La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) realizó un estudio de calidad a diversas marcas de atún envasado que se encuentran en el mercado y encontró que 18 de las 57 presentaciones analizadas contienen soya, sin que se precise al consumidor la cantidad de la misma.
A través de un comunicado, la Profeco informó que en una de las presentaciones analizadas se encontró hasta 62% de soya en masa drenada, por lo que se puede establecer (en este caso) que el consumidor no está adquiriendo atún, sino soya con atún.
En el estudio, realizado del 5 de octubre al 14 de diciembre de 2018 por el Laboratorio Nacional de Protección, se aplicaron 3 mil 21 pruebas, a 57 presentaciones de distintas marcas de atún envasado, de las cuales 17 son de presentación compacto o sólido, 15 en trozo, 14 en hojuela, 10 desmenuzados y una marca no indica la presentación.
Para evaluar su calidad, indicó la Profeco, se determinó la información comercial, contenido neto, masa drenada, contenido de soya, medio de cobertura y proteína.
Detalló que, entre los resultados obtenidos, se encontró que 18 presentaciones contenían soya en un porcentaje que va del 1.0% al 62%, sin que el producto precise al consumidor qué cantidad tiene el producto que está comprando.
Estas son las marcas analizadas y la cantidad de soya que se encontró:
Explicó que el estudio encontró que tres productos contienen menos masa drenada y tres productos tienen menos contenido neto, incumpliendo con la NOM-002-SCFI-2011, Productos preenvasados-Contenido neto-Tolerancias y métodos de verificación.
De los productos evaluados, en 7 se encontró que incumplen con la presentación ofrecida, faltando a la NOM-084-SCFI-1994, Información comercial-Especificaciones de información comercial y sanitaria para productos de atún y bonita pre envasados.
De ahí que la Profeco recomienda al consumidor, al momento de comprar atún envasado, leer cuidadosamente la etiqueta, revisar los ingredientes en la etiqueta para identificar si el producto contiene soya, verificar la fecha de caducidad y no consumir envases con cualquier alteración y textura desagradable.
Refirió que al adquirirlas, las latas de atún se deben conservar en lugares exentos de humedad y alejados de altas temperaturas. Si no se consume el producto en su totalidad se debe guardar en un recipiente limpio y refrigerar.
La Profeco invita al público a conocer los resultados completos del estudio sobre el atún en la edición de marzo de la Revista del Consumidor.