El último plan anunciado por el presidente Andrés Manuel López Obrador para el avión presidencial es ofrecerlo a Argentina, con la posibilidad de que dé un enganche de 30 millones de dólares y el resto lo pague en “abonos”.
A lo largo de tres años en los que su gobierno no ha logrado vender el avión, el mandatario ha anunciado varios planes e ideas, entre ellos, rentarlo para bodas, XV años o viajes; intercambiarlo por helicópteros o entregarlo al Ejercito. Por ahora, nada se ha concretado.
López Obrador ha dicho que el avión no se podido vender porque es muy extravagante y reconvertirlo, para que tenga 240 lugares, como un avión comercial, costaría muchísimo, pero tampoco se puede rematar.
A continuación te presentamos las ideas (fallidas) anunciadas por el mandatario para dar destino al avión presidencial.
El mandatario ofreció a Argentina el avión presidencial con la posibilidad de que dé un enganche de 30 millones de dólares y pague el resto a plazos.
“Ya se agotó, por ejemplo, la capacidad de tiempo de vida útil del avión de Argentina, el avión presidencial. Entonces, les mandamos a decir ahí está, llévense el avión nuestro, además es un gobierno amigo”.
“El avión nuestro tiene un avaluó de 110 millones de dólares, y ellos reservaron 30 millones de dólares, todavía no descartamos que puedan dar los 30 y en plazo paguen después el resto”, dijo.
Dice @lopezobrador_ que "ya se agotó la capacidad de tiempo de vida útil" del avión presidencial de Argentina y les ofreció el del gobierno de México, que no se ha logrado vender. Señala que están considerando pagarlo en plazos. pic.twitter.com/jZnIuNNbBa
— Animal Político (@Pajaropolitico) June 9, 2022
El 28 de marzo, el presidente anunció que el avión presidencial se entregará a la empresa militar “Olmeca Maya Mexica”, − que va a operar el Tren Maya y los aeropuertos de Tulum, Chetumal, Palenque y el AIFA −de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), para que lo rente para viajes privados y así costear los gastos de mantenimiento de la aeronave.
Dijo que podrá ser rentado para eventos como bodas, XV años, cumpleaños o por empresas.
El mandatario también abrió la puerta a dos propuestas: intercambiar el avión presidencial por helicópteros para combatir incendios forestales o rentarlo para viajes de la CDMX a Tulum, al nuevo aeropuerto, a Cancún, y Los Cabos.
“Hay propuestas de empresas que quieren intercambiar unos helicópteros por el avión, son helicópteros que podían usarse para atender incendios forestales y estamos analizando esa posibilidad, siempre y cuando se acepte el precio de avalúo”, dijo.
El 21 de junio de 2021, durante su conferencia matutina, López Obrador aseguró que la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, le sugirió venderlo a empresarios que ofertan viajes al espacio.
“Ahora que vino la vicepresidenta, Kamala Harris, le comentaba yo que era tan lujoso ese avión que no teníamos quien lo comprara porque está valuado en 120 130 millones de dólares, y riéndose me dice que a lo mejor de estos potentados que ahora ofrecen viajes al espacio, que a lo mejor a uno de ellos, con todo respeto, le interesaría tener este avión tan lujoso”, dijo el presidente en conferencia mañanera.
Según el mandatario, había dos compradores, uno de ellos ofrece pagar la mitad del valor del avión en equipos médicos, supervisados por la ONU, y la otra mitad en efectivo.
En febrero de 2020, el presidente ofreció al primer ministro canadiense Justin Trudeau el avión presidencial, pero “no le entró! a comprarlo.
“Y no le entró, porque el avión que se le averió es de menor calidad y no tiene tantos lujos como el avión presidencial de México. Por eso como nos ha costado un poco venderlo, deshacernos de ese avión. Se va a rifar a todo el pueblo”, anunció.
El 15 de septiembre de 2020 “se sorteó el avión presidencial”…pero los 100 cachitos ganadores no obtuvieron el avión, sino un premio de 20 millones de pesos.
El mandatario mexicano explicó que no sería la aeronave la que se rifaría, sino el monto de su valor, por lo que se otorgaron 100 premios de 20 millones de pesos cada uno equivalente a 2 mil millones de pesos.
Desde antes de asumir el poder el 1 de diciembre de 2018, López Obrador dijo que no usaría el avión presidencial porque lo considera un vehículo costoso y un lujo innecesario. Para sus viajes por el país, el mandatario se traslada en vuelos comerciales.
El avión presidencial fue comprado durante la administración de Felipe Calderón (2006-2012), aunque fue estrenado hasta el sexenio de Enrique Peña Nieto (2012-2018). En su gestión, Peña Nieto hizo decenas de giras nacionales e internacionales en este vehículo.
López Obrador comentó que aun teniendo el avión parado, se tiene que dar mantenimiento para que no se deteriore y de vez en cuando se vuela conforme a las normas de mantenimiento.
Dicho mantenimiento, indicó, es mucho menos de lo que se gastaría si lo usara.