Más de 60 bombardeos israelíes golpearon sitios militares en pocas horas en toda Siria, casi una semana después de que una alianza rebelde liderada por islamistas derrocara al presidente Bashar al Asad, informó este sábado una organización.
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH), radicado en Reino Unido, registró 61 bombardeos en menos de cinco horas en Siria.
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Israel sigue intensificando sus ataques aéreos contra este territorio y apuntando en particular contra túneles bajo las montañas que contienen depósitos de misiles balísticos, añadió la ONG.
El OSDH, que cuenta con una extensa red de fuentes en el terreno, contabilizó 446 bombardeos israelíes desde la caída de Asad el 8 de diciembre.
El OSDH reportó otros bombardeos israelíes unas horas antes, que destruyeron “un instituto científico” y “otras posiciones militares en Barzeh, en el extremo noreste de Damasco”.
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El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, ordenó a su vez al ejército que “se prepare para permanecer” todo el invierno en la zona de contención entre Israel y Siria, en la meseta de los Altos del Golán, anexionada en su mayor parte por Israel.
Las tropas israelíes entraron en la zona de contención justo después de la caída de Al Asad. La ONU denunció una “violación” del acuerdo de retirada de 1974 entre Siria e Israel.
Tras la caída del régimen de Bashar al Assad el fin de semana, Israel ha estado llevado a cabo cientos de ataques aéreos en Siria y también ha trasladado tropas a la zona desmilitarizada de los Altos del Golán.
Tras la caída del régimen de Bashar al Assad el fin de semana, Israel ha estado llevado a cabo cientos de ataques aéreos en Siria y también ha trasladado tropas a la zona desmilitarizada de los Altos del Golán, ampliando así la extensión del territorio sirio que se encuentra bajo su control.
Este lunes el ejército israelí confirmó que atacó a la flota naval de Siria en los puertos de Al Bayda y Latakia, destruyendo numerosos barcos.
En una declaración, el Ministro de Defensa de Israel, Israel Katz, dijo que los ataques tenían como objetivo “destruir capacidades estratégicas que amenazan al Estado de Israel”.
Añadió que la operación para destruir la flota siria había sido un “gran éxito”.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) dijeron que habían atacado una amplia gama de objetivos -incluidos aeródromos, vehículos militares, armas antiaéreas y sitios de producción de armas- en la capital siria, Damasco, así como en Homs, Tartus y Palmira.
También apuntaron a almacenes de armas, depósitos de municiones y “docenas” de misiles mar-mar.
Israel afirma que está tomando estas medidas para garantizar la seguridad de sus ciudadanos, pero otros dicen que está aprovechando la oportunidad para debilitar a un adversario de larga data.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos (SOHR, por sus siglas en inglés), con sede en Reino Unido, afirma haber documentado más de 310 ataques de las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) desde la caída del régimen de Assad el domingo.
Los ataques apuntaron, según se informa, a instalaciones militares del ejército sirio desde Alepo en el norte hasta Damasco en el sur, e incluyeron depósitos de armas, depósitos de municiones, aeropuertos, bases navales y centros de investigación.
Rami Abdul Rahman, fundador del SOHR, dijo que los ataques han estado destruyendo “todas las capacidades del ejército sirio” y que “se están violando las tierras del país”.
Israel dice que sus acciones son para evitar que las armas caigan “en manos de extremistas” mientras Siria hace la transición hacia una era post-Assad.
Israel está preocupado por quién podría hacerse con el supuesto arsenal de armas químicas de Bashar al Assad.
No se sabe dónde ni cuántas de estas armas tiene Siria, pero se cree que el expresidente Assad las tenía almacenadas en algún lugar.
El lunes, el organismo de control de las armas químicas de la ONU advirtió a las autoridades sirias que se aseguraran de que todas las que tuvieran estuvieran a salvo.
Ake Sellstrom, ex inspector jefe de armas de las Naciones Unidas en Siria, ahora profesor asociado de histología en la Universidad de Umea en Suecia, dice que Israel ha estado atacando las capacidades de armas químicas de Siria con sus ataques aéreos.
“Lo que está haciendo Israel es quitarle activos”, dijo a la BBC. “Pueden ser personas, instalaciones o equipos”.
Se sabe que las fuerzas leales a Al Assad utilizaron gas sarín en un ataque a un suburbio de la capital siria, Damasco, en 2013, en el que se cree que murieron más de 1.000 personas.
También se les acusa de utilizar armas químicas en otros ataques más recientes.
El Dr. Sellstrom dice que las fuerzas rebeldes también pueden tener arsenales de armas químicas, ya que se sabe que las han utilizado antes contra sus enemigos en Siria.
“Assad tenía estas armas para marcar cierta fuerza en el conflicto con Israel, pero nunca las utilizó directamente. Ahora tenemos un gobierno totalmente diferente.
