Eulalio Vázquez Rodríguez, de 52 años, y César Daniel Vázquez Rangel, de 29, desaparecieron el pasado 31 de marzo cuando manejaban un tráiler en dirección a Nuevo Laredo, Tamaulipas. Habían salido de El Carmen, Nuevo León, pero el vehículo quedó abandonado a la altura del kilómetro 26 de la carretera que une Monterrey con Nuevo Laredo. Su caso es simbólico de la ola de desapariciones que se han registrado a lo largo de los 200 kilómetros que separan ambos municipios.
Desde octubre de 2020 son al menos 70 personas a las que se busca después de transitar por esta ruta, según confirmó a Animal Político la comisionada nacional de búsqueda de persona desaparecidas, Karla Quintana.
Desde octubre, cada mes desaparecen 7 personas en esta carretera, una de las principales vías de comunicación con Estados Unidos y paso obligado para cientos de camiones que transportan mercancías hacia la frontera norte. El 80% de las víctimas eran hombres que manejaban un vehículo de carga, bien sea pesada o ligera.
Este perfil se rompe por casos como el de Gladys Cristina Pérez Sánchez, de 39 años; desaparecida junto a sus hijos Juan Carlos González, de 16, y Michelle Cristina Durán, de 9. Los tres son ciudadanos estadounidenses.
Animal Político publicó el pasado 8 de junio que una ola de desapariciones estaba afectando a trabajadores que se desplazaban desde Monterrey hasta Nuevo Laredo. En aquel momento, según cálculos del colectivo Fuerza por Nuestros Desaparecidos de Nuevo León (FUNDENL), eran 20 las personas no localizadas, muchos transportistas o pilotos de aplicaciones como Uber o Didi. La cifra real es tres veces superior, según lo señalado por Quintana.
En México hay actualmente más de 88 mil personas desaparecidas, según datos de la CNB. De ellas, 11 mil 507 son buscadas en Tamaulipas (el segundo estado del país con mayor número de desaparecidos, solo superado por Jalisco) y 5 mil 234 en Nuevo León.
Hasta el momento las autoridades no han revelado las hipótesis que expliquen este incremento de las desapariciones en este punto concreto.
No obstante, Quintana aseguró que las comisiones estatales de Nuevo León y Tamaulipas realizaron búsquedas en la ruta en febrero, finales de marzo (en la frontera entre ambos estados), abril (Nuevo Laredo y Anáhuac) y junio. En esta última participó directamente la Comisión Nacional. Además, aseguró que desde finales de abril se han mantenido al menos cinco reuniones interinstitucionales con autoridades de Nuevo León, Tamaulipas y Coahuila con la participación de las fiscalías para sistematizar los datos de los desaparecidos y establecer estrategias de búsqueda.
También dijo que los colectivos fueron informados recientemente sobre estos trabajos.
La cifra de desaparecidos en esta carretera no ha hecho sino aumentar desde que FUNDENL dio la primera voz de alarma en público, a mediados de mayo. El 28 de ese mes la Fiscalía de Nuevo León reconoció que al menos 19 personas estaban en búsqueda y que se habían abierto carpetas tanto en el estado como otras que fueron enviadas a Tamaulipas.
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En un comunicado, el gobierno de Nuevo León actualizó la cifra el pasado 22 de junio, cuando aseguró que se habían señalado 41 reportes de desaparición con un promedio de 1.4 personas por carpeta abierta.
En el documento, el ejecutivo que todavía preside Jaime Rodríguez Calderón, El Bronco, aseguraba que 17 fueron localizados, todos con vida salvo una persona que fue encontrada muerta. La redacción del comunicado daba a entender que se había producido un operativo en el que estas personas habían sido rescatadas.
Ante la presión de los colectivos, que comenzaron a recibir llamadas de familiares interesados por si sus seres queridos podían haber sido liberados, tuvo que matizar que los regresos a casa se habían registrado “de manera gradual y sin la intervención de algún operativo de las autoridades”. Es decir, que aquellos que recuperaron su libertad ya estaban con sus familias.
Para evitar confusiones, FUNDENL, pidió a las autoridades que actualicen las fichas de desaparecidos y las hagan públicas.
Desde el inicio de las desapariciones los colectivos han exigido que se elaboren recomendaciones para quienes deben tomar esta ruta, que siempre fue considerada de alto riesgo. FUNDENL hizo públicos algunos consejos, como no viajar de noche o mantenerse siempre en contacto con alguna persona.
Con el incremento de los casos de desaparición y después de los eventos violentos en Reynosa, Tamaulipas, el gobernador de Nuevo León recomendó a sus ciudadanos no viajar por carretera hacia el estado limítrofe.
Durante el último mes familiares de los desaparecidos en esta ruta han realizado protestas en Monterrey. Piden que las autoridades no olviden los casos y que se incrementen los trabajos de búsqueda y seguridad. La inconformidad hasta el momento no ha logrado sus objetivos: las desapariciones se multiplican en una carretera clave para las exportaciones de México a Estados Unidos.