En el caso del feminicidio de Fátima -de 7 años y cuyo cuerpo sin vida fue encontrado el fin de semana pasado en Tláhuac-, se registraron fallas y omisiones de parte de las autoridades federales y capitalinas, que facilitaron su desaparición y complicaron su búsqueda en las horas y días inmediatos a que ocurrieron los hechos.
Se trató de una “cadena de negligencias institucionales”, como lo definió la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, que comenzaron desde el momento en que se permitió que a la niña se la llevara una mujer que no era su madre, pero que continuaron con la investigación del caso y con la difusión del DIF capitalino de conflictos familiares que no fueron atendidos.
Las pistas claves de la indagatoria con las que hoy se cuenta, como el video donde se identifica a la mujer que se llevó a la niña, fueron obtenidas por la familia, no por la policía. Fue hasta después de que se confirmó la muerte de la menor que la Fiscalía difundió las imágenes para ofrecer una recompensa.
A continuación se detallan algunas de estas fallas y omisiones, a partir de lo narrado por los familiares de Fátima, que durante días intentaron localizarla, y de lo reconocido por las propias autoridades.
Cabe señalar que tanto el gobierno federal como la Fiscalía capitalina iniciaron investigaciones internas para deslindar las responsabilidades de los funcionarios en los distintos momentos del caso, y en su momento aplicar las sanciones administrativas, e incluso penales, si las mismas resultan graves.
Fátima desapareció aproximadamente a las 18:40 horas del martes 11 de febrero, cuando una mujer que no era su madre pudo llevársela sin mayor problema al salir de la primaria pública Enrique Rébsamen, ubicada en Xochimilco, donde estudiaba.
Esto fue posible, según la Fiscalía General de Justicia capitalina (FGJCDMX) y los familiares de la niña, por la negligencia del plantel al no aplicar algún protocolo o control para la entrega de los niños.
En una conferencia realizada el lunes, la Autoridad Federal Educativa de la Ciudad de México (AEFCM) señaló que sí existe un procedimiento para la entrega de menores que el colegio incumplió, y que se encuentra en el punto 42 de la Guía Operativa para la Organización y Funcionamiento de los Servicios de Educación Inicial, Básica, Especial y para Adultos de las Escuelas Públicas de la Ciudad de México.
Dicho procedimiento incluye disposiciones como la entrega de los menores a los padres previa identificación; o la canalización del niño al Ministerio Público si su familiar no llega en los 20 minutos próximos a su salida. Nada de eso sucedió en el caso de Fátima.
Las autoridades educativas anunciaron que esta semana comenzarán una campaña de credencialización de padres y tutores, para prevenir que ello suceda.
En este contexto autoridades de la FGJCDMX dijeron que la SEP ofreció su colaboración en la indagatoria. Se prevé que se cite a declarar a los directivos del plantel para deslindar su responsabilidad. La jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, hizo hincapié en que este aspecto debe ser revisado y corregido.
Tras percatarse de la desaparición de Fátima, su familia intentó localizarla en las inmediaciones de la escuela. Al no poder hacerlo su hermana Karla y su padre acudieron al Ministerio Público de la Fiscalía Desconcentrada en Tláhuac, para presentar la denuncia. Sin embargo, las autoridades de dicha agencia no quisieron iniciar el expediente.
“Yo personalmente quise ir a levantar la demanda, pero me dijeron que no se podía hacer nada, que tenia que esperar 72 horas”, dijo Karla.
Ante la negativa reiterada por iniciar la denuncia en Tláhuac, la familia tuvo que acudir al día siguiente a la Fiscalía Especial para la Búsqueda, Localización e Investigación de Personas Desaparecidas (FIPEDE), ubicada hasta el otro extremo de la Ciudad de México, en la alcaldía de Azcapotzalco. Fue ahí donde finalmente accedieron a tomarle una declaración a la madre de Fátima, y se inició el expediente AYO/51/2929.
La subprocuradora de Atención a Victimas de la Fiscalía de Justicia, Nelly Montealegre, aseguró que la familia no acudió el 11 sino el 12 de febrero a la Fiscalía de Tláhuac (sin precisar una hora exacta), aunque confirmó que, en efecto, ahí no se inicio la carpeta de investigación bajo el argumento de que las desapariciones eran competencia de la FIPEDE, no de ellos.
La fiscal de la Ciudad, Ernestina Godoy, dijo que la actuación de los funcionarios de la Fiscalía de Tláhuac se revisará a detalle, al igual que el actual procedimiento para levantar denuncias por desapariciones, ante la posibilidad de que entorpezca la celeridad de la búsqueda.
Una vez formalizada la denuncia se pudo generar una ficha de la denominada “Alerta Amber”, que se utiliza para difundir con la mayor celeridad posible datos de una persona desaparecida. En la misma quedó asentado que la denuncia se interpuso el 12 de febrero, pero que los hechos habían ocurrido un día antes.
Durante los días siguientes a su desaparición Fátima fue buscada principalmente por sus familiares, no por las autoridades. Fueron ellos mismos los que recolectaron los videos que hoy son claves para esclarecer lo sucedido.
