Ante la cuadruplicación de casos de viruela símica en el último mes, cuando pasaron de 91 a 386, es fundamental la gestión de vacunas, así como la descentralización de los servicios de diagnóstico y la prevención, consideran organizaciones pertenecientes al Consejo Ciudadano para VIH e ITS de la Ciudad de México.
Hasta ahora, el diagnóstico recae principalmente en la Clínica Condesa y el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (InDRE), por lo que la notificación de resultados y la certeza en cuanto al diagnóstico puede tardar días, lo que dificulta que las personas tomen medidas de manera pronta para evitar su transmisión.
A casi tres meses de que el primer caso fuera notificado en la CDMX el 27 de mayo, el predominio de la enfermedad ha permanecido en hombres en un 97%; entre ellos, el grupo de 30 a 39 años es el más afectado, pues representa un 47.2%. Entre ellos, se han identificado 182 de los 386 casos confirmados hasta el 22 de agosto. El mayor crecimiento de la curva epidemiológica se ha registrado en los meses de julio y agosto, con la cuadruplicación de casos en el último mes.
Mientras que la CDMX y Jalisco concentran los casos, seguidos por el Estado de México (21), Yucatán (20) y Quintana Roo (12), en el país aún no hay noticias de gestión para la adquisición de vacunas, como ya sucede en otros países de América Latina. Ante ello, el 23 de agosto, organizaciones, colectivos y activistas dirigieron una solicitud urgente e inmediata de intervención para la adquisición de vacunas al secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard.
“En México, las estadísticas oficiales reportaban hasta el 23 de julio, 55 casos en nueve entidades federativas, para el 9 de agosto 147 confirmados y 107 en estudio en dieciocho entidades; el último informe disponible reflejó que hasta el 15 de agosto los casos ascendían a 252 confirmados y 131 en estudio en veinte estados de la República. Cifras que consideramos pueden estar sujetas a subregistros por la falta de información, atención y notificación oportuna”, dice el documento.
En este también acusan que mientras otros países ya están adquiriendo vacunas, y Estados Unidos ha decretado el tema como una emergencia pública nacional, en México “no se han emprendido pasos concretos ante este escenario”. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la eficacia de la vacunación en la prevención de la viruela símica es de alrededor de 85%.
Antonio Matus, de la organización AHF, explica que ante la tardanza en el diagnóstico y, en consecuencia, el posible subregistro, algunas de las organizaciones que conforman el Consejo Ciudadano para VIH e ITS de la CDMX —principalmente VIHve Libre, Yaaj México y Colectivo S3D— promueven un registro ciudadano de casos que constantemente se depura para evitar repeticiones y registros no fidedignos, y en breve se hará un corte para informar los primeros resultados, una vez que haya transcurrido un plazo considerable para que tengan relevancia estadística.
De acuerdo con las organizaciones, colectivos y activistas, las acciones prioritarias son la declaración de emergencia sanitaria por parte del gobierno de México e iniciar de manera inmediata los procesos para adquirir vacunas.
Sin embargo, también consideran fundamentales las acciones de prevención y promoción de la salud, así como detección temprana y tratamiento, con énfasis en las poblaciones de hombres gays, bisexuales, hombres que tienen sexo con hombres y personas con VIH, debido a que la mayor parte de casos en México y en el mundo se ha presentado en estos grupos.
Matus subraya que una de las principales preocupaciones de la sociedad civil es la necesidad de contrarrestar la saturación, o descentralizar el diagnóstico, que hasta ahora recae exclusivamente en el InDRE.
“Es una excelente institución, sabemos que tiene muchas capacidades; sin embargo, ya por el desgaste natural de tantos casos, más el trabajo cotidiano, es una situación que ha generado retrasos y, poco a poco, la entrega de los resultados con las tomas de muestras se ha ido tardando, primero 24 horas, después 48, y ahora en algunos casos han pasado incluso días”, afirma.
