El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, confirmó que la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) tiene retenidos dos embarques de vacunas contra el sarampión que se compraron en India.
Después de participar en la conferencia matutina del presidente, Andrés Manuel López Obrador, el subsecretario explicó a los medios de comunicación que la retención no se debe a que las vacunas no sean seguras para la población.
Lo que sucede, es que estas se usan para prevenir tres padecimientos: sarampión, paperas y rubéola. “Al momento de hacer la inspección del primer embarque que llegó en octubre de 2019, Cofepris encontró que, de acuerdo a la regulación mexicana, las vacunas que llegaron no son suficientemente potentes en rubéola”.
A través de la Comisión de Control Analítico y Ampliación de Cobertura (CCAYAC), la Cofepris determinó que en la vacuna triple viral, las fracciones sarampión y parotiditis se encuentran dentro de especificación en todos los lotes analizados, en tanto que la fracción rubéola presenta baja potencia; aunque los productos biológicos pasaron las pruebas de seguridad, por lo que no representan riesgos a la salud.
López-Gatell explicó que además de que las vacunas son seguras, la Organización Mundial de la Salud (OMS) lleva varios años revisando los estándares y considera que la potencia de la vacuna de rubéola había sido catalogada como insuficiente cuando en realidad, de acuerdo a nuevas clasificaciones, es competente.
Cuando Cofepris hizo esta primera retención, comentó López-Gatell, quedaba 40% de ese embarque de octubre que fueron 1.4 millones de dosis. “Estamos esperando, y esto es materia de días, hoy tenemos reunión con el titular de Cofepris de hecho, para resolver esta discrepancia de visiones entre la OMS y el estándar que desde hace varios años hay en México”.
Además de ese embarque de octubre, del que hay 40% de dosis detenidas, el 19 de diciembre llegó otro de 2 millones más. “Cofepris ya inició el proceso de inspección y en la medida en que resolvamos este diferendo de los estándares, podemos liberarlos y usarlos”.
Esta retención se registra un medio de un probable riesgo de desabasto de vacunas de sarampión en momentos en los que hay un nuevo brote de la enfermedad en el país.
Animal Político publicó en agosto que Ruy López, director del Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades (Cenaprece) reportaba desabasto de estas vacunas en cuatro estados: Guanajuato, Querétaro, Durango y Guerrero.
Y es que en 2018, Laboratorios Imperiales Pharma SA de CV firmó dos contratos con la Secretaría de Salud para vacunas doble viral (sarampión y rubeola) y triple viral (sarampión, rubeola y parotiditis). La dependencia reportó que la empresa incumplió totalmente el primero, que incluía más de 773 mil dosis, y del segundo falló en una de las cuatro entregas.
Por esta razón, la Secretaría de la Función Pública (SFP) inhabilitó a Laboratorios Imperiales Pharma y el 5 de agosto de 2019 se publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF), la circular en la que se comunicaba a las dependencias que debían abstenerse de celebrar contratos con la empresa.
López-Gatell detalló que la vacuna retenida en octubre y diciembre por Cofepris se le compró a una empresa paraestatal extranjera, al Instituto Serológico de India, que desde hace más de dos décadas le vende a más de 140 países en el mundo, entre ellos todos los del sistema de Naciones Unidas, “este dato para los agoreros que dicen que estamos comprando en países misteriosos”.