“Israel va a entrar para limpiar… todo lo que tenga en términos de armas químicas”.
El primer ministro israelí Benjamín Netanyahu anunció que sus tropas habían tomado el control de la zona desmilitarizada de los Altos del Golán, ampliando así la extensión del territorio sirio que ocupa en esta región.
Netanyahu dijo que se trataba de una “posición defensiva temporal hasta que se encuentre un acuerdo adecuado”.
“Israel ha dicho que quiere impedir que se produzca cualquier ataque como el del 7 de octubre por parte de Hamás desde el lado sirio”, afirma el profesor Gilbert Achcar de la Universidad SOAS de Londres.
“Pero esta es una oportunidad para avanzar y detener el acercamiento de otras fuerzas a la frontera de la zona ocupada”.
La toma de la zona desmilitarizada por parte de Israel ha sido rotundamente condenada en declaraciones de los países árabes, y el Ministerio de Asuntos Exteriores egipcio la ha descrito el lunes como “una ocupación del territorio sirio y una flagrante violación del Acuerdo de Separación de 1974”.
Informes llegados de Siria afirman que los avances israelíes habían ido más allá de la zona de separación e incluso habían llegado a 25 km de Damasco, pero fuentes militares israelíes negaron esas acusaciones.
Por primera vez, las FDI reconocieron, que sus tropas están operando más allá de la zona de amortiguación desmilitarizada en los Altos del Golán, pero el portavoz Nadav Shoshani dijo que la incursión israelí no había ido significativamente más allá.
Los Altos del Golán son una meseta rocosa situada en el suroeste de Siria, ocupada por Israel desde hace más de medio siglo.
En la guerra de 1967, Siria bombardeó a Israel esa zona, pero Israel hizo retroceder rápidamente a las fuerzas sirias y se apoderó de unos 1.200 kilómetros cuadrados de la zona, que ha puesto bajo control militar.
Siria intentó recuperar los Altos del Golán durante la guerra del Yom Kippur de 1973, pero fracasó.
Ambos países firmaron un armisticio en 1974, y desde entonces, hay una fuerza de observadores de la ONU en la línea de alto el fuego.
Sin embargo, Israel se anexionó la zona en 1981, en una medida que no ha sido reconocida por la gran mayoría de la comunidad internacional.
Siria ha dicho que no firmará ningún acuerdo de paz con Israel a menos que se retire de todo el Golán.
La mayoría de los habitantes árabes sirios de los Altos del Golán huyeron de la zona durante la guerra de 1967. En la actualidad existen más de 30 asentamientos israelíes en la zona del Golán, en los que viven aproximadamente 20.000 personas. Los israelíes comenzaron a construirlos casi inmediatamente después del final del conflicto de 1967.
Los asentamientos se consideran ilegales según el derecho internacional, aunque Israel rechaza la acusación.
Los colonos viven junto a unos 20.000 sirios, la mayoría de ellos de la secta drusa, que no huyeron cuando se tomó el Golán.
Netanyahu ha dicho que la ocupación de la zona de amortiguación de los Altos del Golán por parte de las Fuerzas de Defensa de Israel tiene la intención de ser temporal, pero que la retirada dependerá del comportamiento del próximo gobierno de Siria.
“Si podemos establecer relaciones de vecindad y relaciones pacíficas con las nuevas fuerzas que surgen en Siria, ese es nuestro deseo”, dijo. “Pero si no lo hacemos, haremos lo que sea necesario para defender el Estado de Israel y la frontera de Israel”.
“Lo que pasa por la mente de los israelíes es que puede haber incursiones en el Golán por parte de fuerzas dentro de Siria y para asegurarse de que no haya posibilidad de eso, se ha adentrado más en el interior”, dice HA Hellyer, del Royal United Services Institute, un grupo de expertos con sede en Londres.
“Sin embargo, Israel ya ha ocupado territorio en los Altos del Golán como medida de seguridad y lo fortificó después. Puede que lo vuelva a hacer”.
El Ministro de Asuntos Exteriores israelí, Gideon Saar, ha dicho que los ataques aéreos sobre bases militares sirias se han realizado únicamente para defender a sus ciudadanos.
“Por eso atacamos los sistemas de armas estratégicas, como por ejemplo las armas químicas que quedan o los misiles y cohetes de largo alcance, para que no caigan en manos de los extremistas”, explica.
Sin embargo, el profesor Achcar afirma que “las armas químicas no están muy extendidas en Siria, y sólo están en dos o tres lugares. Pero con más de 300 ataques aéreos se intenta debilitar mucho más al país”.
Israel considera a Bashar al-Assad “el diablo que conocen”, afirma, pero no está seguro de lo que ocurrirá a continuación.
“Creen que Siria se dividirá en facciones en guerra, como ocurrió en Libia, y temen que surja una facción hostil a Israel.
“Quieren impedir que una facción como esa utilice las armas del ejército sirio contra ellos”.
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