La planta cervecera de Constellation Brands no se terminará de construir en Mexicali, Baja Calafornia, luego de que casi 28 mil personas desaprobaran la obra.
En la consulta ciudadana realizada este fin de semana en la ciudad de Mexicali el 76.1% de las personas votó por el NO y solo el 23.3% por el SÍ.
La subsecretaria de Gobernación, Diana Álvarez, detalló que el sábado participaron 17, 095 personas, mientras que el domingo fueron 19, 686.
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En total se contabilizaron 36, 781 votos, de los cuales 27, 973 tacharon la opción: “No estoy de acuerdo que se termine de construir la planta (…) porque no quiero que se use el agua para ese tipo de industrias”.
Mientras que 8, 547 personas votaron por la opción: “Estoy de acuerdo que se termine de construir (…) porque ya han invertido y se crearán empleos, sin afectar el abasto de agua para la población”.
Diana Álvarez detalló que tras haber ganado el NO, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) “ya no dará los permisos correspondientes para la operación de la planta”.
Además de que el gobierno federal se pondrá en contacto con la empresa internacional para subsanar los daños.
El presidente Andrés Manuel López Obrador señaló que hablará con los dueños de la empresa y con quien se necesite para que se respete la decisión de la población.
“Yo creo que ellos van a entender. Cuando hay un resultado así es evidente que no hay acuerdo (…) tenemos que escuchar a la gente”, dijo.
El presidente planteó un par de antecedentes que derivaron en la realización de la consulta.
El primero es que el gobierno anterior de Baja California no dio suficiente información a la población antes de aprobar el proyecto, y solo la persuadió para que se aceptara la construcción.
Mientras que el segundo tiene que ver sobre una posible privatización del agua en Mexicali, la cual provocó un movimiento ciudadano nunca antes visto.
“Claro que nos importa la inversión y también la creación de empleos pero también tenemos que tomar en cuenta la opinión de la gente y cuidar nuestros recurso naturales”, acotó.
Para finalizar, el presidente dijo su gobierno buscará la forma de que Constellation Brands tenga facilidades para poner su planta en otras regiones donde no se afecte el abasto de agua.
La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) lamentó la realización de una consulta para decidir el futuro de la planta, y advirtió que decisiones como estas pueden ocasionar crisis económicas.
En un comunicado, los empresarios señalaron que Constellation Brands
ya contaba con todos los permisos necesarios para continuar con las obras y que a la fecha había generado alrededor de 32 mil empleos directos e indirectos.
Plantearon que, con la consulta popular, el gobierno federal “no ha respetado la aplicación del marco legal vigente. “Un puñado de personas no puede decidir el futuro de una inversión de miles de millones de dólares”.
Respecto a las decisiones del presidente acotaron que si bien 2019 fue un año sin crisis ni recesiones internacionales, sí hubo errores y omisiones que llevaron a los empresarios a desconfiar en su gobierno.
Reiteraron que no había razón para hacer una consulta, pues todos los estudios (gobiernos y científicos) han demostrado que la operación de la planta en Mexicali “no afecta la disponibilidad del agua” para la población.
Para finalizar criticaron que López Obrador haya realizado la consulta en plena contingencia y le hicieron un llamado para que, antes de tomar una determinación, valore la circunstancia tan compleja que atraviesa México y el mundo.
Duro #GolpeALaInversión. En la consulta sobre #ConstellationBrands apenas participó el 4.58% de la lista nominal de Mexicali; pese a ello, el @GobiernoMx decidió cancelar el proyecto de inversión PRIVADA de 1,400 MDD. El Presidente @lopezobrador_ está destruyendo México #YaEstuvo pic.twitter.com/gyqheKLnD2
— Coparmex Nacional (@Coparmex) March 23, 2020
En abril de 2015, la empresa Constellation Brands presentó un proyecto para construir una planta cervecera en Mexicali, Baja California, mismo que fue aprobado y anunciado por el entonces gobernador, Francisco Vega.
En aquel entonces se anunció una inversión inicial de 1, 500 millones de dólares y la generación de 750 empleos permanentes.
El descontento de la población surgió cuando se supo que la operación de la planta podía afectar el abasto de agua en la región al consumir 5.8 millones de metros cúbicos de agua por año.
Entonces comenzó una serie de movilizaciones por parte de los habitantes para que se frenaran las obras.
En enero pasado, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció una consulta ciudadana para decidir el futuro de la planta.
Ante esto, la empresa amenazó con llevarse esa producción a otro país y acusó que que en los últimos dos años su camino ha sido incierto y frustrado por una oposición sin fundamento legal.
López Obrador argumentó que la consulta se haría por una resolución de la Secretaría de Medio Ambiente.
Además, el pasado 9 de febrero, la Comisión Nacional de Derechos Humanos definió que la construcción y operación de la planta viola el derecho humano al agua de los habitantes de Mexicali.