Las 10 personas indígenas que fueron halladas calcinadas en Chilapa, Guerrero, el pasado 17 de enero fueron asesinadas por seis hombres, presuntamente integrantes del grupo criminal de “Los Ardillos”.
De acuerdo con el fiscal del estado, Jorge Zuriel de los Santos, los seis hombres armados se encontraban esperando a las dos camionetas en las que se trasladaban las víctimas por el camino Mexicalzingo-Tlayelpa, por lo que, aproximadamente a las 11:00 horas del 17 de enero, les marcaron el alto con un disparo al aire y posteriormente los privaron de la vida en el mismo lugar, utilizando para ello armas punzocortantes.
En conferencia de prensa, de los Santos Barrila indicó que una vez fallecidas las 10 personas, los agresores introdujeron cinco de los cuerpos a la primer camioneta, misma que le prendieron fuego con gasolina hasta que quedó totalmente calcinada.
En la segunda camioneta introdujeron los cinco cuerpos restantes, a los que rociaron gasolina, pero no se quemaron por completo. El vehículo fue lanzado a un barranco de más de 100 metros, con la finalidad de simular un accidente.
El fiscal también detalló que el día de los hechos, elementos de la Guardia Nacional, Policía Ministerial Estatal y Protección Civil acudieron al lugar, después de recibir el reporte de un accidente carretero a través del número de emergencias 911.
La Fiscalía General del Estado de Guerrero (FGE) informó que continúa con las investigaciones, con la finalidad de llevar a los probables responsables ante las instancias correspondientes.
Finalmente, precisó que además de “Los Ardillos”, en la región operan grupos que se identifican como policías comunitarios denominados CRAC-PC-PF, CRAC-PC y Autodefensas por “la Paz y la Justicia”, quienes mantienen conflictos entre ellos desde hace varios años.
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— FGE Guerrero (@FGEGuerrero) January 22, 2020