Personas que buscan a sus familiares entre los cuerpos del crematorio Plenitud colocan árbol de navidad para exigir justicia
Miguel Villanueva enreda una serpentina verde alrededor de una estructura de alambre. Con paciencia, la dobla una y otra vez hasta cubrir el armazón metálico instalado frente a la Fiscalía de Chihuahua en la Zona Norte, en Ciudad Juárez. Sobre el marco aún cuelgan calaveras de papel picado color rosa, morado, amarillo y verde, los restos del altar que colocaron en noviembre.
La agrupación Memoria, Dignidad y Justicia para los 386, integrada por familias que buscan a sus seres queridos entre los cuerpos hallados en el Crematorio Plenitud, emprende una nueva tarea para recordarle a las autoridades que no han cumplido. Instalan un pino navideño que simboliza el dolor y la incertidumbre que enfrentan ante la falta de identificación de los cuerpos, justo cuando se acercan las festividades decembrinas.
Las familias cuelgan esferas de cartón en las que han pegado las fotografías de sus muertos. También colocan consignas para exigir que el caso se resuelva con prontitud y para reclamar dignidad y memoria para sus seres queridos. Señalan que esta Navidad, lejos de ser un tiempo de celebración, estará marcada por la duda y el trauma que dejó el hallazgo de cuerpos apilados en el crematorio Plenitud a finales de junio.
Miguel busca los restos de su hija y de su madre, fallecidas en 2020 y 2021, respectivamente. Los servicios funerarios fueron contratados a la funeraria Luz Divina, y las autorizaciones de incineración confirman que ambas fueron enviadas al Crematorio Plenitud.
Relata que este proceso lo ha obligado a revivir la depresión y la ansiedad severa que enfrentó tras la muerte de sus familiares, una experiencia desgastante que incluso le dificulta concentrarse en el trabajo. Hoy desconoce la naturaleza de las cenizas que le entregó la funeraria. Dice que las de su hija son demasiadas y las de su madre muy pesadas. “Tengo gatos en mi casa como mascotas, y la arena para el gato y las cenizas son idénticas”, describe.
Hasta ahora, señala, la respuesta de las autoridades estatales y federales ha sido insuficiente, pues no han brindado información que les dé certeza sobre el destino de sus familiares. Aunque han solicitado una audiencia con la gobernadora María Eugenia Campos, lamenta que esta se ha negado a recibirlos y ha instruido que personal de la Fiscalía los atienda: “la hemos buscado y prefiere cancelar sus actividades (en Ciudad Juárez) o manda a sus secretarios particulares; no queremos hablar con secretarios, queremos hablar con ella directamente”.
Miguel cuestiona que, hasta el momento, las únicas personas vinculadas a proceso por los 386 —un empleado que falleció a finales de octubre y uno de los propietarios— provengan del Crematorio Plenitud, cuando las familias contrataron los servicios con funerarias que, en su mayoría, continúan operando con normalidad.
“¿Por qué sigue laborando Luz Divina? Me dicen que a lo mejor una querella puede ser al crematorio, pero yo no hice el contrato con el crematorio, lo hice con la funeraria, ¿por qué no se les investiga realmente a ellos? (…) A mí fue Luz Divina quien me entregó cenizas que no son”, reclama.
A pesar de la angustia y la indignación, las familias han encontrado en la agrupación un espacio para compartir su dolor, convivir y organizarse para exigir justicia. Miguel lo ha visto de primera mano.
“Me ha tocado escuchar a las personas que se ponen a llorar o se sienten muy deprimidas o desesperadas porque no ven avances respecto al caso. Entonces, sí nos ha unido un poco más la convivencia y la vez pasada, que fue la puesta del altar, ahí realmente empezamos a conocernos un poco más, empezamos a contemplar todo el alcance que ha habido con respecto al crematorio”.
Este sábado, antes de instalar el pino navideño, las familias sostuvieron una reunión con el fiscal de la Zona Norte, Carlos Manuel Salas, en la que acordaron dar seguimiento puntual a los casos de las familias integradas en la agrupación Memoria, Dignidad y Justicia.
Van 150 cuerpos identificados; esperan análisis de Inmegen
Este lunes, la Fiscalía General del Estado informó en comunicado que hasta ahora se han identificado 150 cuerpos, de los cuales 139 ya fueron entregados a sus familias. Esto representa un avance del 39 por ciento respecto a los 386 cuerpos recuperados.
Indicó que se enviaron 110 muestras de los cuerpos recuperados en Plenitud al Instituto Nacional de Medicina Genómica (Inmegen), a través de una colaboración solicitada a la Comisión Nacional de Búsqueda, para obtener perfiles genéticos.
Agregó que actualmente se cuenta con 300 perfiles genéticos de familiares, ya procesados, y que, una vez que el Instituto entregue los resultados, se realizarán los cotejos correspondientes.
“Estamos también en coordinación con autoridades federales, porque los grupos que se han venido manifestando en torno a esto exigían una participación del Gobierno Federal, a la cual nosotros no solo estamos dispuestos, sino que consideramos importante. Cualquier ayuda que se proporcione va a redundar en una identificación más pronta de los cuerpos”, indicó este lunes el fiscal general de Chihuahua, César Jáuregui Moreno.
“Estamos colaborando con ellos (la Comisión Nacional de Búsqueda y la Fiscalía General de la República), estamos enviando datos y ellos nos regresan información, tratando de hacer una identificación todavía más rápida. Y lo he dicho siempre: ese asunto, a veces lento, pero va a ser permanente la identificación de cuerpos y la entrega a familiares”, agregó.
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En su comunicado, la Fiscalía aseguró que continúan las investigaciones para integrar las carpetas correspondientes a las 98 denuncias recibidas hasta ahora por fraude y que se da seguimiento puntual a las causas penales contra las personas detenidas.
El caso ha destapado irregularidades en otras funerarias, como la funeraria Del Carmen, cuyos propietarios enfrentan procesos por la presunta localización de cuatro cuerpos en predios de la empresa.
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Nueva evidencia
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Curiosamente, se han cruzado gatos leopardo con gatos domésticos para dar lugar a gatos bengalíes, que fueron reconocidos como una nueva raza en la década de 1980.
La investigación se publicó en la revista Science y en Cell Genomics .
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