Tras la culminación del Carnaval Internacional de Mazatlán 2025 “La Perla”, disminuyó el despliegue de elementos de las fuerzas federales en el paseo costero de este puerto, de hecho, este jueves ya no se vio al personal de la Marina, nada más de la Guardia Nacional, pero en menor cantidad.
De acuerdo con el subsecretario de Seguridad Pública, Humberto Zerón Martínez, indicó que se iban a reasignar a partir del 5 de marzo “dependiendo de los requerimientos” que se tengan en otras partes del estado.
“Los 3 mil efectivos de las instituciones de seguridad ya estaban en el Estado, ahorita lo que hacemos es nuevamente reorientar el despliegue donde vayan surgiendo las necesidades, pero es el mismo efectivo que ya se encontraba en el Estado y sólo estamos haciendo eso, reorientarlo en donde se necesita y eso es algo dinámico”, dijo en la conferencia de prensa.
Precisó que esta reorientación se va hizo a partir de que concluyó el Carnaval en Mazatlán, el cual se realizó del 27 de febrero al 4 de marzo.
Destacó que hubo saldo blanco en estas fiestas.
“A partir de hoy (se hace la reorientación a donde se requiera), pero tenga la certeza de que hay el efectivo suficiente para atender las necesidades de Mazatlán”, indicó el funcionario.
Este jueves, no se vio despliegue de personal a pie de ninguna corporación, pero ya después de las 10:00 horas se observó a personal de la Guardia Nacional provisto con armas largas y cortas patrullando a pie en el Paseo Olas Altas y la Avenida del Mar, pero ya en menor cantidad que Durante el Carnaval y semanas previas.
Lo que no se vio ya este día fue el patrullaje del personal de la Marina en el paseo costero, pero sí se les ha visto en calles y avenidas al igual que a los de la Guardia Nacional, Ejército y Policía Municipal.
Los refuerzos de seguridad de este año fueron el doble que en carnavales de años anteriores cuando no se tenían problemas de seguridad como actualmente en la entidad y de los que Mazatlán y el sur de Sinaloa no han estado exentos.
Por su parte, la alcaldesa de Mazatlán, Estrella Palacios Domínguez, señaló que después del Carnaval se van a seguir implementando operativos con este mismo modelo de coordinación para Semana Santa y la Semana de la Moto.
“Es exclusivamente a todos los eventos que se vayan requiriendo se van a seguir reforzando la seguridad. (…) En lo que comentaban ya del éxito que se ha tenido respecto al Operativo de Seguridad del Carnaval pues es gracias a esta gran coordinación que se tiene de las Fuerzas de Reacción Interinstitucional y así vamos a continuar”, dijo la Palacios Domínguez
En tanto, el comandante de la Cuarta Región Naval, José Daniel Reséndiz Sandoval, expresó que la estrategia que se implementó en el Operativo de Seguridad del Carnaval dio resultados y la estrategia consistió en el trabajo interinstitucional de todas las fuerzas armadas tanto a nivel federal como estatal y municipal con todos los puestos de revisión, con todos los recorridos antes, durante y después de los eventos que se realizaron.
Te podría interesar: Desaparecen tres jóvenes en Mazatlán, Sinaloa; familiares convocan a marcha para exigir a las autoridades dar con su paradero
“Marina continuará vigilando Mazatlán para con ello, aumentar la percepción de seguridad en todo este municipio”, recalcó Reséndiz Sandoval.
Mientras que el coordinador del Operativo de Seguridad del Carnaval de Mazatlán, Conrado Bruno Pérez, dijo que con el compromiso de respaldar y mantener la paz y la seguridad de los mazatlecos y turistas tanto nacionales como extranjeros que visitaron durante la celebración de estas fiestas y en estrecha coordinación con los tres órdenes de gobierno y las instituciones organizadoras del evento fue designado para liderar un contingente interinstitucional que involucró a más de 3 mil personas.
De ese despliegue fueron mil 350 del Ejército Mexicano, 550 de la Guardia Nacional, 514 de Marina, 140 de la Policía Estatal Preventiva, 530 de la Policía Municipal, 155 de la Coordinación Municipal de Protección Civil para hacer un total de 3 mil 239 personas.
“Este esfuerzo tuvo como eje central la proximidad social promoviendo la interacción positiva entre las autoridades resaltando la participación de nuestro activo más valioso que son las mujeres y los hombres logrando una sana convivencia con las familias mazatlecas y con todos los visitantes que recibimos”, señaló Pérez.
Un museo en la capital iraní, Teherán, alberga una de las colecciones de arte moderno más sorprendentes y poco conocidas del mundo.
Algunas de las obras de arte más emblemáticas de Pablo Picasso, Francis Bacon y Jackson Pollock no están colgadas en las paredes de los museos más famosos del mundo, sino escondidas en la capital de Irán.
Teherán es una ciudad con una de las colecciones de arte moderno más asombrosas del mundo, que pocas personas fuera de Irán conocen.
Durante décadas, estas obras maestras han estado escondidas en el sótano del Museo de Arte Contemporáneo de Teherán (MACT), envueltas en misterio y ocultas al público.
A pesar de su extensa colección, solo una pequeña parte de las obras de arte se ha exhibido desde la Revolución iraní de 1979.
La agitación política, los valores culturales cambiantes y una serie de giros históricos han mantenido estas obras de arte almacenadas, fuera del alcance tanto de los iraníes como de la comunidad artística mundial.
El MACT exhibe ahora algunas de sus piezas más cautivadoras, ofreciendo una visión de una colección que ha permanecido en gran medida en el enigma.
