“No podemos abandonarlos, queremos saber qué pasó”: a 10 años de Ayotzinapa inicia jornada de lucha
Diez años de caminar y clamar justicia, diez años de gritar “Vivos se los llevaron, vivos los queremos”. Dos sexenios de impunidad. La esperanza no claudica, la lucha continúa. A ocho días de que se cumplan 10 años de la desaparición forzada de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural “Isidro Burgos de Ayotzinapa”, madres y padres de los jóvenes iniciaron la jornada de actividades denominada ¡Sin tregua ni cuartel! Por la presentación de los 43.
“Hemos caminado y aquí estamos, no nos retiramos ni nos retiraremos mientras no sepamos el paradero de nuestros hijos, los queremos, somos madres, somos padres y no podemos abandonarlos, queremos saber dónde están, qué pasó, y sobre todo queremos justicia”, dijo la señora Hilda Legideño, madre de Jorge Antonio Tizapa Legideño.
La jornada de lucha inició con una megamarcha estatal que partió de la Glorieta del Caballito al parador del Marqués en Chilpancingo, Guerrero. Participaron madres y padres de los 43 normalistas, estudiantes de escuelas rurales de distintos estados del país como Chiapas, Tlaxcala, Michoacán, Estado de México y San Luis Potosí, así como organizaciones no gubernamentales.
La convocatoria era a las 11:00 horas en la Glorieta del Caballito, en el centro de la ciudad de Chilpancingo. La marcha arrancó minutos después de las 12:00 horas. Antes, los autobuses que transportaban a los estudiantes de las escuelas normales llegaron. De manera ordenada los jóvenes descendían e iban formando filas.
“Hoy es el primer día de la jornada que va a tener una serie de actividades, las cuales van a culminar con una marcha nacional el día 26 de septiembre del Ángel de la Independencia al Zócalo de la Ciudad de México, después de eso estaríamos participando el 27 de septiembre en Iguala con el cierre de esta jornada”, informó el señor Melitón Ortega, uno de los padres de los 43.
La marcha fue encabezada por madres y padres de los estudiantes desaparecidos. Cada uno de ellos cargaba un pendón con el rostro de su hijo.
“La desaparición de nuestros hijos en el 2014 en el sexenio de Enrique Peña Nieto fue un ataque directo en contra de nuestros hijos donde participaron la policía municipal, estatal, federal y hay evidencias que participó el Ejército”, indicó la señora María de Jesús Tlatempa Bello, madre de José Eduardo Bartolo Tlatempa.
Hasta el momento se ha comprobado que el gobierno de Peña Nieto fabricó la supuesta “verdad histórica”, la cual quería imponer la idea de que los jóvenes fueron incinerados en el basurero de Cocula. Sin embargo, el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) indicó que eso no ocurrió.
Cuando Andrés Manuel López Obrador llegó a la presidencia prometió justicia a las madres y padres de los jóvenes de Ayotzinapa. Les dijo que llegaría a la verdad, y sobre todo, daría con el paradero de los estudiantes desaparecidos. Para los padres y las madres de los estudiantes, creó una falsa esperanza que ahora abrió más la herida. A partir del 2022 la investigación se estancó.
El dolor de esa decepción, padres y madres lo expresaron en cada paso durante los 6.5 kilómetros que duró el recorrido de la manifestación. La marcha atravesó Chilpancingo. A la mitad del camino, frente al antimonumento de los 43 hicieron un pase de lista. Gritaron cada uno de los nombres de los jóvenes seguido de la frase “presentación con vida”.
Al mismo tiempo, el grito ahogado de los estudiantes normalistas que acudieron a la marcha retumbaba en las calles de la capital de Guerrero. Si bien no había contingentes de personas locales, la gente observaba con respeto y con celular en mano para grabar a los contingentes.
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Una escena conmovió a los que marchaban. La manifestación pasó frente a una escuela primaria, mientras los pequeños gritaban consignas y levantaban el brazo. Ese apoyo se hizo visible.
Al llegar al parador del Marqués en Chilpancingo, donde fueron asesinados dos estudiantes de Ayotzinapa en 2011, padres y madres de los normalistas desaparecidos realizaron un mitin.
“Decir 10 años no es fácil. Una década de este movimiento que no tiene ningún interés ajeno más que la verdad, justicia, castigo a los responsables y sobre todo conocer el paradero de los 43 estudiantes”, dijo uno de los padres.
La marcha concluyó con saldo blanco. Los jóvenes se retiraron en sus autobuses, al igual que los padres y madres.
De las actividades a destacar el domingo 22 de septiembre se realizará un acto político cultural en la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, ubicada en el municipio de Tixtla. Para el 26 de septiembre está convocada la marcha nacional a 10 años de la desaparición de los 43 estudiantes.
