La Secretaría de Salud yCofepris confirmaron a Animal Político que si se le solicitó al Centro Médico ABC no aplicar pruebas tipo IgG, que no tienen precisión para detectar una infección en curso, pero aclararon que la institución privada cuenta con los permisos vigentes para la realización de las pruebas que detectan el virus que causa COVID -19.
Después de que circulara en medios un comunicado firmado por el doctor Elías Horta Bustillos, vicepresidente médico del Centro Médico ABC, en el que se informaba a los médicos que por indicaciones de la Cofepris a partir del 12 de mayo de 2020 quedaba suspendida la toma de muestras para realizar la prueba SARS-CoV2, IgG, hasta nuevo aviso, este portal buscó tanto a las autoridades de Salud como al hospital privado.
Referente a la información que comenzó a circular este martes 12 de mayo, aclaramos lo siguiente: pic.twitter.com/hQY41laB9y
— Centro Médico ABC (@ABCcentromedico) May 13, 2020
La Cofepris señaló que el Centro Médico ABC no cuenta con los permisos necesarios para aplicar estas pruebas IgG en esta contingencia sanitaria.
“No es que se les haya retirado… es que no tenían los permisos necesarios para aplicar las pruebas a las que hace referencia el hospital”, subrayaron.
Las autoridades explicaron que por esa causa se solicitó a la institución privada no aplicar las pruebas tipo IgG, que no tienen precisión para detectar una infección en curso, y para las que nunca se les ha otorgado el permiso correspondiente. Sin embargo, dijeron el grupo hospitalario puede seguir haciendo las pruebas conocidas como PCR, que sí están avaladas por la autoridad sanitaria para la detención del COVID-19.
La Secretaría de Salud ha confirmado que los laboratorios certificados por el INDRE realizan pruebas PCR. En la lista más actual, del 13 de mayo, el ABC está incluido, por lo que puede continuar aplicando este tipo de test.
Roxana Trejo, gerente de Epidemiología del Centro Médico ABC, precisó primero que las IgG no son pruebas rápidas. “La rápida es la que te toman como si fueras al de Zika o vas y te haces una prueba de embarazo de esas que venden en la farmacia, y pones una gotita de orina o de sangre, esa es una prueba rápida”.
Para estas pruebas IgG se toma una muestra de sangre que lleva un proceso, dice, aunque asegura que para más información sobre cómo se hace habría que comunicarse al laboratorio.
“Pero sí lo que viste ahí (en el comunicado interno del ABC) es correcto, nosotros ya no vamos a realizar ese tipo de pruebas, que no son pruebas de detección de quién está enfermo o no, es una prueba de que pudiste hacer estado en contacto con el virus, nada más, es lo único que dice la prueba”.
AP: ¿Estas pruebas entonces ya no las van a hacer?
RT: No, ya no. Pues el alineamiento lo tenemos que tener muy claro ante el gobierno, todos trabajamos en equipo y así tiene que ser.
AP: ¿Por qué estaban haciendo estas IgG?
RT: Son pruebas que se hacen en EU, tienen validación de FDA, no son pruebas que se hacen en el país, es en el extranjero, pero todos al final hay que alinearnos. En realidad no son pruebas que se hicieron, se iban a empezar a hacer.
AP: ¿No las estaban haciendo sin autorización?
RT: Bueno, para información completa sí te la tendrían que dar ellos (Relaciones Públicas del Hospital) porque la información completa no la tengo.
Aunque se pidió la información correspondiente o una entrevista con un vocero que pudiera precisar más información, hasta el cierre de esta edición no hubo otra respuesta.
En diversas conferencias vespertinas de la dedicadas a COVID-19, el subsecretario de Salud ha explicado que en vez de detectar propiamente al virus SARS-CoV-2 (causante del covid-19), la prueba serológica detecta la respuesta inmunológica contra este.
A través de una gota de sangre, el test detecta los anticuerpos que produce el organismo mientras responde, o si ya tuvo una respuesta en el pasado, ante la infección; por eso es que no se pueden usar para saber si alguien está enfermo en la actualidad porque también detecta una respuesta inmune anterior.
Además, ha señalado el subsecretario, si la prueba se realiza al inicio del contagio o si la persona se ha infectado durante la última semana, hay una alta probabilidad de que el resultado sea negativo.
La OMS, de hecho, no recomienda estos análisis para diagnosticar a un paciente que necesita atención.
En cambio, las que sí están autorizadas por Salud y que el ABC puede seguir haciendo son las de reacción en cadena de la polimerasa (PCR, por sus siglas en inglés).
Estas son las que recomienda la OMS para confirmar los casos vigentes de covid-19, puesto que detectan el material genético del virus en las muestras de secreciones respiratorias del paciente, y así se puede determinar una infección presente en el organismo.
De acuerdo con el Consejo Mexicano de Empresas de Diagnóstico (COMED), integrada por 39 laboratorios en todo el país, asegura que este anuncio sobre el Hospital ABC genera incertidumbre entre las empresas que están realizando las pruebas de detección de COVID-19, incluyendo a sus agremiados debido a que “no hay certeza jurídica al respecto”.
El director general del COMED, Guillermo Maynez, asegura que “el permiso del INDRE no es un requisito legal, porque el Instituto no es autoridad reguladora. Incluso ni siquiera son permisos”. Los laboratorios, dice, aceptaron la validación para aplicar las pruebas de COVID “de buena fe”, para trabajar en coordinación con el gobierno ante la emergencia de una pandemia y no representaba un problema que la autoridad verificara la metodología de los privados para tener certeza.
Sin embargo, la validación del INDRE no significa una “autorización”, por ello es que la suspensión al Hospital ABC para realizar pruebas que se procesan en Estados Unidos con estándares internacionales de calidad significa una preocupación, pues hay más laboratorios haciéndolas y no hay reglamento que regule alguna suspensión en este momento, afirma en entrevista con Animal Político.
Explicó que el único requisito para que un laboratorio privado pueda operar es obtener una licencia emitida por Cofepris o de la jurisdicción sanitaria, pero no existen permisos específicos por cada tipo de prueba.
Los laboratorios también pueden certificar sus procesos a través del ISO90001 y la Entidad Mexicana de Acreditación, pero esto es un plus, pero ni siquiera son requisitos condicionados para su operación.