La directora ejecutiva de Inspira, AC, Hilda Peñaloza, también hace énfasis en la necesidad de que los diagnósticos se agilicen: la organización tiene registro de que están tardando hasta cinco días, cuando deberían obtenerse en un máximo de 48 horas. Esto, señala, representa tiempo en el que se podría agilizar la respuesta para ayudar a evitar la trasmisión a más personas y que ocurran contagios mientras se espera el diagnóstico.
De acuerdo con las organizaciones y el activista Ricardo Baruch, esto es particularmente preocupante en el resto de los estados de la República, pues en la CDMX, subrayan, es destacable el trabajo que la Clínica Condesa está haciendo para la detección y la atención.
En algunas entidades, detalla Baruch, las organizaciones están muy involucradas en el trabajo de información y prevención, como SETAC en Puerto Vallarta, La Red en Yucatán y Diversidad en Sonora: “Pero, por ejemplo, aquellas ciudades donde no hay organizaciones que puedan hacer este trabajo, o que haya algún voluntario que ponga su dinero para imprimir, para diseñar, (el Estado) ahí se está quedando corto porque las organizaciones tipo VIHve Libre, Inspira y las que están en Ciudad de México tampoco tienen presupuesto para andar en otras ciudades y estados, y eso debería ser obligación en realidad del Estado”.
“Seguimos visitando lugares de encuentro a dejar información acerca de la viruela símica, y también datos para que se hagan sus pruebas de VIH, sífilis y hepatitis C. Gracias que nos recibieron en cabinas Intenzzo, Hotel Pensilvania, el Chikro, Erotika de Amberes, La Casita… Aquí purx voluntarix intrépidx y chingxn. Si tienen síntomas de viruela símica cubran las lesiones, doble cubrebocas y vayan a tomarse muestra de la lesión”, informó hace un par de días Alaín Pinzón, de VIHve Libre, en su cuenta de Twitter.
Amix seguimos visitando lugares de encuentro a dejar información acerca de la viruela símica y también datos para que se hagan sus pruebas de VIH, Sífilis y Hepatitis C. Gracias que nos recibieron en Cabinas Intenzzo, Hotel Pensilvania, El Chikro, Erotika de Amberes, La casita y pic.twitter.com/CLYSGIJGA2
— Alaín Pinzón (@Alainwho) August 23, 2022
Así es como las organizaciones se han hecho cargo de la información y la prevención en lugares y con poblaciones donde es necesario reforzarlas. Además, acusan que no ha existido un acercamiento efectivo por parte del gobierno de México, más allá de una reunión que convocó Censida con organizaciones, detallaron Matus y Baruch, que en realidad solo fue para darles información, pero no para elaborar un plan de acción en conjunto.
Sobre la atención a los casos ya diagnosticados, Baruch la califica de deficiente, pues además del trabajo de la Clínica Condesa, en otros estados las personas no saben ni siquiera a dónde ir, o ante el rechazo en algunos lugares, prefieren quedarse en su casa. En el caso de los servicios federales, los envían a hospitales de otra ciudad, por lo que no facilitan realmente que la persona, por un lado, tenga un diagnóstico certero, y por otro, sepa qué hacer para cuidarse y cuidar a los demás, así como permanecer en aislamiento, que es lo más recomendado.
Hilda Peñaloza, de Inspira, subrayó la importancia de que las autoridades refuercen el trabajo de prevención comunicando a la población en general qué es la viruela símica, los posibles síntomas y a dónde acudir a hacerse la prueba para confirmar que se trata de esa infección, además de las medidas preventivas para evitar la transmisión a otras personas.
A diferencia de COVID-19, remarcó, la mayoría de lugares piden lesiones visibles para realizar el diagnóstico, por lo que buena parte de las personas está imposibilitada para acudir a servicios de diagnóstico únicamente para descartar, en caso de haber tenido algún contacto de riesgo.
“Mientras no se tomen medidas más serias, de poco va a servir mandar mensajes aislados por parte de las autoridades y más bien nosotros, que estamos más cercanos a la comunidad, seguiremos siendo quienes a final de cuentas tenemos que hacer la chamba porque no la está haciendo quien tiene esa obligación”, concluyó Baruch.