“No hubo una coordinación adecuada entre las autoridades, no hicieron lo que deberían haber hecho. Mi familia y yo no somos especialistas en esto y aun así nos trasladamos al lugar, les dimos todas las cosas que pudimos, los videos, la gente estaba dispuesta para ayudarnos peor la autoridad no”, dijo Manuel López Guzmán, tío de Fátima
Karla, la hermana de Fátima, dijo que con una foto de su hermana en su celular intentó localizarla sin éxito. Su madre y sus tíos visitaron varios comercios para preguntar por ellos. No consiguieron ubicarla, pero gracias a ello obtuvieron videos, entre ellos el que permitió ubicar a la mujer que se llevó a la niña al salir de la escuela.
“Fue hasta el tercer día de su desaparición, el jueves 13 me parece, cuando nos dijeron que activaron el protocolo. Pero yo la verdad no sentí que hicieron nada hasta que llegó el sábado, cuando localizaron un cuerpo. Estoy convencida que, si hubieran querido y hubieran actuado, le habrían salvado su vida a mi hermana”, dijo Karla.
En una conferencia realizada anoche la fiscal General, Ernestina Godoy, y la subprocuradora, Nelly Montealegre, defendieron inicialmente las acciones que implementaron para la búsqueda, pero terminaron reconociendo que fue la familia la que ha encabezado los esfuerzos y la iniciativa de la indagatoria.
“La familia ha sido muy activa en la investigación, ellos son los que se han constituido y visitado los lugares, los que revisaron las cámaras particulares y proporcionaron estos materiales. Nosotros acompañamos la certificación de esas acciones”, dijo la fiscal.
Montealegre confirmó que fue el jueves 13 cuando se puso en marcha el protocolo de búsqueda, que incluye alertar a otras instituciones como hospitales sobre el ingreso de personas que pudieran cumplir con el perfil de Fátima. Justificó esta tardanza por el retraso en la denuncia inicial.
Otra irregularidad que la familia de Fátima denunció es que varias cámaras de videovigilancia del gobierno conectadas al Centro de Control y Comando C4 ubicadas en torno al centro escolar arrojaron imágenes muy oscuras, y algunas de plano no funcionaron.
Autoridades capitalinas indicaron a Animal Político que, en efecto, hay equipos obsoletos y otros que sí funcionan, pero cuyos lentes son bloqueados de forma deliberada por comerciantes informales de la zona, para prevenir operativos en su contra.
Claudia Sheinbaum dijo el lunes que este es otro de los aspectos que está bajo investigación interna, por parte de su administración.
“Estamos revisando qué cámaras funcionaban, que cámaras no funcionaban. Nosotros tenemos un proceso de cambio de cámaras, pero vamos a verificar porque en esta zona no ha habido cambio de estos dispositivos. Todo lo vamos a dar a conocer y no vamos a esconder absolutamente nada”, dijo la Jefa de Gobierno.
El lunes la subprocuradora de Atención a Víctimas de la FGJCDMX sostuvo que el pasado 13 de febrero, cuando Fátima aun se encontraba en calidad de desaparecida, personal de la Fiscalía acudió a la primaria Enrique Rébsamen a hacer una verificación sobre lo ocurrido con la menor, y a recolectar información.
Sin embargo, el director del colegio, Telésforo Flores, dijo en entrevista con este medio que ninguna autoridad de la Fiscalía se había puesto en contacto con ellos para pedirles información hasta después de que se encontró el cuerpo de la menor.
“Nos mandaron un oficio para revisar las cámaras del colegio, pero ello no ha ocurrido todavía. Yo levanté un acta el 14 de febrero y nosotros hicimos nuestro trabajo”, dijo el director.
Flores dijo que ellos se enteraron de la desaparición de la menor de edad un día después de ocurridos los hechos, el 12 de febrero, e insistió en que “no vieron nada extraño”.
La tarde del lunes el DIF de la Ciudad de México emitió una tarjeta informativa en la que reveló antecedentes de posible violencia familiar y maltrato emocional en la familia de Fátima, señalando como posibles responsables a la madre de la menor y su padrastro.
La institución detalló que en noviembre de 2015 recibió el primer reporte de este hecho, por lo que realizó una visita a la familia en la que se corroboró que ya existía una intervención del DIF Nacional, por lo que dio por cerrado el expediente en 2016.
Un año después, en 2017, se recibió la llamada de otro familiar en la que se sostenía que continuaba el “descuido” y “negligencia” de los menores.
El DIF Capitalino señaló que dio información sobre el proceso de custodia al familiar denunciante. No obstante, no detalla ninguna otra intervención posterior para atender o resolver el problema.
Hasta la noche del lunes 17 de febrero el móvil detrás del feminicidio de Fátima continuaba sin ser esclarecido por la Fiscalía.
En el transcurso del día se descartaron algunas hipótesis y rumores, entre ellas el que la menor fuera asesinada para extraer sus órganos, o que un hombre al que su madre señaló de nombre Alan fuera el responsable. Ello ya que según la fiscal dicha persona está muerta.
Lo que se confirmó es que había cinco personas declarando, de las cuales tres fueron ubicadas tras un cateo en un domicilio de Xochimilco donde se presume que la menor pudo ser asesinada, y que por ahora son los principales sospechosos. Las autoridades centran sus esfuerzos en verificar el círculo más cercano a la familia de la niña.
Oficialmente no se dieron detalles de los resultados de la necropsia practicada al cuerpo de Fátima, pero autoridades del Instituto de Ciencias Forenses confirmaron a Animal Político que la causa concluida en el dictamen es la de asfixia por estrangulamiento.
Con información de Itxaro Arteta