La audiencia de Emilio Lozoya será a puerta cerrada por las medidas que el Consejo de la Judicatura Federal (CJF) ha implementado por la pandemia de COVID-19. La información sobre la sesión se entregará solo a través de un chat del servicio de mensajería WhatsApp al que tienen acceso algunos medios de comunicación, se confirmó este miércoles.
Aunque el Código Penal Nacional de Procedimientos Penales señala que las audiencias deben ser públicas, con acceso para las partes interesadas y a cualquier ciudadano, el CJF suspendió desde el 17 de marzo las audiencias públicas por la emergencia sanitaria sin que haya ofrecido alguna alternativa para seguirlas, hasta ahora que, para el caso del exdirector de Pemex, informó que se entregaría información vía Whatsapp, aunque solo a los periodistas acreditados.
El CJF dijo estar consciente del interés que genera la audiencia de Emilio Lozoya, pero agregó que por cuestiones de salubridad y por el derecho a la privacidad e intimidad de Lozoya, la audiencia será a puerta cerrada y no se transmitirá en vivo.
“Tomando en consideración los principios de publicidad, así como de presunción de inocencia, derecho a la privacidad e intimidad, el CJF tomó la determinación de informar y narrar lo que está sucediendo en la audiencia, en tiempo real y por el tiempo que dure, desde Comunicación Social del consejo”, informó el órgano a través del chat donde están acreditados los medios de comunicación.
Varios medios, entre ellos Animal Político, pidieron por escrito al Consejo de la Judicatura que, para casos de gran relevancia social, y en cumplimiento del principio de publicidad en todo el proceso judicial, se permitiera el acceso del público a la audiencia de Lozoya en Reclusorio Norte, o al menos que ésta se transmitiera online.
Incluso, se le planteó que estableciera medidas como habilitar un salón amplio de videoconferencia, una transmisión en línea, o aplicar medidas extra de higiene y sana distancia dentro de la sala de audiencias.
Emilio Lozoya llegará en las próximas horas a México procedente de Madrid, España. Un avión oficial mexicano lo traerá para que enfrente las acusaciones de lavado de dinero que hay en su contra.
De acuerdo con la investigación de las autoridades, Lozoya Austin recibió sobornos por 3.4 millones de dólares de la empresa Altos Hornos de México para que Pemex – de la que era director entonces- concretará la compra irregular de plantas de fertilizantes chatarra.
Apenas Lozoya descienda del avión, los médicos legislas verificarán su estado de salud y se procederá con su traslado inmediato al Reclusorio Preventivo Norte, donde se encuentran los jueces federales que concedieron las órdenes de captura.