Integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) llegaron al Zócalo capitalino, tras marchar desde San Cosme, para protestar contra la reforma educativa del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Durante el trayecto, los docentes afirmaron que la nueva reforma educativa, que está por promulgarse, es una ley “parchada” que no convence al magisterio disidente.
“El diálogo se ha quedado en buenas intenciones sin dar solución, en los hechos, a varias demandas, como la reinstalación de 586 cesados, así como poner fin a las retenciones salariales, descuentos indebidos, e incidencias administrativas derivadas del desconocimiento de los derechos consagrados en el 123 Constitucional”, destacaron algunos miembros de la Coordinadora.
Además, los profesores de Oaxaca, Chiapas, Guerreo, Michoacán y la Ciudad de México demandaron resarcir todas las consecuencias de la reforma educativa promulgada en el 2013 por el expresidente Enrique Peña Nieto.
La CNTE indicó que los docentes rechazan “el proceso legislativo de la reforma educativa de la 4T”, por lo que convocaron a un paro de 72 horas y a marchas en diferentes entidades, ante la falta de acuerdos con el gobierno federal”.
Muchos aseguraron que no estaban enterados que por la mañana el presidente anunció que el próximo lunes por la tarde recibirá en Palacio Nacional a dirigentes de la CNTE y del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).
Se espera que la CNTE emita algún pronunciamiento sobre la reunión con el mandatario federal.
Con el aval de 22 Congresos estatales y el de la Ciudad de México, la Comisión Permanente del Congreso declaró la constitucionalidad de la reforma educativa, por lo que se remitió al Diario Oficial de la Federación para su publicación.
La nueva reforma entrará en vigor a partir de mañana 16 de mayo.
Con información de Reforma y Notimex