El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) informó que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) demolerá y construirá el Hospital General San Alejandro, de Puebla, mismo que fue cerrado tras los daños registrados en el sismo del 19 de septiembre de 2017. Esto a pesar de que ya existía un proyecto para sustituir a dicho hospital y en el que se gastaron más de 400 millones de pesos.
El titular del IMSS, Zoé Robledo, anunció que en los próximos días se firmará un convenio específico con la Sedena con el fin de que sus ingenieros militares sean los encargados de la obra.
Robledo agregó que la construcción del hospital forma parte del Plan de Infraestructura Hospitalaria para la zona metropolitana de Puebla, y que su entrega se hará con base en los tiempos establecidos por los ingenieros militares.
El titular del IMSS reconoció que el cierre de este hospital por los daños de los sismos afectó la capacidad de atención de la derechohabiencia del IMSS en Puebla y dijo que en esta nueva etapa de construcción no se exonerará “a nadie que haya cometido un acto de corrupción” relacionado a la obra en el pasado reciente.
El Hospital General Regional No. 36 de San Alejandro fue construido en 1972 en un terreno de más de 22 mil metros cuadrados. Con los años se convirtió en el instituto con más demanda de la entidad al atender al 60% de los derechohabientes del IMSS en Puebla.
Sin embargo el hospital resultó afectado por al menos cinco sismos de fuerte magnitud: 1980, 1985, 1999, 2012 y 2017, siendo éste último el que provocó el mayor daño y su cierre definitivo.
En octubre pasado, Animal Político reveló que el IMSS gastó 427 millones de pesos en un terreno en el que ya se construyó, a medias, un edificio que sustituiría al Hospital San Alejandro, y que resultó ser una obra inservible y que sólo podrá utilizarse para oficinas.
La construcción no avanzó debido a que la adjudicación de la obra estaba en disputa. En 2018 se hizo la licitación del proyecto, pero las empresas que fueron descalificadas en el proceso acusaron irregularidades e impugnaron el procedimiento.
La disputa legal comenzó luego de que el gobierno de Miguel Barbosa determinara reponer el proceso en el que resultó ganadora la firma española Sacyr, lo que derivó en una inconformidad de la empresa ante tribunales y en que el IMSS no pudiera hacer nada en el terreno hasta tener una resolución judicial.
En el anuncio sobre el nuevo proyecto Zoé Robledo no dijo si se recuperará la inversión de los 427 mdp hecha en el otro terreno.
Durante los años en que el Hospital San Alejandro ha estado cerrado los derechohabientes han tenido que recibir atención médica en otros hospitales de la entidad como La Margarita, en el sureste de la capital poblana, el cual tiene que operar con sobrecupo y sobredemanda de hasta 300% para atender a todos pacientes, según reconoció el mismo IMSS.
Según el proyecto de inversión vigente hasta 2019 el nuevo Hospital San Alejandro deberá realizar 188 mil hospitalizaciones, 23 mil cirugías, 7 mil partos y 200 trasplantes cada año.