Sin medias de sana distancia, entre el 28 de marzo y el 10 de abril, en solo 12 días, se habrían presentado 38 mil 773 casos de COVID-19 en el Valle de México lo que hubiera colapsado al sistema de salud. Con el confinamiento, se logró tener 21,800 casos pero hasta el 13 de mayo, explicó Hugo López-Gatell, subsecretario de Salud, en la conferencia diaria sobre el nuevo coronavirus.
“Tan solo del 28 del marzo al 10 de abril, en doce días, se habría agotado la epidemia. Hubiera habido la cantidad de casos que se pueden tener a lo largo de varias semanas. Pero hubiera colapsado el sistema nacional de salud. No habría sido competente para recibir a tantas personas”, aseguró.
A eso es a lo que se le llama aplanar la curva, explicó. “Para los que se preguntan dónde está eso de aplanar la curva, pues es esto, es que en lugar de tener más de 38 mil casos en 12 días, en el Valle de México, solo hubo 21 mil 800” y en un tramo más grande de días.
López-Gatell precisó también que aplanar la curva no quiere decir que habrá menos casos en una zona, aunque en general cuando se logra esto el número de casos total sí disminuye, de lo que se trata es de que no se acumulen en un periodo corto de tiempo.
Por ahora, esa curva no va a bajar, los casos siguen aumentando, explicó. Es necesario llegar al punto de inflexión para que empiecen a descender, lo que se llama: doblar la curva.
Las proyecciones numéricas de lo que habría pasado en diferentes escenarios, sin medidas de sana distancia y con estas en marcha, señaló el subsecretario, son el resultado de las predicciones matemáticas que hizo uno de los grupos científicos del Centro de Investigación en Matemáticas del Conacyt y del Instituto de Matemáticas de la UNAM, con los que la Secretaría de Salud ha estado trabajando.
“Esta predicción vino del conjunto de datos observados hasta el 22 de marzo, fecha anterior a que entrará en funcionamiento la Jornada Nacional de Sana Distancia, y de un modelo matemático que sigue unas reglas básicas sobre la probabilidad de cambiar del estado de susceptible al de expuesto al virus, al estado de infectado e infectante, al de recuperado, es un modelo de epidemiología matemática”, explicó López-Gatell.