Padres de los 43 estudiantes de la normal de Ayotzinapa tienen tomada este sábado la caseta de la Autopista del Sol para exigir avances en el caso y que se abran carpetas de investigación en contra del exsecretario la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos Zepeda.
Argumentan que Cienfuegos era el encargado de las Fuerzas Armadas cuando desaparecieron sus hijos, además de que en su momento él negó la participación del Ejército en la agresión a los jóvenes, de acuerdo con información de Quadratín.
Durante su manifestación, también exigen que se finque el delito de desaparición forzada al capitán José Martínez Crespo, el primer militar vinculado a la desaparición de estudiantes.
El 19 de noviembre el Juzgado Segundo de Procesos Penales Federales con residencia en Toluca, Estado de México, dictó auto de formal prisión contra el capitán José Martínez Crespo por “delincuencia organizada con la finalidad de cometer delitos contra la salud”.
Sin embargo, su detención es solo por el delito de “delincuencia organizada con la finalidad de cometer delitos contra la salud”. Es decir, que se le acusa de vínculos con el narcotráfico, en concreto con Guerreros Unidos, pero hasta el momento no hay una acusación en firme sobre su participación en los hechos de Iguala el 26 de septiembre de 2014.
El capitán Crespo, que actualmente estaba retirado, pertenecía al 27 Batallón de Infantería destinado en Iguala y aparece en diversos testimonios como uno de los militares desplegados en Iguala la noche en la que los normalistas desaparecen. En concreto, se sabe que estuvo presente en el Hospital Cristina, en el periférico norte, en el palacio de Justicia y en Barandilla Municipal, donde acudió para preguntar por una motoneta.
Crespo es el primer militar arrestado después de que el presidente Andrés Manuel López Obrador anunciase el pasado 26 de septiembre que se habían librado órdenes de captura contra elementos castrenses.
Aquella noche el capitán Crespo estuvo patrullando en Iguala al frente de un grupo de soldados. Sin embargo, por el momento no hay acusación formal por participar de algún modo en la desaparición de los normalistas.
Desde que ocurrieron los hechos, los padres y madres de los 43 han exigido que se investigue el papel de los militares, y en concreto el del 27 batallón de Infantería presente en Iguala.