Seis policías municipales de Orizaba, Veracruz se encuentran detenidos y bajo investigación de la Fiscalía General de Justicia de ese estado, luego de que en la mañana de ayer, 1 de noviembre, presuntamente dispararon contra dos hermanos, un maestro de secundaria de 31 años de edad y un doctor de 36 años, quienes minutos después murieron.
Los hechos ocurrieron frente a la casa y consultorio de una de las víctimas, el doctor Ernesto Pérez González, quien aproximadamente a las 5 de la mañana se despertó y salió de la vivienda al escuchar disparos en la calle y la voz de su hermano Román, quien era perseguido por los policías.
Los padres de los dos hermanos, que también se encontraban en el domicilio, relataron en un video que los policías municipales le dispararon sin razón a ambos profesionistas y después se negaron a llamar a una ambulancia, lo que provocó que fallecieran desangrados.
“Los policías me obligaron a que me metiera a la casa pese a que mi hijo se estaba desangrando, les dije que llamaran a una ambulancia. Luego vi que se pusieron unos guantes. Cuando salí ya habían movido los cuerpos y dejaron un arma que supuestamente traía uno de mis hijos pero eso es falso, porque ellos no andaban armados. Ellos son profesionistas y vivían de su trabajo” dijo la madre de las víctimas.
Los primeros reportes oficiales, manejados a nivel local por varios medios en Veracruz, hablaban de una supuesta persecución o enfrentamiento entre uno de los hermanos y los policías. En la tarde de ayer el Director de Gobierno del Municipio de Orizaba, Juan Ramón Heredia, dijo en una conferencia de prensa que no se encubriría a nadie y que la Fiscalía del estado sería la encargada de esclarecer lo sucedido.
Autoridades estatales con conocimiento de este caso informaron a Animal Político que desde ayer fueron detenidos seis policías municipales quienes quedaron a disposición del Ministerio Público para que rindan una declaración.
Además se esperan los resultados de peritajes en materia de criminalística, balística y química para confirmar que agentes habrían accionado armas de fuego y cómo sucedieron los hechos.
De acuerdo con las reglas del sistema penal actual, el Ministerio Público tiene un lapso de 48 horas para definir la situación de las personas que se encuentren a su disposición y determinar, en este caso, si hay elementos para presentar a los policías ante un juez de control y hacer una acusación inicial. Dicho plazo vencerá el día de mañana.
De acuerdo con las fuentes consultadas, hasta el momento la revisión de antecedentes no arrojaba que alguno de los hermanos asesinados tuviera algún historial criminal.