En menos de 24 horas, se abrieron para México dos frentes en el marco del tratado comercial que tiene con Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Desde anoche, se dio a conocer la intención del gobierno de Estados Unidos —ya formalizada— de presentar una queja y pedir consultas por políticas energéticas de México que considera contrarias al acuerdo.
Este miércoles, el gobierno de Canadá reveló que promoverá recursos en el mismo sentido.
“Estamos de acuerdo con Estados Unidos en que estas políticas son inconsistentes con las obligaciones de México en el T-MEC”, dijo a la agencia Reuters Alice Hansen, vocera de la ministra de Comercio Internacional, Mary Ng.
“Nos estamos uniendo a Estados Unidos en la toma de medidas mediante el lanzamiento de nuestras propias consultas en el marco del T-MEC para abordar estas preocupaciones, al tiempo que apoyamos a Estados Unidos en su desafío”, añadió.
Para Estados Unidos, las políticas de México en materia de energía son contrarias a la inversión.
Sin embargo, cuestionado sobre el tema este miércoles en su conferencia de prensa mañanera, el presidente Andrés Manuel López Obrador minimizó la situación, aseguró que las políticas energéticas del país no violan el T-MEC y confió en que las inversiones de compañías de esa nación crecerán.
A lo largo del sexenio, el mandatario ha sostenido que México necesita más control estatal de la industria energética, con el fin de tener autosuficiencia. En contraparte, representantes del sector privado y algunos analistas señalan que esto es adverso para la inversión.