Vidulfo Rosales, abogado de los familiares de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, desaparecidos en septiembre de 2014, dijo que aún falta una prueba “indubitable” de que los estudiantes estén muertos.
En una charla en el programa Bitácora Sindical, Rosales dijo que aunque los padres reconocen los avances del informe, sobre todo el reconocimiento de que es un crimen de Estado, aún no hay certeza del paradero de los estudiantes.
“Los padres de familia de los 43 merecen, como víctimas de una desaparición forzada, certeza científica, merecen pruebas indubitables de que sus hijos ya no están con vida”, dijo el abogado.
“Se necesita una prueba científica y técnica para corroborar lo que dice el informe, que los estudiantes están sin vida, y lo que dice este informe todavía no alcanza este nivel, hay elementos, pero estos tienen que ser corroborados”, explicó.
El abogado reconoció que este informe es diferente a los que habían entregado en el sexenio anterior y quedó evidenciado la participación de todo un aparato de Estado, incluso de la milicia, que actuó contra los estudiantes.
“Es un informe que está interpelando a las autoridades y ha sacudido la investigación, y eso puede ser un punto de inflexión que puede implicar un dinamismo diferente a la investigación”.
Rosales aseguró que los padres seguirán con las movilizaciones hasta tener la certeza de donde están sus hijos, incluso aunque sean solo sus restos para poder cerrar el ciclo.
Este 26 de septiembre se cumplen 8 años de la desaparición forzada de los jóvenes, por lo que se llevará a cabo una marcha del Ángel de la Independencia al Hemiciclo a Juárez. La movilización comenzará a las 16:00 horas.