La Fiscalía Anticorrupción de Jalisco abrió una investigación para revisar las acciones u omisiones de los funcionarios públicos estatales y municipales involucrados en el caso de Luz Raquel Padilla, la mujer de 35 años asesinada en Zapopan esta semana.
En un comunicado, la institución informó que indaga los hechos para determinar posibles responsabilidades entre servidores públicos.
“Una vez que se integre la carpeta y concluya la investigación inicial se contará con elementos para determinar si ocurrieron actos u omisiones constitutivas de alguno de los delitos que le corresponde investigar a la Fiscalía Anticorrupción para proceder en consecuencia”, señaló la fiscalía.
Luz Raquel murió el martes 19 de julio a causa de las heridas que sufrió el sábado, cuando un grupo de personas le arrojó gasolina y la quemó.
Previamente, la mujer había denunciado ser blanco de amenazas y otras agresiones por parte de algunos de sus vecinos, quienes —de acuerdo con la propia Luz— estaban molestos con los ruidos que hacía su hijo, Bruno, un niño de 11 años diagnosticado con autismo.
Testimonios de su círculo cercano y de organizaciones civiles señalan que Luz solamente recibió una orden de restricción, pero no un pulso de vida (botón de pánico) u otra medida que pudiera protegerla de ataques.
Especialistas consultados ayer por Animal Político también advierten que ni ella ni Bruno recibieron apoyo pese a la discapacidad del niño.
La mañana de este viernes, el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, rechazó que las autoridades hayan caído en la inacción frente al caso de Luz, cuyo asesinato ha causado indignación y atraído la atención nacional.
El caso es investigado por la Fiscalía de Jalisco como un delito de feminicidio. Hasta ahora, hay una persona detenida, aunque no se le vincula con ese crimen en sí sino con las amenazas previas.