La producción de petróleo en México durante 2019 registró una caída de 7.0 por ciento respecto al año inmediato anterior, al promediar en un millón 679.1 mil barriles diarios, por debajo del millón 810.1 mil barriles de 2018, de acuerdo con la información de la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH).
Petróleos Mexicanos (Pemex) reportó 97 por ciento del hidrocarburo obtenido el año pasado, equivalente a un millón 664 mil barriles diarios, de los cuales un millón 609 mil fueron de las asignaciones y 55 mil barriles de migraciones.
Mientras que las empresas privadas lograron el restante 3.0 por ciento de la producción nacional, equivalente a 48 mil barriles diarios en promedio, donde 20 mil provienen de migraciones, 17 mil de las rondas de licitación y 11 mil de asociaciones.
Solo en diciembre pasado, la producción de petróleo alcanzó un millón 711.8 mil barriles diarios, un crecimiento de 0.5 por ciento respecto a noviembre de 2019 y de 0.3 por ciento en relación con diciembre de 2018
A su vez, la producción de gas durante el año pasado promedió tres mil 805.5 millones de pies cúbicos diarios, cifra 3.0 por ciento mayor a los tres mil 705.3 millones diarios registrados en 2018
En diciembre de 2019, la producción de gas osciló en tres mil 913.1 millones de pies cúbicos diarios, lo que presenta un retroceso de 0.8 por ciento respecto a noviembre de 2019 y un crecimiento de 6.2 por ciento a diciembre de 2018.
El analista de la consultora IHS Markit, Erick Sánchez Salas, recordó que la meta original para el año pasado fue de un millón 951 mil barriles de producción, la cual en septiembre se recortó a un millón 778 mil barriles.
El analista dijo en entrevista con Notimex que esto pone al país a casi 100 mil barriles de la meta promedio de producción anual, lo que “complica la meta sexenal originalmente planteada en 2.6 millones de barriles, hoy ajustada a 2.4 millones, cifra que se observa igualmente difícil de alcanzar con los actuales resultados”.
En su opinión, habrá que tener cuidado que la estrategia de producción acelerada no resulte hacia 2021 contraproducente, ya que un agotamiento acelerado de los principales campos productores de Pemex, en 2020, podría llevar a una caída sustancial en el año siguiente.
Sin embargo, aclaró, los barriles producidos pueden no ser el mejor indicador del desempeño de una petrolera, y particularmente de una NOC (empresa petrolera del Estado), en la que se busca maximizar el valor para beneficio del país y sus ciudadanos, sino la rentabilidad, una materia aún pendiente para Pemex.