que "había un pacto de silencio no nada más de delincuentes también de autoridades que se trasladó al gobierno nuestro". pic.twitter.com/ZaYFDIEE55
— Animal Político (@Pajaropolitico) October 19, 2023
Las declaraciones del presidente contra Gómez Trejo subieron de tono cuando el ex fiscal ofreció una entrevista y declaró que “El gobierno dinamitó la investigación del caso Ayotzinapa”, al detallar cómo una decisión de Andrés Manuel hizo posible cancelar en 2022 las órdenes de aprehensión contra 16 militares y armar en 24 horas la carpeta contra Jesús Murillo Karam.
El presidente López Obrador hizo un recuento de lo ocurrido en el caso Ayotzinapa, relacionado con la renuncia de Omar Gómez Trejo, que sucedió en septiembre de 2022 tras acusaciones del mismo ex fiscal sobre que la FGR apresuró la investigación con la detención de Jesús Murillo Karam.
Dijo que el gobierno “está reconstruyendo todo” y que cuando Alejandro Encinas le presentó el informe de la Comisión Presidencial para la Verdad y acceso a la Justicia en el caso Ayotzinapa, en agosto de 2022, recibió una lista con los presuntos responsables de la desaparición de los 43 normalistas, encabezada por el ex procurador Murillo Karam.
“Me presenta una lista de los responsables que estaban libres y entonces le digo que hay que actuar y me reúno, porque es un asunto importantísimo, le pido al presidente de la Corte y al fiscal general que actuemos juntos porque es un asunto de Estado y que todos ayudemos porque había este pacto de silencio”.
López Obrador aseguró que el pacto de silencio alrededor del caso Ayotzinapa no sólo estaba entre los responsables, “también de las autoridades y lo peor es que ese pacto se trasladó al gobierno nuestro”.
En ese entonces, el presidente pidió la detención de Jesús Murillo Karam pero la Ueilca solicitó más tiempo para sustentar bien la investigación en su contra, sin embargo, el fiscal Alejandro Gertz Manera ordenó que se realizara la solicitud de López Obrador, ocasionando así la renuncia de Gómez Trejo y otros integrantes de su equipo.
“No querían que se detuviera al procurador y a otros. Pensaban que como estaban en la lista militares, no iba yo a dar instrucción pero no debe haber impunidad para nadie y no se debe confundir el cuestionable, reprobable actuar de uno, dos o diez miembros del ejército con la institución, ese fue el error del gobierno anterior”, agregó.
Apenas el pasado 12 de octubre, el presidente López Obrador confirmó que la investigación sobre la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa la dirige él, junto con todo su gabinete de seguridad, incluido el Ejército.
Esto, a pesar de las denuncias que han realizado los familiares de los estudiantes desaparecidos sobre uno de los informes que dio a conocer el Gabinete de seguridad, en donde se está criminalizando de nuevo a los estudiantes, pues afirman que estaban coludidos con el crimen organizado”.
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Las declaraciones contra Gómez Trejo también ocurren tras la renuncia de Alejandro Encinas, quien anunció que deja el gobierno federal para unirse al equipo de Claudia Sheinbaum.
Antes de irse, el ex subsecretario publicó documentos y extractos de comunicaciones que confirman que el Ejército mexicano tuvo conocimiento “en tiempo real” de la desaparición de los 43 normalistas en septiembre de 2014, así como de los delincuentes que estaban implicados y los grupos delictivos a los que pertenecían.
Incluso, el Ejército tuvo reportes de los posibles lugares a los que los pudieron haber llevado; esta información es parte de los 18 folios que la Comisión encontró en sus archivos con información elaborada por el Centro Regional de Fusión de Inteligencia (CRFI) de Iguala.