“Le muerden la mano a quien les quitó el bozal”. Esta fue la última frase que usó el presidente Andrés Manuel López Obrador para criticar a los medios de comunicación por la forma en que se cubrió el operativo fallido para detener a Ovidio Guzmán en Culiacán.
El mandatario citó esa frase del político liberal Gustavo A Madero para señalar a los medios que critican las acciones de su gobierno porque hay libertad de expresión.
Sobre este comentario, López Obrador afirmó este viernes que no era su propósito comparar a los representantes de los medios con animales.
“No hace mal el que brote la ruda franqueza, aunque estemos en el altiplano y no en el trópico, hace bien, siempre ayuda, y lo de mi expresión retomando la frase de Gustavo A Madero, pues no tenía ese propósito, no era igualar a los periodistas con ningún animal, además le tengo hasta respeto a los animales, a los perros, no era esa la idea, que también no se entienda, es la historia, la expresión es muy fuerte, lo dije, se padeció mucho en ese entonces”, comentó.
Al cuestionarlo si tenía conocimiento de las tendencias en redes como “PrensaProstituida”, “PrensaChayotera” y “PrensaSicaria” y las ofensas hacia periodistas y sus familiares, descartó que se generen desde granjas de bots, más bien, son reacciones de la gente “auténticas, no artificiales”, pues la ciudadanía esta muy politizada.
“Hasta me extraña porque la verdad la verdad no creo, y eso es interesante de investigarlo, no creo que se haya hecho, creo que fue la reacción de la gente”, afirmó.
Se le informó que algunos comunicadores habían recibido amenazas de muerte y planteó que podrían ser bots de sus adversarios para “amarrar navajas”.
Consideró que ya no hay ciudadanos imaginarios, ya la gente está más que despierta. “Se tiene ese instrumento que antes no existía que son las redes sociales, entonces cualquier cosa que la gente considera no adecuada a su criterio lo expone con libertad”.
Preguntas en sus conferencias matutinas por parte de los representantes de los medios de comunicación han desatado en sus 11 meses de gobierno calificativos como: hampa del periodismo, prensa fifí, conservadores, chayoteros, maiceados y señalarlos en tono sarcástico como paladines de la transparencia y la honestidad.
El presidente ha dicho en varias ocasiones que respeta a la prensa y que en su gobierno habrá libertad de expresión, pero que no se quedará callado ante los ataques de medios y que garantizaría un diálogo circular.
Desde marzo, la organización Artículo 19 advirtió que las expresiones del presidente en contra de la prensa pueden incentivar ataques contra periodistas e incrementa el nivel de vulnerabilidad y riesgo al que se enfrentan en el país más peligroso para ejercer la libertad de expresión en América, donde sólo en el sexenio de Enrique Peña Nieto se documentaron 47 asesinatos.
A continuación, un recuento de los calificativos que ha usado:
“Sacaron el cobre”, así se refirió el mandatario hacia los medios al recriminarlos por la cobertura de operativo en Culiacán. “Se nos lanzaron con todo desde los supuestamente más independientes, hasta los boletines o pasquines al servicio del conservadurismo”, acusó apenas el 30 de octubre.
El 18 de octubre, cuando justificó la liberación del hijo del ‘Chapo’ porque estaba en riesgo la vida de muchos ciudadanos, un periodista le preguntó si reconocía que su estrategia en seguridad había fracasado.
Luego el presidente cuestionó de qué periódico eres, al saber que era de Reforma dijo: “Está muy difícil que el Reforma acepte y reconozca que vamos bien. Porque el Reforma es un periódico de la oposición, un periódico conservador, como han existido los medios conservadores todo el tiempo. Digo esto porque ya también basta de estar aparentando de que se es independiente cuando se representa a grupos de intereses creados”.
En reiteradas ocasiones López Obrador ha acusado a este medio de inventar, volar notas y obedecer a los intereses del expresidente Carlos Salinas de Gortari. El presidente ha tachado a Reforma de ser un adversario político, un oponente.
“Es un periódico que surge en el gobierno de Salinas, que ha procurado no tocar a Salinas, que nunca cuestionó el saqueo neoliberal, que simuló que combatía la corrupción, señalando, acusando a funcionarios menores, a chivos expiatorios, que ayudó en el fraude electoral, ésas son nuestras diferencias”.
La frase “hampa del periodismo” fue otra expresión que usó al acusar que se está afectando a la llamada cuarta transformación y derivó de un cuestionamiento que se le hizo sobre el abasto de medicamentos en el país y el despido de personal del sector salud.
“No sé está despidiendo a nadie, es propaganda, es para afectarnos, ya ven cómo es el hampa del periodismo, no todos, desde luego, pero en el hampa del periodismo se usa mucho que la calumnia cuando no mancha, tizna’, acusó.
“Prensa fifí” es otra de las expresiones más recurrentes que el presidente ha utilizado en reiteradas ocasiones, incluso desde la campaña presidencial, para referirse, según él a la “prensa conservadora”, la que no está de acuerdo con sus acciones.
¿Qué son para López Obrador los fifís? Los describe como “fantoches, conservadores, sabelotodo, hipócritas, doble cara”.
Además, en una de la conferencias, el mandatario destacó la prudencia de los periodistas y les dijo: “Aquí los están viendo y si ustedes se pasan pues ya saben lo que sucede, no”, lo cual fue interpretado como una amenaza.
Ese comentario ocurrió después de que durante su conferencia matutina del 12 de abril fuera cuestionado sobre cómo se sentía después del diálogo que sostuvo con el periodista de Univisión, Jorge Ramos, quien lo cuestionó sobre la inseguridad de México.
Al día siguiente, López Obrador dijo que se malinterpretó su mensaje sobre la prensa y que no era ninguna amenaza e insistió en que él se refería a que iba a ejercer su derecho de réplica y que no habrá censura por parte del gobierno.
Otro de los comentarios que hizo fue: “Hay periodistas, con todo respeto, que mienten como respiran”, esto, al ser cuestionado por lo reporteros sobre si César Yáñez regresaría a trabajar a su equipo tras las criticas por su boda.
En el noticiero de Radio Centro que encabezaba Carlos Loret de Mola se comentó que César Yáñez habría presentado su renuncia al presidente electo.
¿Le creen ustedes a Loret? Es una volada… hay periodistas, con todo respeto, que mienten como respiran y ya no lo vuelvo a decir, se acabó”.
El presidente también consideró que el titular de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Manuel Bartlett, enfrenta una campaña en su contra por parte de los conservadores y de la prensa fifí, luego de que se publicara una nota en la que informa que Bartlett Díaz tiene presuntamente 23 casas y que en su declaración 3de3, ante la Secretaría de la Función Pública, ocultó su relación con 12 empresas, además de que sostuvo no tener ningún tipo de conflicto de interés.
“Que no se pasen, ahora resulta que se dan una sacudida y ahora son los paladines de la transparencia y la honestidad, ya basta de hipocresía, el poder es humildad y hay que actuar con rectitud, con apego a la verdad”.