Cientos de estudiantes de la Universidad de Guanajuato se manifestaron para exigir justicia por la muerte de su compañero Ángel Yael, de 19 años, asesinado por disparos de un elemento de la Guardia Nacional, el pasado 27 de abril.
“¿Quién nos falta? ¡Ángel!”, corearon previo a iniciar la movilización multitudinaria.
Los jóvenes recorrieron las calles del estado, donde entonaron las consignas “Ángel no murió, la Guardia lo mató”, “Señor, señora, no sea indiferente, se matan estudiantes en la cara de la gente”, “La policía no me cuida, me cuidan mis colegas”, “¡Justicia, justicia!”, “Ni uno más, ni uno más, ni un asesinado más”.
De acuerdo con medios locales como el Periódico AM y Zona Franca, en la movilización participaron más de 10 mil personas; fue la segunda protesta en la capital para exigir justicia por el asesinato de Ángel Yael.
Norma Lucía Rangel Sánchez, mamá de Ángel Yael, pidió justicia por su hijo y que se emprendan medidas para que los jóvenes puedan estudiar y salir a las calles sin miedo.
La mamá del estudiante pidió que la movilización fuera pacifica: “No venimos golpear a nadie, ni siquiera quiero golpear a la persona que accionó el arma contra mi hijo (…) a él también lo espera una familia en casa, él también tiene padres, es una persona muy joven que apenas inicia”.
Los estudiantes visten de blanco y portan pancartas que dicen: “No es normal salir con miedo de no regresar a casa”, “Te dimos una arma para cuidarnos y la usas para matarnos”, “Quiero volver a mi casa graduada, no en una caja”, “No disparan, somos estudiantes”.
La tarde del miércoles 27 de abril, a las 16:40 horas, Ángel Yael, de 19 años, acababa de salir con otros dos compañeros de un convivio que se celebraba en un jardín de fiestas próximo a las instalaciones de la Universidad de Guanajuato en la comunidad de El Copal, en Irapuato, donde cursaba la carrera de Ingeniería Agrónoma.
Se subió a una camioneta de color blanco junto a sus amigos Eduardo, también de 19, y Edith Alejandra, de 22. Los tres se dirigían a viviendas de estudiantes que están próximas al campus universitario, pero se encontraron con elementos de la Guardia Nacional.
Según la versión de las autoridades, los guardias se encontraban realizando rondines en la carretera Salamanca-León para dar seguridad a unos ductos de Pemex, cuando observaron a dos vehículos estacionados en un camino de terracería.
De acuerdo con versiones preliminares, los elementos policiacos no pudieron identificar a los ocupantes de los vehículos y dispararon a la camioneta blanca donde iban los tres jóvenes. El resultado fue que a Ángel lo mataron de un tiro en la cabeza, Edith Alejandra fue herida en el hombro y Eduardo resultó ileso.