El Museo de Arte Contemporáneo de Teherán es una importante institución cultural en Irán, que alberga algunas de las colecciones de arte moderno más valiosas fuera de Europa y América del Norte.
El museo fue construido en 1977 bajo el patrocinio de la ex reina y última emperatriz de Irán, Farah Pahlavi, la viuda exiliada del último sha de Irán, Mohammad Reza Pahlavi, que fue derrocado durante la Revolución Islámica de 1979.
Farah Pahlavi era una apasionada defensora del arte y su primo Kamran Diba, un arquitecto iraní, diseñó el museo.
El MACT se creó para presentar el arte moderno a los iraníes y para conectar a Irán con la escena artística internacional.
Pronto se convirtió en el hogar de una impresionante variedad de obras de luminarias como Pablo Picasso, Salvador Dalí y Andy Warhol, junto con piezas de los principales modernistas iraníes, y rápidamente se estableció como un modelo de intercambio cultural y ambición artística.
Pero luego llegó la Revolución Islámica y las cosas dieron un giro dramático. Muchas obras de arte se consideraron inapropiadas para la exhibición pública, debido a la desnudez, las sensibilidades religiosas o las implicaciones políticas.
¿”Gabrielle con la blusa abierta”, de Pierre-Auguste Renoir? Demasiado escandaloso. ¿El retrato de Warhol de la exreina de Irán? Demasiado político.
De hecho, el retrato de Farah Pahlavi fue vandalizado y destrozado con un cuchillo durante el tumulto revolucionario.
Después de la revolución, muchas de las obras de arte fueron guardadas bajo llave, acumulando polvo en un sótano que se convirtió en material de leyenda del mundo del arte.
Hamid Keshmirshekan, historiador del arte de la Escuela de Estudios Orientales y Africanos (SOAS) en Londres, que ha estudiado la colección, la llama “uno de los tesoros más raros del arte moderno fuera de Occidente”.
La colección sigue siendo una cápsula del tiempo de movimientos artísticos fundamentales, desde el expresionismo abstracto hasta el arte pop.
El Museo de Arte Contemporáneo de Teherán comenzó a recuperar su importancia cultural a fines de la década de 1990 durante la presidencia reformista de Mohamed Jatamí.
Pronto el mundo recordó lo que se había estado perdiendo. Los amantes del arte no podían creer lo que veían. Van Gogh, Dalí, incluso Monet, todos en Teherán.
Algunas obras fueron prestadas para importantes exposiciones en Europa y Estados Unidos, lo que permitió que la colección volviera a conectarse brevemente con el mundo del arte global.
Pero aún quedan desafíos por resolver.
El MACT opera con un presupuesto ajustado y las prioridades políticas cambiantes implican que a menudo funciona más como un centro cultural que como un museo tradicional.
Sin embargo, sigue siendo una institución notable, un guardián improbable de obras maestras del arte moderno en el corazón de Teherán.
Su colección sigue siendo un testimonio tanto de las ambiciones artísticas de una era pasada como del poder perdurable de la creatividad frente a los giros y vueltas de la historia.
Estas son algunas de las mejores obras que solo se pueden ver en Teherán.
Este cuadro, el lienzo más grande de Picasso, de 1927, es un claro ejemplo de sus obras abstractas del período poscubista.
Utilizando una paleta de colores limitada y líneas fragmentadas, ofrece una perspectiva simbólica sobre la humanidad.
“A las puertas de la eternidad” es una de las pocas obras que se conservan de la primera serie de grabados de Van Gogh, durante la cual produjo seis litografías en noviembre de 1882.
Esta pieza muestra figuras en dos paneles laterales que parecen espiar a dos hombres desnudos que yacen en una cama en el panel central.
Es una obra significativa dentro del movimiento expresionista. Un retrato del ayatolá Ruhollah Jomeiní, el fundador de la República Islámica de Irán, está colocado en yuxtaposición frente a la obra de Bacon.
Esta escultura icónica captura la armonía entre la humanidad y la naturaleza. Con su forma abstracta y contemplativa, es una obra maestra de uno de los escultores más famosos de Reino Unido.
Ejemplo vibrante de la técnica de pintura de acción de Jackson Pollock, esta pieza rebosa energía y emoción.
El retrato de Farah Pahlavi, la última reina de Irán, es una pieza poco común que combina el estilo pop art de Warhol con la historia cultural iraní.
Esta escultura forma parte de la famosa serie de Giacometti “Hombre que camina”, considerada una de sus obras más emblemáticas.
Con su figura alargada y delicada, simboliza la soledad, la fragilidad y la lucha incesante de la humanidad por seguir adelante.
La obra de Dubuffet, provocativa y texturizada, desafía las nociones tradicionales del arte y la estética. Figura destacada del movimiento art brut, su obra es a la vez cruda y conceptualmente profunda.
“El terapeuta”, escultura de bronce realizada en 1967, es una de las ocho imágenes pictóricas que el pintor surrealista René Magritte convirtió en tridimensionales.
La obra fotorrealista “Keith/Grabado a media tinta”, de Chuck Close, invita al espectador a un mundo de detalles extraordinarios. Su innovadora técnica de cuadrícula convierte este retrato en una combinación magistral entre abstracción y realismo.
Haz clic aquí para leer más historias de BBC News Mundo.
Suscríbete aquí a nuestro nuevo newsletter para recibir cada viernes una selección de nuestro mejor contenido de la semana.
Y recuerda que puedes recibir notificaciones en nuestra app. Descarga la última versión y actívalas.