El presidente Joe Biden instó el martes a defender el derecho al aborto en Estados Unidos, después de la explosiva filtración de un borrador de fallo de la Corte Suprema para eliminarlo, que perfila el tema como central en las elecciones legislativas de noviembre.
La posible anulación del histórico fallo judicial en el caso Roe vs. Wade de 1973, que consagró el derecho al aborto en Estados Unidos, coloca el tema en el centro del debate político antes de los comicios de mitad de mandato, en los que los demócratas pueden perder el control del Congreso.
En la práctica, significaría que las leyes sobre el aborto quedarían en manos de las legislaturas estatales, y se espera que la mitad de los estados introduzcan prohibiciones o nuevas restricciones a la interrupción voluntaria del embarazo.
El aborto es la más feroz de todas las batallas de la guerra cultural y los republicanos han presionado durante años para anular Roe vs. Wade, algo casi inevitable luego de que el expresidente Donald Trump nombrara tres jueces conservadores, volcando hacia la derecha el equilibrio de la Corte Suprema.
Biden, cuya popularidad está en baja, subió las apuestas con miras a las elecciones de noviembre, tradicionalmente desfavorables para el partido en el poder, advirtiendo que otros derechos están amenazados.
“Creo que el derecho de una mujer a elegir es fundamental (…) y la equidad básica y la estabilidad de nuestra ley exigen que no se revoque”, dijo Biden en un comunicado.
“Recaerá en los votantes elegir” a los funcionarios que respalden el derecho al aborto, afirmó el mandatario, prometiendo trabajar para aprobar una legislación en el Congreso que codifique Roe vs. Wade, algo imposible de lograr a menos que muchos más demócratas ganen escaños.
En declaraciones luego a periodistas, Biden fue más allá: calificó el borrador de fallo de “radical” y alertó sobre un “cambio fundamental en la jurisprudencia estadounidense” que podría cuestionar el futuro del matrimonio homosexual y hasta “cómo se cría a un hijo”.
“Significaría poner en cuestión cualquier otra decisión relacionada con la noción de privacidad”, afirmó.
La filtración del borrador del fallo no tiene precedentes y afecta la reputación de la Corte Suprema como la única rama apolítica del gobierno estadounidense.
El presidente del máximo tribunal, John Roberts, confirmó que el documento publicado por el sitio informativo Politico es “auténtico”, aunque advirtió que esto no representa necesariamente la decisión “final” del tribunal.
Roberts ordenó una investigación sobre la filtración, que calificó de “traición”.
Multitudes de manifestantes de ambos bandos se reunieron frente a la sede de la Corte Suprema en Washington, donde activistas antiaborto gritaban: “El aborto es violencia. El aborto es opresión” y “¡Ea, ea, oh, oh, Roe vs. Wade se va!”.
En Roe vs. Wade, la Corte Suprema dictaminó que el acceso al aborto es un derecho constitucional. En un fallo posterior de 1992, Planned Parenthood vs. Casey, el tribunal garantizó el derecho de la mujer a abortar hasta que el feto sea viable fuera del útero, que suele ser entre las 22 y las 24 semanas de gestación.
La mayoría de los países desarrollados permiten abortos con un límite gestacional, en general hasta las 12 semanas.
Roe vs. Wade convierte a Estados Unidos en una de las pocas naciones que permiten el procedimiento sin restricciones más allá de las 20 semanas de embarazo, aunque muchos otros lo autorizan más tarde por razones específicas.
El borrador de fallo está vinculado a una ley estatal de Misisipi para prohibir la mayoría de abortos después de la semana 15. La decisión del tribunal de nueve miembros, seis de ellos conservadores, se espera para junio.
El Comité Nacional Republicano abogó por que las decisiones sobre el aborto vuelvan a los gobiernos estatales. “El Partido Republicano siempre defenderá la santidad de la vida”, señaló.
El borrador de la opinión mayoritaria fue escrito por el juez Samuel Alito y ha estado circulando dentro del tribunal desde febrero, informó el lunes Politico.
El texto de 98 páginas fechado a 10 de febrero califica la decisión de Roe vs. Wade como “atrozmente errónea desde el comienzo”.
“Sostenemos que Roe y Casey deben ser anulados”, escribe Alito en el documento, etiquetado como “Opinión del tribunal”.
“Es hora de hacer caso a la Constitución y devolver la cuestión del aborto a los representantes elegidos por el pueblo”, afirma.
El Instituto Guttmacher, que apoya el derecho al aborto, señaló que 26 estados “seguramente o probablemente” prohíban el aborto si se anula Roe vs. Wade.
Los gobernadores demócratas de varios estados, incluidos California, Nuevo México y Michigan, anunciaron rápidamente planes para consagrar el derecho al aborto por ley, incluso si la corte anula Roe vs. Wade.