Dos agentes del Ministerio Público en la Ciudad de México fueron suspendidas de su cargo, mientras la Procuraduría General de Justicia capitalina investiga su presunta responsabilidad en las filtraciones de datos sobre una denuncia de violación en agravio de una joven de 17 años, presuntamente cometida por policías.
En un comunicado, la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México (PGJCDMX) informó que las agentes quedaron a disposición de la oficina de la Subprocuraduría de Averiguaciones Previas Centrales, hasta en tanto se aclare el caso y se determine la carpeta de investigación.
Niega #PGJCDMX haber despedido a dos MP; sin embargo, quedaron a disposición de la Subprocuraduría de A. P. Centrales hasta aclarar el caso y se determine la carpeta de investigación respecto a la filtración de datos sobre una denuncia de agresión sexual https://t.co/Nks5xj44ug
— Fiscalía CDMX (@FiscaliaCDMX) August 27, 2019
El caso por el que son investigadas las agentes es el de una joven de 17 años de edad, quien presentó una denuncia contra cuatro elementos de la policía capitalina, a quienes acusó de violarla dentro de una patrulla.
La noche del pasado 14 de agosto, medios de comunicación presentaron videos en los que supuestamente se observa lo que sucedió la noche en que denunció haber sido violada, y supuestas contradicciones respecto a sus dichos.
Un día después, la PGJCDMX descartó que los policías violaran a la joven. El vocero de la Procuraduría, Ulises Lara, aseguró que la narración de la víctima no corresponde con lo acontecido.
Actualmente no hay policías de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SCC) detenidos por estos hechos, pues, de acuerdo con las autoridades capitalinas, no existen elementos para imputarles cargos.
Tras estas declaraciones, mujeres de la Ciudad de México convocaron a una protesta el viernes 16 de agosto, en la que exigieron a las autoridades capitalinas investigar a los policías acusados de violación y a los trabajadores de la PGJCDMX para esclarecer las filtraciones de información sobre la víctima, quien, de acuerdo con la titular de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, tuvo que abandonar su domicilio por el acoso de medios y autoridades tras darse a conocer el caso.