En su propuesta de presupuesto federal para 2022, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, solicitó al Congreso de su país aprobar 861 millones de dólares que serían invertidos en Centroamérica, como una medida para frenar la migración.
En el borrador del documento, el gobierno de EU argumentó que busca atacar las causas de fondo de la migración y que de aprobarse, este presupuesto sería “un primer paso hacia un compromiso de cuatro años de invertir en América Central”.
También se incluye la propuesta de dar más fondos para el servicio de Nacionalización y de Ciudadanía, que entre otros objetivos busca acelerar la tramitación de casos de asilo, que a veces esperan años para ser analizados.
En los últimos meses, Estados Unidos ha enfrentado un aumento significativo en la llegada de personas migrantes provenientes de Centroamérica.
Tan solo en febrero casi 100 mil migrantes fueron detenidos en la frontera entre EU y México, mientras que en marzo se alcanzó una cifra récord en los últimos 15 años, especialmente de menores no acompañados, cuya cifra fue de 18 mil 663 niños y niñas.
La llegada masiva de personas migrantes a suelo estadounidense representa un reto logístico, humanitario y presupuestario para el gobierno de Joe Biden.
Por esta razón, hace algunos meses, el presidente Biden anunció un programa de 4 mil millones de dólares en ayudas para Guatemala, El Salvador y Guatemala.
El pasado miércoles, el presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo una conversación con la vicepresidenta de EU, Kamala Harris, en la que también abordaron el tema el aumento de la migración ilegal.
“Existe disposición de nuestra parte para sumar voluntades en el combate al tráfico de personas y protección de los derechos humanos, sobre todo de niñas y niños”, expresó López Obrador luego de la charla.
Mientras que Kamala Harris agradeció al presidente de México por su cooperación y dijo que trabajarán juntos para enfrentar las causas de la migración, mejorando las condiciones de la región.
Harris fue designada por Joe Biden para abordar las causas de la migración de indocumentados en coordinación con los gobiernos de México, Guatemala, El Salvador y Honduras.
En la propuesta de presupuesto, que asciende a más de 1.5 billones de dólares, el gobierno de Joe Biden planteó como sus prioridades la salud y la educación, por encima de sectores como el de defensa, a diferencia del gobierno anterior.
Los programas no relacionados con defensa tendrían un presupuesto de 769, 400 millones de dólares y 753 mil millones a planes de defensa.
La secretaria del Tesoro, Janet Yellen, señaló que esta petición de fondos “hace las cosas más justas” e “inyecta” dinero “en las comunidades donde el capital llega con dificultad”.
Entre otras cosas, el gobierno estadounidense pretende invertir 36 mil 500 millones de dólares en escuelas de los quintiles más pobres.
El proyecto también incluye proyectos de investigación en salud, con foco en enfermedades como el cáncer, la diabetes y el Alzheimer.
Con información de AFP.