Los uniformes verdes con naranja del grupo de Rescate del Ejército sobresalían entre los demás mientras el buque Huasteco se preparaba para partir rumbo a Panamá, donde casi una centena de marinos, soldados y personal de la Comisión Nacional de Búsqueda llegará para localizar y traer al país los restos de Catarino Erasmo Garza Rodríguez, un general y periodista adversario de Porfirio Díaz, que desapareció en el siglo XIX.
A unos 70 kilómetros de donde salió el buque se encuentra el Sistema Lagunar de Alvarado, donde el Colectivo Solecito de Veracruz ha buscado y encontrado también restos humanos, pero a diferencia del gran despliegue que viaja en el barco, allí lo hacen con poco personal del Gobierno de Veracruz que les apoya.
“Es algo absurdo que vayan a buscar algo habiendo tantas familias esperando una respuesta y para nosotros no se da siquiera una atención de decirnos no los buscamos, pero ya los vamos a buscar”, indicó Lidia Lara, integrante del Colectivo Justicia y Dignidad.
En total son 20 elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional que forman parte de la unidad de Rescate y 60 de la Secretaría de Marina Armada de México; además de 11 integrantes de la Comisión de Búsqueda de la Secretaría de Gobernación y dos de la Secretaría de Relaciones Exteriores.
“Yo no creo que necesite ser una comitiva de ese tamaño, especialmente cuando necesitamos tanta gente para buscar a los que tenemos desaparecidos en el mismo país, eso creo que la prioridad debería ser la búsqueda en el mismo país”, sentenció Lucía de los Ángeles Díaz Genao del Colectivo Solecito.
Comentó que, en caso de querer realizar la búsqueda del general de la Revolución, se pudo enviar a una comitiva pequeña y no a la alta cantidad de personas que se mandaron para hacer esas labores.
Inicialmente, el trabajo lo haría la Comisión de Búsqueda con elementos del Ejército quienes viajarían en una avión de la Fuerza Aérea entre enero y marzo, pero el plan tuvo que ser cambiado porque el aeropuerto del lugar no tiene la capacidad de recibir el avión que pretendían enviar.
El personal estará en las labores de búsqueda hasta el 16 de abril, en la Isla de Boca de Toros, en Panamá. Fue el propio presidente Andrés Manuel López Obrador quien solicitó la búsqueda, la cual fue avalada por el Senado.
Por la cantidad de días que se van y la labor que harán, elementos en tierra platicaban y los consideraban “afortunados” pues irán “a conocer” Panamá.
De hecho, la solicitud enviada al Senado señalaba que 20 elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional serían enviados a efecto de que participen en apoyo al personal especialista de la Comisión Nacional de Búsqueda de la Secretaría de Gobernación en los trabajos de excavación arqueológica, mientras que 60 elementos de la Armada de México realizarán labores sociales y de interacción comunitaria; sin embargo no se precisan las actividades que se llevarán a cabo.
Durante la sesión, algunos senadores y senadoras de oposición criticaron el envío de las tropas a realizar esas labores pues consideraron que ante la gran cantidad de personas desaparecidas que existen en el país, no se deberían hacer ese tipo de actos y despliegues para buscar restos de una persona que tiene tanto tiempo desaparecida.
De acuerdo con el historiador Leónidas Arango Loboguerrero, Catalino Erasmo Garza Rodríguez fue un periodista, revolucionario y héroe popular mexicano que nació el 24 de noviembre de 1859 en Matamoros, Tamaulipas.
Los textos de Erasmo destacaron por ser antiporfiristas, además de ser miembro de logias masónicas. En 1881, Garza acusó al gobierno mexicano por corrupción, despotismo y traición a Porfirio Díaz de realizar maniobras para seguir en el poder.
Los restos de Catarino Erasmo Garza Rodriguez terminaron en una fosa común en Panamá, luego de que tuvo que huir de México.
El general luchó contra el ejército mexicano al grado de que se ofrecieron 30 mil dólares por su cabeza. Garza eventualmente se vio obligado a salir del país, lo que provocó que se uniera a radicales colombianos exiliados en Costa Rica.
Finalmente, Garza formó parte de los ataques a los Cuarteles de Bocas del Toro en Panamá en 1895, donde murió.
Fue hasta este periodo gubernamental cuando la embajadora en Chile, Laura Beatriz Moreno Rodríguez, fue asignada a realizar la búsqueda. Por lo que localizó los restos en una fosa común donde las y los integrantes del equipo que acudió a su búsqueda deberán excavar para localizarlos.
El presidente Andrés Manuel López Obrador público un libro dedicado a la vida de este personaje.
La búsqueda en esa fosa común se realiza en medio de un contexto donde en el país hay 23 mil 88 cuerpos o restos depositados en fosas comunes. Tan solo en Veracruz existen mil 246 registros de inhumaciones, de los que 692 se desconoce su identidad, según el Módulo de Fosas Comunes de la Comisión Nacional de Búsqueda de Personas (CNB).
Pero además, este movimiento del personal de la CNB y de las corporaciones militares, se realiza en medio de una crisis de desapariciones donde las cifras alcanzan las 114 mil 885 personas desaparecidas o no localizadas en todo el país, según el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas.
“Es algo absurdo que estén buscando en otro lugar, que estén buscando a una persona de muchísimos años. Es una burla, una burla que cómo van a ir a buscar a alguien que tiene tantísimos años y para esto sí hay intenciones, sí hay personal y para los nuestros no los hay, es una burla, es un enojo”, señaló Lara.